Libertad para morir
Sinopsis de la película
Jean Claude Van Damme da vida a un oficial, un astuto detective que investiga a una serie de presos que se encuentran en la penitenciaria de Harrison, haciéndose pasar por uno más de los allí encarcelados. Pero tendrá que intentar escapar de la prisión cuando descubra el sorprendente secreto que se encuentra detrás de los trabajos internos que se llevan a cabo en la cárcel, enfrentándose a cientos de presos realmente brutales, a los guardias corruptos y a un enemigo mortal del pasado que no parará hasta verlo muerto…
Detalles de la película
- Titulo Original: Death Warrant
- Año: 1990
- Duración: 93
Opciones de descarga disponibles
Si deseas puedes obtener una copia de esta película en formato 4K y HD. Seguidamente te añadimos un listado de posibilidades de descarga disponibles:
Opinión de la crítica
Película
4.5
68 valoraciones en total
Como fan de Van Damme vaya esto por delante, me parece una de sus mejores y más conseguidas películas, ya que lo mezcla todo, acción y suspense por igual, drama en ciertos momentos, crea un ambiente claustrofóbico, como si estuviésemos dentro de la misma prisión, rodeados de gente sin escrúpulos capaz de rajarnos por nada.
La película narra la historia de un policía que se infiltra en una cárcel, con los ingredientes de toda película carcelaria (corrupción entre los alguaciles, violentos presidiarios dominados por el alcaide, drogas y licores fabricados por ellos mismos), allí el agente Bruke como si de un lobo solitario se tratase, intenta descubrir el porque de las muertes extrañas de varios presos, sin tener síntomas de enfermedad y con una salud inigualable. El trasfondo de un tráfico de órganos, para gente millonaria como suele pasar normalmente en asuntos caros y prohibidos.
El guión muy bien elaborado, sorprendente en ciertas fases y como novedad en las películas de Van Damme no se tiene que vengar de nadie, pues no han matado ni a su mujer, ni a su padre, ni su sensey, ni siquiera un amigo. Solo cumplir con un trabajo asignado como policía.
Por eso, es una de las razones que me parezca esta película redonda.
Van Damme, ese excepcional actor de cualidades interpretativas fuera de serie, con un toque de humanidad desaprovechado que muy pocos hemos descubierto, que encima se ha visto encasillado en papeles violentos tal vez por una mala gestión de su representante, se ve ahora obligado a infiltrarse en los mismísimos infiernos.
Todos los tópicos habidos y por haber están aquí. Van Damme se tendrá que enfrentar con presos carniceros y funcionarios de prisiones de peor ralea aún. Violencia sin contención de la que Van Damme en un ejercicio de honradez acepta con generosidad hasta el último minuto de la película, cuando su enfrentamiento con el hombre de arena dejaría en ridículo cualquier combate entre superhéroes y a éstos como mojigatos de lo más nenazas.
Tráeme un sueño, Van Damme… y mátalos a todos… A los buenos también, por favor.
Esta es una peli 100% estilo serie b ochentera…
La historia hoy en día no sorprende, pero es resultona. La peli tiene su toque siniestro. El ambiente de la cárcel está conseguido, aunque es extraño ver a algunos presos y ciertas cosas que hacen…
Lo que importa aquí, la acción, está bien, con un Van Damme en plena forma física que reparte sus patadas entre todos los malos…
No es una película especialmente destacable de entre la filmografía del belga pero es una película entretenida si te gustan las artes marciales y la acción.
Siendo objetivo, Libertad para morir no deja de ser una de esas películas de serie B, de finales de los 80 y principio de los 90, que suelen emitir como cintas de relleno en la programación de canales como Cinestar o Showtime Extreme por ejemplo. Pues sí, ya ha llovido bastante desde el día de su estreno, nada más y nada menos que 20 años, pero lo cierto es que esta película no deja de tener cierto encanto y soporta bien más de un visionado. No es precisamente uno de los mejores filmes de Jean-Claude Van Damme, pero tampoco es uno de los peores.
