Gringo viejo
Sinopsis de la película
Harriet es una solterona que se va a México con la esperanza de huir de su anodina existencia y llevar una vida llena de pasión y emociones. Ambrose Bierce es gringo viejo, un periodista retirado y aventurero que vaga por el desierto buscándole un sentido a los últimos años de su vida. Arroyo es un general del ejército mexicano cuya vida gira en torno a la Revolución y a su amor por Harriet. Ambientada durante la revolución mexicana, la película cuenta cómo las vidas de estos tres personajes se cruzan inexplicablemente mientras se enfrentan al amor, la muerte y la guerra.
Detalles de la película
- Titulo Original: Old Gringo
- Año: 1989
- Duración: 120
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Opinión de la crítica
5.8
90 valoraciones en total
Gringo viejo…¿etapa final de vida de Ambrose Bierce?
Bierce fue un notable escritor y periodista del siglo XIX, que muchas veces escandalizó a Estados Unidos y a sus lectores de todo el mundo con sus pensamientos incisivos que iban generalmente contra el stablishment. Su estilo cáustico hizo que un crítico le apodara El amargo Bierce (Bitter Bierce).
Pero este autor fue esencialmente un idealista, no un nihilista, dado que procuraba mejorar el status quo.
H. P. Lovecraft cuenta: Ambrose Bierce, y aquí llegamos a algo de naturaleza siniestra (pues Bierce se interesaba en asuntos extraterrenos), desapareció en México. Se dijo que había muerto luchando contra Villa, pero en la época de su desaparición debía de tener más de setenta años y era prácticamente un inválido. Jamás se volvió a saber de él. Esto ocurrió en mil novecientos trece. Año en el cual empieza la película. Aunque en verdad no se sabe con certeza cómo fue que finalizaron su días, eso sí, dentro de México. En el film se cita en una carta fechada el 1 de octubre de 1913, escribió a una de sus familiares en Washington: «Adiós. Si oyes que he sido colocado contra un muro de piedra mexicano y me han fusilado hasta convertirme en harapos, por favor, entiende que yo pienso que esa es una manera muy buena de salir de esta vida. Supera a la ancianidad, a la enfermedad, o a la caída por las escaleras de la bodega. Ser un gringo en México. ¡Ah, eso sí es eutanasia!».
No en vano la película quedó a cargo de Luis Puenzo, un anarquista sentimental…
Apasionante historia que gira en torno a tres personajes marcados por el pasado.
Los tres se entrecruzan en medio de la revolución mejicana, magníficamente escenificada y con buenas escenas de acción que se desarrollan casi al principio para dar pie a la otra revolución en la que luchan los tres protagonistas, más personal y más decisiva para ellos.
Maravillosa también la banda sonora que acompaña en todo momento la película realzando la intensidad de muchas de las maravillosas escenas cargadas éstas de una gran locuacidad y esplendor, escenas entrañables por su carga dramática, por el virtuosismo del director con la cámara que logra algún memorable encuandre lleno de simbolismos y belleza.
Entrañable Gregory Peck como el gringo viejo.
Durante muchos años Jane Fonda sintió una gran admiración por el periodista y escritor Ambrose Bierce, un autor marcado por la sucesiva etapa de cambios surgidos entre los siglos XIX y XX. Desde su alistamiento en la Guerra Civil Americana hasta su profesión de periodista recorriendo mundo para acabar trabajando en los principales periódicos de Washington, afines a William Randolph Hearst. Sin olvidar una rocambolesca vida personal ése hombre de delicada salud tomaría una decisión: viajar al México de la Revolución. Una vez allí se perdería su pista para siempre.
La película de Puenzo narra los últimos días de éste escritor (tras la caracterización de un soberbio Gregory Peck), contemporáneo de Mark Twain y Edgar Allan Poe, enfrentado con el mundo y que publicó en su momento la magistral obra El Diccionario del Diablo. Pero su figura siempre queda relegada al testimonio de la aburrida maestra de escuela Harriet Winslow (interpretada por la misma Jane Fonda) que, al igual que Bierce a quien admira, quiere huir del mundanal ruido saliendo de la sartén para caer en las brasas.
Fonda se mira en el espejo, es evidente pero sabe muy bien lo que hace moviéndose en los terrenos de la ficción y la Historia. Y es que Ambrose Bierce y la Revolución Mejicana no podían pasar por alto y eran carne de cañón para el cine.
Fonda, en su faceta de productora interesada, escogió la novela Gringo Viejo de Carlos Fuentes. La dirección fue llevada a cabo por el argentino Luis Puenzo, que en 1986 había realizado La Historia Oficial un notable drama político sobre la última etapa de la dictadura argentina.
La revolución mexicana es solo una excusa en esta historia.
Soledad, frustación, darle una aventura a la vida y venganza ponen de manifiesto los protagonistas.
Encontrarse con uno mismo y darle sentido a la vida realza en esta historia.
Agradable película de Luis Puenzo, basada en el hermoso relato de Carlos Fuentes. La novela es preciosa y la película muy loable. Con una realización sobresaliente, que peina cada escenario y contexto para dar paso a una historia creíble, la película narra la vida de la institutriz Harriet que viaja tras un chasco amoroso a México para dar clase a unos hijos de una familia de ricos hacendados. Si es que en realidad tanto la novela como la película tienen como columna vertebral el eje tripartito de el gringo viejo-Harriet- y Arroyo, la interacción que hay entre ellos y su relación de amor odio va a ser lo que le de fondo a la historia. Jane Fonda aquí madurita y competente hace un personaje creíble y nada idealizado,a la que Arroyo no da tregua, plasmando muy bien Jimmy Smith el tormento y la deseperación del macho Arroyo. Y llegamos al gringo viejo, que le da a la película una profundidad muy grande, el poeta Ambroise P. basado en su vida real, al trasladar todas las cosas cotidianas por el tamiz de la poesía. El contexto está perfecto con las tensas situaciones políticas de la época en la revolución mexicana, y el vestuario muy logrado. La música es meláncolica, pero también lo es la historia. Buena obra.