Los guardiamarinas

4 comentarios en «Los guardiamarinas»

1. Viendo la película a uno le dan ganas de enrolarse en la Marina… Buena película , obviamente patrocinada por la Marina , debían andar escasos de reclutas .Las escenas de maniobras militares con la colaboración del ejercito están muy bien rodadas y son emocionantes .Lo más creíble de la cinta es que dos tipos tan bellos como Manuel Zarzo , el formal el que ve en la Marina su futuro y Pepe Rubio el juerguista el alma de todo guateque que se precie se peleen por la diosa Paloma Valdés .Yo haría lo mismo ciertamente .La sonrisa de Paloma sobrevuela la película y estás deseando que salga de nuevo .Alberto de Mendoza y Julia Gutiérrez Caba están en su historia , mas melancólica mas familiar pero no por ello falta de fuerza . La última es la de López Vázquez quizás la más divertida con ese suegro que o se casa con su hija o que se atenga a las consecuencias y él que le teme mas a una boda que un perrofluta al jabón , en fin. Por cierto si queréis saber quién se queda con la preciosa Paloma Valdés que vea la película hasta el final que es muy agradable de ver .

2. La película es un remake de Botón de ancla y réune todos los tópicos del cine de cuarteles : camaradería, sacrificio, novatadas, el sargento tocapelotas,los ligues, etc.

   Teniendo en cuenta la época en la que se rodó lógicamente el ejército y la marina se presentan como unas instituciones en donde los hombres encuentran su razón de ser en la vida. Aún así, la película desprende una cierta nostalgia al reunir en su reparto actores de primera fila del momento como José Luis López Vázquez, Alfredo Landa y Julia Gutiérrez Caba rodeados de secundarios de lujo.

   En suma, si no le pide peras al olmo hasta seguro que le asomará una sonrisa viendo esta película.

3. Esta película es una guía didáctica completa de cómo es la vida de un militar de marina. Desde su ingreso en la academia, novatadas, día a día… hasta lo que les espera a sus mujeres, enjauladas y dispuestas pa su señor .

   Vemos de nuevo a Pepe Rubio en un papel de hijo de papá que acaba siendo un héroe… Y al dúo Landa-López Vázquez, que aquí desentona, pues se trata de una cinta de propaganda sin una chispa de humor. Más bien el drama que supone ese final.

4. Una de las pocas películas de Lazaga que carecen por completo de interés. Sobre todo es interés estético lo que ofrece la mayor parte de la filmografía de este cineasta pero aquí su habilidad para ofrecer imágenes bien encuadradas quedó anulada por una historia tragicómica verdaderamente horrible donde no funciona ni lo cómico ni lo dramático por separado y que analizando el conjunto de la película donde se unen las dos tendencias el resultado es un engendro. Landa no resulta gracioso en su tópico papel y López Vázquez está algo mejor pero la cinta tiene un escaso valor artístico. Manuel Zarzo y José Rubio son rivales por culpa de una dinámica chica a la que interpreta Paloma Valdés que está desaprovechada y lejos de uno de sus mejores papeles, el que tuvo en El rostro del asesino con el mismo Lazaga como director. La rivalidad entre los dos personajes no despierta ninguna atención y además se va intuyendo un final fatalmente planificado respecto a este conflicto. Tanto la finísima actriz mentada como Zarzo y Rubio ofrecen interpretaciones francamente mediocres porque el desafortunado guión no permite más que eso a los actores. Ese guión influye decisivamente en las interpretaciones de una serie de intérpretes que unos buenos y otros más bien mediocres ofrecen. Lazaga había realizado ya un buen número de películas aceptables antes de tener con Los guardiamarinas uno de sus más lamentables tropiezos.