Terminator Salvation
Sinopsis de la película
Nueva entrega de la saga de Terminator, que transcurre en 2018, tras el día del Juicio Final. John Connor (Christian Bale) es el hombre destinado a liderar la resistencia de los seres humanos contra Skynet y su ejército de Terminators. Pero la vida de Connor se ve alterada por la aparición de Marcus Wright (Sam Worthington), un desconocido que afirma haber estado en el corredor de la muerte y haber conocido a su padre (Anton Yelchin). En una carrera contrarreloj, Connor debe averiguar si Marcus ha sido enviado desde el futuro o rescatado del pasado. Mientras, la Resistencia prepara el ataque final contra el centro de operaciones de Skynet.
Detalles de la película
- Titulo Original: Terminator Salvation: The Future Begins (Terminator 4)
- Año: 2009
- Duración: 115
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Opinión de la crítica
5.9
61 valoraciones en total
Pais
Directores
Actores
- Anjul Nigam
- Anton Yelchin
- Babak Tafti
- Beth Bailey
- Boots Southerland
- Brian Steele
- Bruce McIntosh
- Bryce Dallas Howard
- Buster Reeves
- Chris Ashworth
- Chris Browning
- Christian Bale
- Common
- David Douglas
- David Midthunder
- Dorian Nkono
- Dylan Kenin
- Emerson Brooks
- Esodie Geiger
- Greg Serano
- Helena Bonham Carter
- Isaac Kappy
- Ivan GVera
- Jane Alexander
- Joe Basile
- Kevin Wiggins
- Maria Bethke
- Michael Ironside
- Michael Papajohn
- Moon Bloodgood
- Omar Paz
- Rafael Herrera
- Roland Kickinger
- Sam Worthington
- Terry Crews
- Treva Etienne
- Victor J. Ho
- Zach McGowan
¡Y es que menudo festival de la caspa!
No, ya no hablo de los movimientos de cámara y la fotografía, que están medianamente cuidados, sino de todos los demás elementos del guión que, para variar, son de un ridículo y un cutre que asustan: no sólo las chorradas que se sacan de la manga (a saber: motos Terminator, tipos rebotando por el agua cual piedra, piruetas y escenas cuanto más inverosímiles mejor, etc..), sino los tópicos que estas pelis machaconas de acción empiezan a ser siempre iguales y a tocar los cojones (negros que hablan, y parece que vayan a cantarte un rap en cualquier momento, chicas florero a tutiplén, buenos con carisma que se interponen en los planes de sus superiores y son capaces de interceder en sus planes, etc..).
Eso sí, uno no salió de la sala como Copito de nieve sólo por la caspa, no.. es que, además, estas mierdas también envejecen. Vamos, estoy absolutamente seguro de ello. Esto tiene que acortar la vida por cojones.
Lo peor de todo, sin embargo, no es que reciclen todos los componentes de las pelis anteriores (incluso de la serie) y les salga un cóctel tan intragable como irrisorio, con esos discursitos en off de los protas (se han apuntado al carro de Sarah Connor Chronicles , por lo visto), esos momentos de acción finales calcados a Terminator 2 y demás, sino que, para colmo, se patean y repatean sin ningún tipo de pudor las bases sentadas en los dos primeros films de Cameron: allí, el Terminator tenía una función específica y su objetivo era concreto, no llegando hasta la conclusión de su segunda parte a desarrollar alguna emoción propia, y aquí resulta que nos quieren hacer tragar con patatas que un Terminator sienta algo por alguien, se enamore y hasta se rebele. Así que digo yo que habrá que suponer que al pasado (o sease, lo que vendría a ser Terminator ) mandaron un Terminator tonto, no fuese a suceder que se pillase por John Connor, y la liásemos… manda cojones.
Para mayor Inri, aun tienen el valor de realizar homenajes cuando se han dedicado a despedazar la saga entera con esta boñiga y, sin ir más lejos, incluso de meter ahí a un Chuache más digitalizado que Belén Esteban en las portadas de las revistas del corazón.
