La Biblia (Miniserie de TV)

5 comentarios en «La Biblia (Miniserie de TV)»

1. Serie sobre la Biblia profundamente trepidante que deja un sabor de regusto en la boca, incluso tiempo después de haberla visto.
   
   Episodios resumidos de 40 minutos, el ritmo crece más y más trepidantemente que el de cualquier episodio de Game of Thrones.
   
   Y es que una vez más me queda claro que la Biblia es el mejor libro de aventuras y de reyes, de historia y de amor que existe, el que más verdades cuenta.
   
   Con grandes interpretaciones como Darwin Shaw o Greg Hicks pero personajes poco atractivos físicamente a excepción de Jesús, el antiguo y el nuevo testamento se reúnen para darse de la mano en una serie de una temporada única pero que lo cuenta absolutamente todo de quienes somos, lo que debemos hacer o a donde vamos. Maravilloso producto incluso para los no creyentes que solo quieren saber.

2. La Biblia es una serie que va de menos a más, que conforme avanzan los capítulos se vuelven más y más interesantes, siendo su momento más álgido el nuevo testamento.
   
   Siendo sincero, la Biblia, el libro, es un enorme tocho de historias a cada cual más fantástica e increíble, pero en cada una de ellas va inscrito un mensaje destinado al hombre, y en esta serie, lo importante, ha sido el mensaje, no las historias en sí, por eso su comienzo fue muy irregular y algo cansino y aburrido, pero como toda serie que merece verse, mejora con cada capitulo, por ello no entiendo a todos esos críticos de pacotilla que con ver un solo capitulo ya sacan conclusiones.
   
   Realmente, por cada historia, se puede hacer una gran película, y eso lo ha demostrado el cine con el paso de los años y las diferentes películas que nos han llegado, desde el Génesis, pasando por las historias de Caín y Abel, la de David y Goliat, la de Samson, el majestuoso Moisés, los más imaginativos Jesús del Nuevo Testamento hasta fantásticos e imaginativos Apocalipsis en nuestra época o en eras futuras, pero en esta serie, han preferido dejar en un segundo plano la historia, con actores de tercera fila y muchos de ellos ya decrépitos y en su declive artístico, junto con unas direcciones a cual más penosa, con escenas de acción más malas que las teleseries de los sesenta y por supuesto con guiones que rayan la mediocridad, pero todo ello es para transmitir lo qué realmente importa, y es el mensaje. Un mensaje que tiene un origen, un mensaje que pasa por decenas de desventuras y buenaventuras, y todo para llegar al tema más importante, al Hijo de Dios, Jesús, para transmitir una de las cosas más importantes, que es el Amor.
   
   En fin, como serie religiosa, creo que para los cristianos esta serie no tiene muchas pegas, para los agnósticos y ateos será una cagada, para las demás facciones religiosas, será una sátira de mentiras y para los amantes de las series no pasará de ser un producto interesante, que roza la mediocridad, y en cierto modo desaprovechado, donde con un poco más de interés artística se podía haber hecho algo más impactante y haber mantenido la idea original, que es la del mensaje de Amor.

3. Lo reconozco. Sabía que esta miniserie sería mala antes de empezarla. Pero me podía la curiosidad… ¿Qué mejor forma de pasar la Semana Santa en casa? Además, no sé mucho de la Biblia, así que esta podría ser la forma de ahorrarse sus millones de páginas…
   
   Pero no. Sé poco de La Biblia, desde luego, pero si algo sé es que no había chinos luchando con espadas ni supermagos propagando el poder que les da palabra de su Dios. Moisés, Abraham y el resto de personajes míticos parecen salidos de una película mala de aventuras fantásticas y dan la risa. Realmente me pregunto si sus creadores son personas religiosas y todo lo contrario, pues ninguna de las dos opciones tiene sentido.
   
   Para colmo, el vestuario es de tienda de disfraces y los escenarios de cartón piedra. Y ni siquiera los efectos visuales son dignos de este siglo. Desde luego, la técnica es tan falsa como la narración. Todo huele a reconstrucción barata. Solo la música de Hans Zimmer es aceptable.
   
   Y encima se intentan contar tantas cosas que es difícil enterarse de algo. Yo desde luego me he perdido con tanto nombre y acontecimiento cortado y editado de este modo tan abrupto. No da tiempo a nada. La grandeza mística de sus historias se pierde en una realización simplona y cutre que transpira artifiosidad y no aporta nada. Bueno, alguna risa de vez en cuando, pero no creo que ese fuera su propósito.
   
   Más cine en: http://laestaciondelfotogramaperdido.blogspot.com.es/

4. Basta, basta, basta, ¡¡por el amor de Dios!!
   
   La televisión ha vendido durante los últimos días esta serie bajo el comercial título de <>. Título que se ha convertido en epitafio. En efecto, ha debido conmover, pero también ha provocado sufrimiento e inspirado compasión.
   
   Los cinco primeros minutos los vi en español. Después, me empezaron a doler insufriblemente los oídos ante un doblaje tan patético y tuve que cambiar el idioma al original. Esto me hizo aguantar dos horas más y después, apagué la televisión: era una tortura inaguantable. No me hace falta ver más (aunque lo haré) para opinar acerca de esta… inefable producción.
   
