Indochina
Sinopsis de la película
Eliane (Catherine Deneuve) es una elegante mujer de ascendencia francesa, y propietaria de una inmensa plantación de caucho, que tiene dos grandes amores: su hija adoptiva Camille (Linh Dan Pham) e Indochina. Todo cambiará con la entrada en sus vidas del apuesto oficial francés Jean-Baptiste (Vincent Perez)… Épico drama romántico que tiene como telón de fondo la gestación de la revolución comunista cuyo estallido provocó el fin de la colonización francesa de Indochina y el nacimiento del Vietnam en 1954. Consiguió el Oscar a la mejor película extranjera, y la francesa Catherine Deneuve fue nominada en la categoría de mejor actriz.
Detalles de la película
- Titulo Original: Indochine
- Año: 1992
- Duración: 155
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Opinión de la crítica
6.5
75 valoraciones en total
Película de amores coloniales, muy en la línea de Memorias de África. Historia de amor a tres bandas entre una terrateniente francesa, un marino de la misma nacionalidad y la hija nativa adoptada por la primera. Todo ello tiene como telón de fondo los cambios que acontecen en la zona y el levantamiento del pueblo contra los invasores.
Algo lenta y cansina, la película funciona mucho mejor en su segunda mitad. La dirección artística, la fotografía y la música son lo mejor de la función, y Catherine Deneuve y Vincent Perez le ponen muchas ganas a sus personajes.
Los paisajes son increibles, en especial las escenas situadas en la Bahía de Halong.
Desde aquí mando un mensaje a los programadores de las cadenas de televisión. Indochina es la película perfecta para ponerla un sábado después de comer. Dura dos horas y media, pero con los anuncios si se lo proponen puede llegar a durar cuatro. De telediario a telediario y tiro porque me toca, tiene el 20% de share y el 80% de siesta asegurados. Catherine Denueve poniendo cara de palo como protagonista femenina por excelencia con la que las señoras que se quedan dormidas viendo la telenovela pero se despiertan cuando cambias de canal se van a sentir plenamente identificadas. Tiene historia de amor imposible (pero todo muy casto, apenas se dan besitos, que nadie se exalte, la pueden poner hasta en Intereconomía), hay paisajes preciosos de todo tipo, ambientes exóticos (creo que los secundarios son chinorris) vestidos raros y está ambientada en los años 30.
Vamos, que a la audiencia de Amar en tiempos revueltos la tiene ganada. Los demás nos podemos echar una siesta y tan tranquilos, de eso que cada diez minutos abres los ojos y seguirá sin haber pasado nada. El plano final -que da imagen al poster- muy bonito, eso si, ahí llegué con los ojos abiertos. Si la vi fue porque un amigo almeriense de El Puche (un saludo, Rubén) me la regaló, así que como agradecimiento le prometí que escribiría una crítica y se la dedicaría. Ya me podrías haber regalado Baseketball… eso si que es una obra maestra.
Pues no advierto yo que la estelar aparición de la elegante diva francesa, Catherine Deneuve, sea una garantía de éxito para este drama romántico. Recuerdo cuando salió a las carteleras allá por 1992 o así, y fue bastante sonado. Yo no he tenido ocasión de verlo hasta ahora, pero el gusanillo de la curiosidad y del prestigio que arrastra la película me despertaba el interés.
La veterana actriz que se dio a conocer a sus veinte años con Los paraguas de Cherburgo y que ha trabajado entre otros con Buñuel, no defrauda (yo nunca la he visto hacerlo) ante las cámaras y es el centro vertebrador de un melodrama histórico acerca de las últimas décadas del dominio francés sobre la península de Indochina. En un relato algo pesado y monótono (y no porque no sucedan acontecimientos relevantes, sino por el tono en que se cuenta), pero con encomiables localizaciones (preciosas vistas de un Vietnam bien recreado en los años treinta-cuarenta), la saga de una madre adoptiva afincada en la Vietnam ocupada se relata en flashback.
Eliane era una rica terrateniente con una hija vietnamita adoptada al morir los padres de la niña. Vivían felices en su plantación de caucho y Camille crecía. La poderosa hacendada tenía sus influencias en las esferas de poder y algún que otro pretendiente al que no hacía caso, o algún enamoramiento furtivo que acababa mal. De ese modo ella era la reina indiscutible de su territorio y su hija se educaba en las costumbres europeas, aunque sin olvidar sus raíces.
Pero la situación en Indochina se tensaba como una pompa de jabón a punto de reventar. Los abusos de los ocupantes, que se lucraban con un tráfico humano denigrante, plantaban la semilla de la rebelión. El comunismo chino hizo el resto al extenderse entre los afrentados por el despotismo francés.
Y en tal panorama en el que se olía el levantamiento popular, Eliane pasaría su calvario como madre mientras su ya adulta Camille partía para reunirse con su hombre amado, Jean-Baptiste, un oficial francés que tenía mucho que ver en el pasado de Eliane.
Con la revolución ya gestándose, cada uno va en busca de su lugar y de lo que le depara un destino por descubrir, padeciendo grandes peligros y sufrimientos.
Y ella, la bella francesa, esperando siempre con el corazón en un puño.
Reflejo del declive y caída de una era que marcó hondamente a la nación gala y a los países indochinos, se saca una conclusión: que el corazón no tiene patria, ni entiende del color de la piel. Su única patria es el amor. Y su color es el de la sangre.
Vi esta película casualmente. De hecho, esa noche, iba a por otra. Y me sorprendió. Es una película extraordinaria. Las interpretaciones, especialmente las de Catherine Deveneuve y Vincent Perez, son fantásticas. La banda sonora, la fotografía… todo contribuye a convertir la película, tal vez un poco larga y algo lenta, en deliciosa. Pero más aún que estos elementos, me llamó la atención el tratamiento que hace de la condición humana, especialmente de la soberbia y el amor. !Qué difícil combinación!
El film cuenta, tal vez, con una de las escenas de amor más hermosas del cine de las últimas décadas. Recomiendo a cuantos no la han visto, que se fijen en la expresividad de los actores, en la emotividad de la escena del embarcadero. Extraordinaria.
Género: Drama. Clase: Histórico-costumbrista. Subclase: peligro: ¡Super-producción francesa! Los franceses tienen una extraordinaria capacidad para convertir lo sencillo en fatuo. Indochina es una película primorosamente ejecutada, lo tiene todo para ser un éxito: una historia retorcida de amor (tan del gusto de los franceses), paisajes exóticos, buena producción, ambientación exquisita, y actores de relumbrón. ¿Resultado? A la media hora comienzas a aburrirte y te concentras en buscarle las arrugas a la hermosa Catherine Deneuve (no se las encontrarás en la cara, pero fíjate en sus manos). Personalmente, lo que más captó mi atención fue el extraordinario parecido, casi sospechoso, entre el comisario de policía y el abogado Rodríguez Menéndez. Buena producción: la música suena bajita así que es ideal para la siesta.