La sangre de las bestias (C)

5 comentarios en «La sangre de las bestias (C)»

1. Un film importante y estremecedor, que documenta la actividad rutinaria en varios mataderos de París. Tras la bucólica vida del extrarradio parisino que aparece al principio, nos adentramos en el infierno de los mataderos, un infierno, por lo mucho que me ha impresionado. Este documental es tan cruento, y a la vez tan frio y detallista, a la hora de mostrar cómo se mata, desuella y trocea a los animales que luego engrosan las carnicerías de la ciudad -en este caso, una gran ciudad como París- que hace tanto por la causa de los vegetarianos como el mejor de los panfletos, y seguramente sin proponérselo. Desde luego, si Franju lo hubiera rodado con película en color, sería prácticamente insoportable.

2. La sangre fría de las bestias es como tendría que haberse titulado este pavoroso documental.
   
   Y no llamo bestias a los carniceros ya que es su trabajo, y por desagradable que nos parezca, les da el sustento a ellos y a sus familias, y también sería hipócrita de mi parte ya que seguramente estaré comiendo carne de aquí a varios días, (hasta que algunas imágenes se disipen en mi mente) y lo más probable es que lo haga por el resto de mi vida.
   
   Es un documental que sin tener en cuenta el año en el que se produjo, pasaría tranquilamente como el trabajo de un vegetariano fundamentalista. Pero se realizó en 1949, la Segunda Guerra Mundial permanecía en la retina y en las pesadillas de casi toda Europa y es evidente que Georges Franju utilizó esta producción como metáfora para el Holocausto judío.
   
   Nos muestra la hipocresía humana, representada por unas monjas, que acuden a comprar carne sin saber o ignorando el sufrimiento previo de su compra. ¿El fin justifica los medios?
   
   El hombre tuvo conductas o acciones en el pasado, que hoy nos parecen simplemente atroces: los sacrificios humanos, la trepanación, la lucha a muerte entre gladiadores, la santa inquisición, los campos de exterminio, entre lamentablemente muchos más, y siempre me he preguntado que actividades actuales que a muchos nos pueden parecer normales, serán vistas con ojos de horror de aquí a 100 o 200 años, y creo que los métodos utilizados en los mataderos estarán dentro de los primeros tres, de aquella nefasta lista.
   
   Recuerda que el 30% de los alimentos que consumimos nos mantienen vivos, gracias al otro 70% sobreviven los médicos.
   
   Dr.Juventus

3. No creo que sea para todos los gustos, porque contiene algunas escenas francamente desagradables, si bien, éstas son las que podría esperar ver uno en un matadero.
   
   La narración es demasiado átona, pero la música está bien.
   
   Lo mejor es el cuidado que se pone en los encuadres, ya que la mayor parte de las escenas son como fotografías. Se juega mucho con los reflejos y las líneas de los edificios. Se observa también que la cámara no está puesta en absoluto al azar. Es lo que más valoro de la obra.
   
   Por otro lado, si bien algunos vegetarianos pueden encontrar argumentos en su favor, no creo que haya sido ésta la intención del director. Pienso más bien que reflejó lo mataderos tal cual son.

4. El trabajo en un matadero en París. Nos cuenta las diferentes formas de acabar con la vida de los animales que servirán de comida en nuestras mesas, en un documental de estilo directo y descriptivo.
   
   Aparecen a través de diferentes métodos cómo se lleva a cabo el sacrificio de los animales, el despellejamiento y el despiece con toda suerte de detalles… Las penosas condiciones en las que se trabajaba en los mataderos y la rutina de un trabajo mecánico y poco agradable.
   
   Documental con imágenes duras, que en realidad tampoco aporta mucho, si se piensa dos veces como será este oficio.

5. Lo que voy a escribir no es una crítica…en sentido estricto. Son unas anotaciones que tomé en clase de Historia del Cine Informativo que intentan analizar el contenido. El visionado de este documental en clase no dejó indiferente a nadie, y la profesora nos lo puso para iniciar el tema de las vanguardias a partir de 1945.He aquí las notas:
   
   – Metáfora con los campos del holocausto. También hay quién ve que puede tratarse de un documental pro-vegetariano. No sé cómo estaría el vegetarianismo en 1949, pero no creo que Franju estuviera pensando en eso. La situación histórica del momento exigía otras cosas.
   
   -Anticlericalismo. Hay una escena en donde unas monjitas van a comprar la carne, ajenas a toda la brutalidad del proceso para obtenerla. Insisto: no lo veo como una apología al vegetarianismo, sino como una pura crítica social. La hipocresía de un sector de la sociedad que no ve lo que pasa dentro (de la sociedad) porque no quiere o porque no sabe.
   
   -No hay mensaje directo. Esto es una característica propia de las vanguardias de después de la II Guerra Mundial.
   
   -Relación inconexa entre las imágenes. En un sitio leí la expresión crueldad surrealista , y me parece muy acertado. En ocasiones me recordó este documental a algunas escenas de El perro andaluz (el momento de la navaja en el ojo, o los burros muertos)
   
   -Pese a su intención vanguardista, sigue habiendo puesta en escena.