The Gene Krupa Story
Sinopsis de la película
La historia del legendario batería de jazz Gene Krupa. Desde su juventud, todo lo que ha querido hacer Gene es tocar la batería y hacer música. Sin embargo sus padres no lo aprueban, ya que quieren que se convierta en sacerdote.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Gene Krupa Story
- Año: 1959
- Duración: 101
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes descargar una copia la película en formato 4K y HD. Seguidamente te detallamos un listado de opciones de descarga directa activas:
No es una gran película pero tampoco es una película detestable. Si estás interesado en la obra de Gene Krupa y de los pioneros de la batería moderna es interesante aunque sólo sea por ver esas preciosas Slingerland con las que toca durante todo el filme. Puedes encontrarte a alguna de las figuras del jazz de la época en la película. Sólo por eso merece la pena. En cuanto al guión… bueno, es una historia de éxito, caída y superación. Que nadie se espere un documental.
La producción del cineasta Don Weis tiene su repercusión más destacada en la larga lista de series de televisión en la que participó, lo cual no le impidió crear algo más de una docena de películas entre las cuales The affairs of Dobie Gillis (1953), Pajama Party (1964) o, la que nos ocupa The Gene Krupa Story dirigida en 1959. Weis trata la historia de Gene Krupa mediante el repaso de una parte importante en su vida, uno de los bateristas más destacados del jazz. El realizador centra su narración desde el momento en el que decide que su vocación es la música.
Un gran plano cenital en lenta y continua progresión descendente, acerca su objetivo hasta Gene Krupa (Sal Mineo) mientras los títulos de crédito van presentando al elenco junto a la música del gran drummer, tras lo cual, Don Weis sitúa al joven Krupa en exteriores y plano de seguimiento, el el año 1927, ilusionado con su batería a cuestas y lleno deseos por agradar a su família, concretamente a su temperamental Padre (John Bleifer) chocando así con los planes que este le tenía guardados: convertirlo al sacerdocio, reflejado en la estupenda fotografía del veterano Charles Lawton Jr., responsable de grandes metrajes en blanco y negro, entre los cuales el espectacular La dama de Shanghai (1947) de Orson Welles.
Ajeno a los consejos de la familia, Krupa comienza a relacionarse, incitado por el entorno y su imparable deseo de ser un gran baterista, conoce en plena fiesta a Ethel Maguire (Susan Kohner,) entablando una gran amistad. Animados planos americanos y medios entre otros, nos lleva hacia las primeras evoluciones, los primeros ensayos junto a su gran amigo y trompetista Eddie Sirota (James Darren). Las malas noticias no tardan en llegar, al conocer el fallecimiento de su padre, lo cual le crea el suficiente cargo de culpabilidad emocional como para acceder al deseo de su difunto patriarca: ser seminarista para ejercer en el sacerdocio, aunque su verdadera vocación nunca dejó de sonar en su cabeza.
Reorientada su vida, entra nuevamente en contacto con sus viejos amigos de juventud, llegándole sus primeras oportunidades, donde, después de un tiempo vuelve a reencontrarse a sí mismo evolucionando profesionalmente, momento en el que en un intento desesperado de la madre, que le considera una causa perdida para la vocación religiosa, le visita en su ambiente acompañada por su hermano Ted Krupa (Gavin MacLeod), nada hace cambiar sobre su decisión al espectacular drummer, sensacional Krupa.
Por medio de la elipsis, Weis nos sumerge de lleno en las primeras giras y los primeros sabores del éxito de nuestro protagonista, cosechando conquistas artísticas y de otro tipo que le harán olvidar temporalmente la atracción sentimental que siempre ha sentido hacia Ethel. Por otro lado, la temperamental Dorissa Dinell (Susan Oliver) cantante de su grupo, le dificulta su evolución al achacarle al drummer, detalles técnicos que debería corregir en su modo de tocar, o dicho de otro modo: los celos profesionales enfrentados en el protagonismo interpretativo, lo que le lleva a nuestro protagonista, además, a situaciones muy comprometidas, haciendo peligrar la estabilidad en su carrera musical que le arrastran a tener cuentas con la justicia.
Una nueva elipsis nos sitúa en un Krupa con deseos de reintegrarse aceptando trabajos de poca monta para sobrevivir, reencontrándose en el camino con Ethel Maguire. Para el músico, su tiempo presente está dificultando la reintegración en sociedad, muchos compañeros de profesión le gira la espalda debido a su más reciente y delicado pasado, hasta que le llega nuevamente su oportunidad de la mano de Tommy Dorsey (Bobby Troup) a lo que contribuyeron además, verdaderos músicos del swing algunos de los cuales encarnando personajes tales como: el ya mencionado Bobby Troup, el Trompetista Red Nichols), la gran Cantante (Anita O’ Day), o el Baterista (Shelly Manne) entre otros, coronado con un gran número final digno del mejor jazz en directo. Excelente metraje de Don Weis que nos acerca a la vida del considerado uno de los más destacados e influyentes drummer del jazz de todos los tiempos, el legendario Gene Krupa.