Vaya, que aquí lo único que mola son las pibas, Ironside (vaya mítico, y en menudos saraos se mete el pobre) y Bale. Porque para echarme unos vicios, enchufo la Nintendo, y a tomarpocu, oye…
Recuerdo cuando fui al cine a ver Terminator 2. Recuerdo que fui con mi padre a un cine, solo uno, cuando las multisalas todavía no eliminaron de la faz de la tierra el encanto que tenían los antiguos cines. También recuerdo que la película me dejó fascinado por la fuerza de sus imágenes sus efectos visuales que marcaron un antes y un después (amén por el T-1000). Pero la cinta tenía un elemento que pese al espectáculo titánico no se descuidó: La emoción. Es la diferencia entre los productos y las obras de un artista, el sentimiento del que impregnas tu obra, con la que la mimas y le das forma. Terminador 2 tenía lo mejor de ser un producto y las mejores cualidades del cine, entre ellas, emocionar…
Ha pasado mucho tiempo del día del juicio final, de los días de Jungla de Cristal, Arma Letal, Robocop y Terminator… Los tiempos han dado paso a la era digital, en la que esta nueva entrega de la saga tira de todo el dinero del mundo en escenas de acción tan espectaculares como poco creíbles. Os aseguro que cualquier comparación con las dos primeras entregas de la saga dejan en mal lugar a la película que nos ocupa (hasta hace que la tercera sea digna). Y es una lástima, ya que la película nos la vendieron muy bien. Trailers que quitaban la respiración, la supuesta bendición de James Cameron y un protagonista con credibilidad a partes iguales entre comercialidad y prestigio, Christian Bale.
La película es atropellada, los personajes no se desarrollan y la acción en ningún momento resulta estimulante, ya que por mucho dinero y efectos me creo más los animatronics de Cameron que los CGI de McG. Ni los guiños a las anteriores películas hacen que se dibuje una sonrisa en mi cara, porque hay un punto en el que uno se da cuenta que el dinero mató a la creatividad, y que la emoción desapareció en el mundo digital.
Mal paso a dado Bale al aceptar protagonizar (el verdadero protagonista es el emergente Sam Worthington) esta película, ya que da la impresión de que el actor no quiere estar ahí, ya que no es lo mismo venir de los cielos de Gotham que aterrizar en los infiernos del juicio final, y no el de Cameron, sino en el de la falta de talento maquillada con 200 millones de dólares de presupuesto.
Que bonito fue el día que vi Terminator 2.
Quién iba a decirnos que este film, maltratado en su momento, iba a ser de lo mejor de la saga. Especialmente, visto el resultado de Genysys y Dark Fate.
Por que sí – este futuro no es el nocturno que Iron Jim Cameron levantó. Es mucho más diurno y Madmaxiano. Por otra parte, tenemos algunas ideas quizás discutibles en su enfoque y a un Ble que hace un personaje a su manera. En cierto modo (bastante claro), esto se aleja del canon. Pero —
— oigan: al final resultó no ser tan mala idea. Entre esto y el aburrido loop temporal lleno de referencias de coas como Dark Fate, al menos aquí tenemos un material que quiere montarse la película (no pun intended) a su manera, desmarcándose de los demás. Y en ese aspecto, resulta refrescante caray. También hay alguna idea de cast acertada (coger al tío de Avatar como personaje en otra saga cameroniana resulta acertado), unas sete pieces con sorprendente cantidad de elementos físicos, unos cyborgs honrosamente difícil de matar (dignos de la saga, caray) y unos FX sonoros de un nivel notable, amén de alguna secuencia con ideas de cámara acertada (como esa explosión nuclear con helicóptero volante) dignas de mención.
¿Gran película? No. ¿Al nivel de t1 y t2? Hellnaw. Pero es diferente, intenta cosas distintas y no es una serie de momentos de fan service. Merece la pena defenderla un poco hoy por hoy.
