Ginger Snaps
Sinopsis de la película
Brigitte y su hermana Ginger son dos adolescentes muy unidas… y aburridas de su rutinaria vida. Pero cierta noche en que deciden gastar una broma a un chico, Ginger acaba siendo atacada por una extraña criatura. Aunque se recupera milagrosamente de las heridas, Ginger no está bien: comienzan a crecerle pelos en las cicatrices, una cola asoma por la base de su espina dorsal y siente un deseo irrefrenable de sangre humana… se está convirtiendo en una mujer-lobo. Brigitte tiene que ayudar a su hermana y recurre a Sam, un joven enigmático, con fama de chico malo y muy aficionado a la botánica… Y mientras Brigitte lucha por proteger a Ginger, se convierte en cómplice de sus crímenes violentos e incontrolables…
Detalles de la película
- Titulo Original: Ginger Snaps
- Año: 2000
- Duración: 108
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Opinión de la crítica
5.6
27 valoraciones en total
Una maravilla de la serie B. Una genialidad del terror de bajo presupuesto que se convierte instantáneamente en culto. Ginger Snaps prácticamente no hace nada que no hayan hecho otras películas, y quitando un par de secuencias -me gustó mucho el final- cinematográficamente no ofrece absolutamente nada. Sin embargo, la película está metida en un aura indescriptible potenciada por una fantástica Emily Perkins que hace que la hora y media que dura te sea enfermizamente escasa.
John Fawcett nos planta una fórmula curiosa. Una historia de una mujer-lobo que coordina su indeseada transformación con sus periodos de ovulación. Bajo una extraña esencia de comedia que en ningún momento se explota -y yo que me alegro-, la pareja Perkins-Isabelle consigue mantener nuestros ojos puestos en la pantalla. Una típica historia de transformación progresiva e irrefrenable que llevará a situaciones desesperadas.
Pero por mucho que hable de ella no podré transmitir por qué esta película es tan sensacional. No hablamos del caso de una película friki de serie B con la que me he divertido. Estamos ante una película que realmente creo que es buena, más allá de su bajo presupuesto. Ojalá películas más pretenciosas y con mayor presupuesto tuvieran la esencia de esta rareza.
En mi opinión está muy, muy por encima del nivel que suelen tener los films de terror juvenil. Además, de terror no tiene nada, sino que es un horror-drama, y la etiqueta de adolescente pudiera pasar, pero haciendo determinado hincapié en ciertas cosas.
El llamado terror adolescente, supone casi siempre un grupo de niñatos arquetípicos vacíos, cuya única función es ir palmando uno tras otro hasta quedar en pié uno o dos de los que menos coraje nos dan, y tras haber filmado al menos hora y media que encasquetarle a los cines. En Ginger Snaps ese contexto adolescente, con su instituto y sus majaderías, es solo un elemento para enmarcar la historia, ajeno a la trama central.
El quid de la película es la crisis que desata la desintegración de la estrecha relación entre las dos hermanas, y los esfuerzos, a veces disfuncionales, con que intentan restablecer la unión, el control, y la situación anterior, asi como la explotación de miedos y preocupaciones juveniles.
Escenas de una crudeza y dramatismo bastante logrado, e inclementes, nada de sensiblería.
Un poco de desquiciamiento psicológico bastante atrayente.
Su director creo que llegó a decir que su película era una mezcla de La Mosca y Criaturas Celestiales. Creo que estuvo bastante acertado. Con la película de Jackson tenemos a las claras el punto en común de la ruptura de una relación entre chicas de singular naturaleza, propiciada por agentes externos y hostiles, y la exaltada reacción que esto provoca. Con Cronenberg en general parece tener Fawcett cierta obsesión con las anormalidades, malformaciones, transformaciones, purulencias, etc, etc.
Tiene las suficientes virtudes como para recomendarla: muchas escenas muy buenas, unas interpretaciones solventes, una historia bien llevada, y lo crucial, una dimensión dramática y emocional que hace sombra a los elementos fantásticos (lo de la licantropía y tal es lo de menos), y logra para sí todo el interés que no tiene el manido terror adolescente.
Curiosa producción canadiense de terror licántropo que fue objeto de miniculto hace algunos años y que tuvo el éxito suficiente como para dar lugar a una segunda y hasta una tercera parte. La película en sí no es para echar cohetes, pero tiene un cierto espíritu, una personalidad difusa y a ratos extraña que la diferencia de otros terrores de medio pelo con los que comparte línea de sangre.
La historia, sin grandes alardes, arranca muy bien, se desinfla hacia la mitad y se convierte en un despropósito completo a partir de entonces. Sin embargo, incluso siendo conscientes en todo momento de que no estamos viendo nada excepcional, algo tendrá que cuando finaliza se te queda un regustillo persistente y mórbido.
Lo mejor, el rostro fascinante de Katharine Isabelle, la sesión de fotos emo y todo el proceso de transformación tan bien ligado en un plano más subjetivo, a la evolución de la adolescencia.
Lo peor, los efectos especiales chusqueros, todos los secundarios y los muy tontunos diálogos.
Bromas aparte con el título de la crítica, lo cierto es que Ginger Snaps tiene que ver más con el despertar sexual adolescente que con la licantropía.
Atendiendo a las creencias propias del siglo XIX y el menosprecio del cuerpo femenino, sobretodo en su carácter más atrevido y seductor, se puede entender que la protagonista Ginger, justo en el momento que le viene la menstruación, es atacada por un hombre-lobo. La fiera interior ya ha despertado y lo siguiente será ver que evolución desencadena en esta jovencita de quince años.
Por ello me parece una película correcta, el problema viene en el limitado sector al que está enfocada, el género adolescente, y en general el femenino. Así se puede entender el éxito de su estreno, pero para el futuro espectador fuera de estos cánones, el alcance de la película queda muy mermado.
Sólo el toque canadiense generoso en sangre y vísceras hace más ameno el visionado.
Una curiosa cinta que recibiría un punto extra si un servidor fuera mujer, y el doble si aun no hubiera pasado cierta edad.
Por fortuna, para un enfoque más adulto ya tenemos En Compañía de Lobos de Neil Jordan.
Para los que buscan simplemente disfrutar de su afición a la licantropía, recurran a la obra de John Landis.
Excelente película de terror que eleva la media del género que en los últimos años ha estado sumida en un vértice de repetición y remakes. La película narra la vida de 2 hermanas inseparables y como definirlo… auténticas, vamos que les importa un comino lo que la gente piensa de ellas. A una de ellas (GINGER) le muerde una bestia una noche y desde entonces la otra hermana se verá obligada a yudarla y PEOR enmascarar sus atroces asesinatos… contada con un humor negro bastante adecuado (ver la escena en la que los padres hablan de si ginger tiene la regla y mientras esta y su hermana esconden un cadáver en el jardín) la película tiene un claro mensaje de que hoy en día ser diferente puede suponer un gran problema…