Bueno, vamos por partes. De entrada, quiero señalar que la cinta tiene un guión un poco más elaborado de lo que es habitual en los productos del actor belga (sobre todo en aquella época). Van Damme interpreta a un detective de policía, Louis Burke, que se infiltra de incógnito en una cárcel para investigar los misteriosos asesinatos de un nutrido grupo de presos, los cuales gozaban de buena salud y cuyas defunciones eran como mínimo sospechosas. Lo cierto es que al principio te sorprende el cariz de thriller carcelario que desprende el producto. Al poseer una justita pero buena acción, una pizca de suspense y un ambiente taleguero de lo más conseguido, hace que pese a sus carencias despierte un indudable interés.
Cierto es que un servidor goza de pleno con el género carcelario, del cual soy admirador de productos como Celda 211 o la serie Prison Break, pero siendo totalmente sincero he de admitir que el arranque y posterior desarrollo de la historia de este filme es bueno. Luego se jode la cosa al meter las típicas patadas voladoras y los caretos desencajados de los tíos cachas cuando se pegan de ostias, pero hasta la mitad del metraje esta cinta me gustó. Pero a partir de ahí se acaba su guión, el cual dicho sea de paso daba para mucho más, y empiezan las patadas en la boca, la violencia, y la sangre corre de forma gratuita. Es una lástima, pero tampoco puedo decir que no me lo esperase, ya que es una película de Van Damme.
En resumidas cuentas, Libertad para morir es una cinta entretenida que empieza bien, pero que en el momento en que meten acción a raudales baja mucho el listón. El producto se vuelve exagerado, surrealista y con un villano como Sandman que no sé muy bien que pinta en la historia (estuvo bien su introducción al comienzo pero luego… vaya tela). El filme en conjunto es mediocre, aunque resulta aceptable y merece un aprobado (más que nada por su primera mitad, si fuera por la segunda hubiera sido mejor que la llave inglesa que le tiraron a Van Damme le hubiera dado en la cabeza).
Buen drama carcelario del gran Fred Astaire del Kárate que tras Kickboxer y Lionheart, Van Damme se consolidaba como action hero y como un ídolo de masas en materia de pelis de tollinas y de entretenimiento. Curioso es que fue la primera película del guionista David S. Goyer, actualmente el escritor más solicitado por sus libretos en la trilogía de Batman o Man of Steel (y clavado a Stanley Tucci).
La historia trata del policía Louis Burke que se convierte en héroe local por haber neutralizado a Sandman, un asesino despiadado. Pero su próxima misión será infiltrarse en una prisión para destapar una trama de asesinatos sin resolver y nuestro protagonista al ser de Quebec pasará inadvertido.
La película posee un inicio prometedor con los típicos momentos en que todos toman a Van Damme por el pito del sereno hasta que con tres o cuatro patadas giratorias pone remedio a tal injusticia y se hace respetar. Hasta aquí bien. Pero más tarde cuando la historia y la trama principal obliga a Van Damme que a través de pistas consiga desenmascarar al culpable, no sucede así y todo el thriller se reduce a un motín para priorizar y forzar a que Van Damme reparta palizas cortas y mal hechas. Que me expliquen como alrededor del minuto 1:06:14 cuando Van Damme es acorralado por los guardias y varios presos, realiza una patada en dos tomas con el mismo plano unidas con el programa Movie Maker. Van Damme puede realizar ese golpe con los ojos cerrados y con un tapón de Moet Chandon metido en el culo si el guión lo requiere. Inexplicable.
Que sí, que yo si voy a ver a Van Damme es para que reparta palos, estoy absolutamente de acuerdo pero la base argumental desde un inicio es la resolución del caso y después, tal y como sucede, puedes realizar un combate final épico. Aún así aunque despachen rápidamente la trama principal con un método poco trabajado como buscando palabras que empiecen con SL (no es cachondeo) en definitiva es un film entretenido con un combate final muy digno para lucimiento de nuestro belga que nos deleita con una de aquellas patadas con salto, marca de la casa.