Que el director de esta revitalización/continuación de una de las sagas más atrevidas y originales de la ciencia ficción, Terminator , fuese el responsable de los despropósitos de Los ángeles de Charlie no auguraba nada nuevo. Pero que Christian Bale (amante de las dos primeras partes y detractor de la tercera) se interesase por el proyecto y que Jonathan Nolan, coescritor del espléndido guión de El caballero oscuro fuera contratado para retocar este Terminator Salvation daba esperanzas de que lo que nos esperase podía ser mínimamente bueno.
Nada más lejos de la realidad. El futuro gobernado por las máquinas y defendido a ultranza por John Connor y la resistencia humana es mucho más oscuro, lúgubre y escalofriante en cualquiera de las escenas que se mostraban tanto en Terminator como en su deslumbrante secuela, Terminator 2: El juicio final . Bale parece un poco perdido en su labor de líder indiscutible de los humanos, resultando muy superior el niño que lo encarnó en la segunda parte, Edward Furlong. Sam Worthington es realmente el único que consigue transmitir algo, aunque su personaje quiera abarcar más de lo que realmente puede. Con todo, es lo único interesante de una película que hace un aparatoso despliegue de efectos especiales (cameo de Arnold incluido, de lo mejor de la película) y que carece de alma o épica.
Este no es el futuro del que mi madré me advirtió , comenta Bale en una secuencia del filme. No hay duda de que se han equivocado. Apenas hay tiempo para desarrollar una buena historia y el señor McG se limita a llenar de caras famosas su plantel de actores (incomprensible que esté ahí Bryce Dallas Howard) y a mostrar escaramuzas y misiones aburridas en su mayor parte, una resistencia humana que parece que esté dando un paseo por el parque y muchos, muchísimos robots. En un momento me pregunté si no me había equivocado de sala y me había metido en Transformers . El futuro para el que Sarah Connor (fabulosa Linda Hamilton) estuvo preparando a su hijo no puede ser este. Simple y llanamente.
Como no hay nadie que vaya a ver esta película que no esté familiarizado con la terminología, vayamos al grano:
1) El director conocido como McG comparte con James Cameron únicamente la pertenencia a los Homo sapiens, pero es cierto que cumple mínimamente con el material que le han dado, y entre secuencia y secuencia de imagen sintética es capaz de meter unos cuantos planos que no parecen sacados de un videoclip de Hip Hop o un anuncio de cereales, como invita a pensar el nombre del sujeto. No tengo nada más que decir de este señor, ni bueno ni malo.
2) El guión… Cuando se produjo la famosa huelga de guionistas de hace un tiempo ¿por qué se protestaba exactamente?. ¿Por la hora del bocadillo?. ¿Por cobrar por idea realmente original?. El caso es que se toma el hilo argumental de las tres primeras películas y se sitúa la acción en plena guerra contra las máquinas, como no quiero rebelar nada fuera de los spoilers, solo les diré que cualquier aficionado de 14 años hubiera hecho algo más interesante. Por supuesto, todo queda abierto para nuevas películas.
3) El reparto cumple en general, salvo los típicos secundarios rídiculos, en este caso tenemos a dos militares, una pava despampanante y un tipejo que parece sacado de un vídeo cutre de la MTv que no pegan ni con cola. Bale despliega su intensidad habitual, Worthington pone la jeta y poco más, Dallas da apoyo logístico y el bueno de Ironside hace el único papel para el que nació. No me acuerdo si salía algún humano más en la película.
4) Aspectos técnicos: ILM. Ya está todo dicho.
En resumen, secuela de segunda fila en lo creativo más que en lo material, que aporta cosas bastantes mezquinas al universo iniciado por Cameron y que solo sirve de puente a una futura trilogía. Si es un gran fan de la saga vaya a verla porque salen nuevos artilugios y todo eso, pero si no, guarde su dinero.