   Enumerar los desajustes con respecto al texto bíblico supondría imbuirse en una infinita y desesperante enumeración… pero vamos con algunos de ellos hasta el momento.
   
   1) La Biblia me despertaba muchísimos interrogantes: ¿se atreverían a enfrentarse con el enorme reto la creación en sus siete fases? ¿Cómo trataría el mito de Adán y Eva: con la mazana de tradición cristiana o con el higo de tradición judía? ¿Representarían primero a la serpiente con patas, como sugiere Génesis ?… y mucho, mucho más. La sorpresa vino al observar la rápida sucesión de todas estas secuencias en cuestión de un breve minuto. Pero lo más horrible es que el arca de Noé y el Diluvio Universal se incluía dentro de este resumen tan cojo. Es… sencillamente inexplicable: un diluvio de cuarenta días reducido a unos segundos en pantalla, un arca que flota en unas aguas que más parecen plastilina de la mala… Y en diez minutos de documental (porque a veces parece un documental que te describe la verdad pretétira), ya estábamos en Gn:18. Insultante.
   
   2) Y después llega Abraham, interpretado por un actor que no sube de los cuarenta cuando la Biblia dice claramente que tenía más de noventa. Tiene que ser joven, porque hay que captar al público, pero es que encima es un personaje que despierta… de todo menos admiración por el gran patriarca. Más tarde, los celos de Sarah hacia la esclava Hagar no se entienden y La Biblia se vuelve en este punto una telenovela de las muy, muy baratas… No es Abraham, es Pedro Antonio Abraham.
   
   3) Lot, el famoso personaje universalmente conocido por la escandalosa Sodoma y Gomorra… Nada de nada, aquí de lo que se habla es dos ángeles de la guardia personal de Dios, con armadura a la romana y entrenados por el coreógrafo de Zhang Yimou que sacan sus sablecitos y se lían a matar sodomitas… Uno es negro y otro asiático, por cierto: qué burda estrategia usamericana para reflejar un cristianismo universal que no entiende de colores ni naciones. Me atrevo a decir que enseñar el rostro de los ángeles es una pura herejía. A mí me da igual, pero se supone que ellos son cristianos.
   
   4) La historia de José, el odio de sus hermanos, la bajada a Egipto… toda esta apasionante y relevantísima historia se resumen en un: <>. ¿Qué demonios…? Este nexo, como muchos otros entre historias que se han decidido zampar incongruentemente, hacen que se despiste el espectador no iniciado en la materia. Y el iniciado… también.
   
   5) A Moisés lo convierten en un líder carismático cuando la Biblia lo califica básicamente como un hombre pusilánime apoyado en su hermano que irrita a Dios con su autosubestimación… Vaya, esto se llama hacer un buen remake. La distancia entre las tropas del faraón y los israelitas cruzando las aguas separadas a veces es gigante, luego es muy corta, otra vez de nuevo enorme… da igual, lo que importa es que se salvan los buenos.
   
   Comento solo la Torá (y brevemente, para lo que habría que decir) porque, después de descubrir que Sansón era negro y que las columnas que rompía eran de cartón… no pude más. Estaba a punto de morir, y quería reservarme para dosificarme los siguientes capítulos.
   
   Falta algo más por comentar y es que, pobrecitos, se les ha olvidado una pequeñín detalle: la película está en inglés. Mel Gibson, aunque también deja mucho que desear en La Pasión de Cristo (¡el Imperio romano de Oriente hablaba griego, no latín!), les hubiera sido al menos de buen ejemplo para darle a la serie un toquecito más realista y más currado. No tengo ni idea del presupuesto invertido pero… si es mucho, se lo han gastado en tapas. A esto lo llamo yo un rodaje no de andar por casa: es de andar por chabola.
   
   En conclusión… es el perfecto ejemplo de una bazofia que mucho prometía y mucho ha decepcionado. Aún así, seguiré viendo los capítulos de pacotilla, porque intuyo que con el Nuevo Testamento la calidad mejorará bastante: ¿qué queremos?, es una producción cristiana. Y además, nunca están de más unas cuantas risas, unos bostezos y unas cuantas injurias y blasfemias contra los directores.
   
   Que Dios nos acoja a todos… el infierno en vida ha llegado, y está en tu pantalla de 22.00 a 1.15.
   

5. Entonces me estáis diciendo que habiendo visto la primera parte que ha emitido Antena 3 ya podéis valorar una serie. Pero es que es más, cuando la serie llevaba media hora me he metido y ya habían subido las votaciones, y a las 11 de la noche (el capítulo acababa a las 1 y media) había subido más. Si ya es un poco triste valorar series completas habiendo visto solo un capítulo, decidme qué deberíamos opinar acerca de esto. Y le doy un 5 porque es lo que me ha parecido viendo el capítulo ENTERO pero comprometiéndome a cambiar el voto cuando la acabe de ver, cosa que muchos, con tal de tener una votación más en Filmaffinity, ni siquiera harán y opinarán de una serie de 600 minutos habiendo visto 100 (porque doy por supuesto que la habéis quitado antes de que acabase). Y no, no estoy defendiendo la serie, pero es que algunos son demasiado espabilados.