Era el comandante Callicut
Sinopsis de la película
Haciéndose pasar por un profesor, un oficial del ejército investiga a un grupo secesionista detectado en la California de 1850. Su misión es eliminarlo para preservar la Unión y evitar que el sur de California se convierta en un estado esclavista.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Man Behind the Gun
- Año: 1953
- Duración: 82
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes conseguir una copia de esta película en formato 4K y HD. Seguidamente te mostramos un listado de fuentes de descarga disponibles:
Opinión de la crítica
Película
5.1
55 valoraciones en total
Era, efectivamente, el comandante Ransome Callicut (Scott). Bien que lo sospechaba el ambicioso capitán Roy Gaels (Carey), que flirtea a la vez con la bella maestra Nora Roberts (Wymore) y con Jeanna Denon (Romay), no menos bella cantante que interpreta en el Palacio Buckley la habanera La paloma y otras piezas de sabor hispano. Por cierto, son estupendos todos los números musicales de este coliseo.
Corre el año 1850 y desde San Pedro llega a Los Ángeles Callicut tratando en vano, como vemos, de pasar desapercibido bajo la cobertura de maestro de escuela ( Cuando uno llega al Oeste nunca le hacen tantas preguntas ). Y llega en una diligencia que es asaltada por el camino, con el resultado que es de suponer contando con el viajero que llevaba dentro. Al Capitán Trueno, digo al comandante Callicut, con pistolicas de agua.
Y es que en la ciudad hay un problema grave: la falta de agua. Agua de primavera que se vende por las calles nada menos que a 25 centavos el trago, cuando uno de whisky cotiza a solo 10 centavos. Falta de agua que quieren aprovechar los partidarios de independizar el sur de California para garantizarse la continuidad de la esclavitud, ante el panorama bélico que iba a desencadenarse en la década siguiente.
Es cierto que hay un poco de lío con los conspiradores y los que quieren evitar la conspiración, acrecentado cuando unos y otros cambian de bando. Pero no hay duda que la película va ganando en interés a medida que transcurre la trama. La interpretación en general es muy solvente (Scott incluido), el guión es bueno y contiene algunos lances graciosos, la música ya hemos dicho que está a la altura, hay notables cabalgadas y tiroteos. Estamos por tanto ante una cinta muy recomendable para verla tranquilamente.
Al final, por supuesto, hay fiesta en Los Ángeles porque sus ciudadanos pueden disfrutar de agua en abundancia a bajo precio. La solución, de todas formas, no debió ser del todo definitiva, como pondrá de manifiesto diez años después Roman Polansky en Chinatown , donde el suministro de agua a la ciudad angelina constituye de nuevo el asunto central de la película.
La película es básicamente una sucesión de idas y venidas, arriba y abajo, adelante y atrás.
Entre que van y que vienen, tenemos ataques de gente que parecen estúpidos, tiroteos varios y variados entre buenos y malos, traiciones entre amigos y personajes con poco cerebro que son sacados de un torpe y muy mediocre guión, fruto de una época en que todo era licito y el espectador se tragaba las secuencias más ilógicas y peregrinas con la boca abierta de admiración, más el paso del tiempo ha convertido este western en un fósil.
El film se va desarrollando de manera cansina, simple y carente de interés, con grandes lagunas narrativas y fallos garrafales, ya que aparecen ríos donde no los hay.
También tiene elementos positivos, el encanto de visualizar una película de principios de los años 50 y unos personajes humanos.
Conclusión: Western muy menor, no es de ninguna manera un clásico de renombre.
Tres hombres llegan a la recién nacida ciudad de Los Ángeles con la intención de hacer fortuna a toda costa. Sin embargo, descubrirán que la ciudad está llena de bribones y conspiradores.
Parodiando el título de la cinta podríamos decir : Pues sí… era Randolph Scott , aunque parezca mentira oiga. Con el afamado Boetticher no se comía ni un colín con su cara de cartón, pero gracias a De Toth y a este director desconocido llamado Felix E. Feist, el amigo Randolph gana en expresividad, gestualidad y dinamismo. El espectador lo agradece y disfruta con su interpretación y con el ritmo, a veces trepidante, que imprime Feist. Éste se la juega con un complejo y enrevesado guión del que sale airoso, con eficacia en ocasiones, aunque con cierto simplismo en otras. De todas formas le agradecemos la jugada por dos razones: mejorar a cara de piedra Scott y hacernos pasar un rato estupendo con este western lleno de intriga y de intrigantes.
Básica, directa, llamativa, prometedora, dinámica, intrigante, atractiva, intrigante, ingeniosa, fluida, pasajera, inteligente, emocionante, magnética, adictiva y sorprendente producción que se presenta en el formato de western clásico, para una apasionante historia de intrigas, sospechas, engaños y traiciones en plena guerra de secesión.
Me ha parecido una producción muy correcta y elegante, presentando y desarrollando una trama que va ganando en interés y atractivo a medida que se van destapando las identidades e intereses de cada uno de los personajes implicados en la historia.
Considero que es una de esas películas que ha podido servir de inspiración al ingenioso y polémico director, Quentin Tarantino, para realizar sus particulares homenajes en producciones que llevan su firma. Voy a evitar entrar en detalles, pero si estás leyendo estos comentarios y eres seguidor del cine de Tarantino, te recomiendo que eches un vistazo a esta pequeña joya que merece ser descubierta.
Era el comandante Callicut, queda como un interesante, acertado y muy entretenido juego de engaños, sospechas, duelos y rivalidades que alcanzan un desenlace lleno de intrigas, sorpresas y emociones.