Fotos
Sinopsis de la película
Azucena siente auténtica aversión al sexo. Esta actitud conduce a la ruptura de las relaciones con su novio. Entonces, un desequilibrado artista plástico entra en su vida, César. Éste, obsesionado con Azucena, la convierte en el centro de su obra y despierta así los celos de su amante, el posesivo Jacinto. Preso de un irresistible arrebato, César intenta violar a Azucena. Asustada y humillada, la chica consigue escapar. Encuentra refugio en un local nocturno, donde conoce a Narciso, un travestí y bailarín de striptease, de quién se enamorará perdidamente.
Detalles de la película
- Titulo Original: Fotos
- Año: 1996
- Duración: 98
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Opinión de la crítica
4.9
77 valoraciones en total
Película absolutamente increible, distinta, asombrosa, apabullante….
Es imposible quedar indiferente…puedes odiarla…es cierto…pero puedes adorarla como a pocas.
Las interpretaciones-exceptuando la de la asombrosa y desgraciadamente olvidada por nuestro cine antes de tiempo, MARIA ASQUERINO-son tan malas que hacen la película aún más grande(sería incongruente una interpretación de la Virgen María a lo Jennifer Jones, de oscar)
El guión, no hay por donde cogerlo, y ahí radica su poder, surrealista a ratos, tomadura de pelo a otros….
Demasiado moderna para los 90, si fuera de los 70-80, sería una peli de culto…
La adoro!!!!!
Película acojonantemente rara a la que no tengo ni idea de cómo puntuar. Le pongo un cinco porque es una puntuación equidistante entre el 1-Bodrio y el 10-Obra Maestra, pues bien podía ser cualquiera de estas dos cosas. Elio Quiroga, director de la cosa, recoge el testigo de directores tan controvertidos y alucinados como Iván Zulueta y propone una historia enfermiza, caótica, enmarcada por imaginería de pesadilla. Los actores son malísimos, el guión no tiene ni pies ni cabeza, la barroca mezcla de iconos religiosos y decoración almodovariana resulta agobiante…pero ¿no son así las pesadillas?.
Sea lo que sea Fotos , es una propuesta diferente y extrañamente estimulante. No se puede explicar a alguien que no la haya visto. Por eso, todo cinéfilo amante del riesgo, debería verla y sacar sus propias conclusiones.
Tras el estreno de la novena película de Tarantino Érase una vez en… Hollywood , se ha vuelto a hablar del director, de sus gustos, de sus películas preferidas, y una de ellas es esta película española. Así que había que verla.
Desde mi punto de vista no puedo compartir la crítica generalizada de que es disparatada, o que el guión no tiene ni pies ni cabeza. Creo que el tema de la pelicula es claro porque así se dice en la propia película, ya desde la escena inicial. Los abusos en la infancia. Y lo vuelve a repetir cuando en la escena de la playa Narciso (Gustavo Salmerón) le confiesa a Azucena (Mercedes Ortega) los motivos que le han llevado a ser como es.
Pienso que la imagería religiosa de Azucena, y el travestismo de Narciso no son idas de olla o surrealismo del director, sino que son las vías de escape que estas personas han tenido ante la situación que han vivido.
En cuanto al título de la película, Fotos, es lo que más me ha impactado. No alcanzaba a ver su sentido, hasta la escena de la discoteca, en la que ex-novio de Azucena tiene un percance con ella, y a Azucena le vienen las imágenes de su pasado como en fotos.
Tras los últimos casos de violaciones en España (la manada de Pamplona, la de Manresa, etc.) se ha debatido mucho sobre esta cuestión, y los psicólogos afirman que las personas que ha sufrido abusos es muy difícil que hagan un relato seguido y continúo de lo que les ha pasado. Que muchas de las veces únicamente tienen fotos de ese recuerdo.
Y pienso que ese es el sentido de la pelicula y del título, las fotos que quedan en el recuerdo de Azucena, como alegoría del sentir de las personas que han sufrido abusos. Lo cual me ha impactado porque la pelicula es de 1996, y éste ha sido un debate reciente en España.
Se refleja, por otro lado, la lucha entre el bien y el mal, encarnados en esencia en dos protagonistas, la Virgen, que sería el bien, interpretada por Myriam de Maeztu, y Jacinto, interpretado por Miky Molina, que sería el mal.
Cuando parece que va a vencer el bien, vence el mal, sigue siendo la alegoría de la situación de muchas de las personas que han padecido estos abusos.
Destacar la imagen de la Virgen, que al final, es la de la Dolorosa, clásico de la iconografía española, imagen de la Virgen ante la muerte de su hijo, y como el mal no se detiene.
No sé si muy buena o no, mala no es, pero creo que el argumento es claro, porque la dice el propio film, y que está hecho desde la perspectiva de sus protagonistas. De cómo ellos viven los que les pasa.
¿Qué cabe esperar de un improbable y desquiciado cruce entre Polanski, Medem, Buñuel, Sirk, Fassbinder, Almódovar y hasta Álex de la Iglesia?. ¿No hay que ser el mismísimo Orson Welles de Ciudadano Kane para no salir trasquilado de tal empresa?. Pues eso es lo que le ocurre a la ópera prima del canario Elio Quiroga (por otra parte muy premiada en Sitges), que de puro barroca, indescifrable y pretenciosa se queda en producir un efecto contradictorio al pretendido: la presunta riqueza y/o riesgo de la vanguardista obra no es más que nulidad y torpeza cinematográfica que la hacen ser un mal exponente de cine moderno , independiente o de autor.
Fotos parte de un argumento que remite directamente a la obra maestra de Polanski Repulsión (una joven con graves traumas sexuales que odia todo contacto) pero a partir de ahí todo se desboca hacia un terreno resbaladizo y presuntuoso dónde caben todo tipo de referencias e influencias en un conjunto caótico, abstracto e incoherente: hay una vocación de riesgo límite, al estilo de Medem con su revolucionaria y notable Vacas , hay un simbolismo buñueliano surrealista con algún guiño explícito hacia Él (el lavado de pies), hay un toque de humor almodovariano a la vez que una tragedia entre hetero y homosexual que remiten a Mujeres al borde… y a La ley del deseo (la peor influencia plasmada, por cierto), lo primero en el pseudohumorístico personaje de Diana Peñalver (desaprovechada actriz) y lo segundo en la atípica, mística y jeroglífica relación amorosa entre Mercedes Ortega y Gustavo Salmerón, hay una vocación melodramática de sacar una honda emoción de momentos folletinescos al estilo de Sirk, hay un mundo propio de Fassbinder, en los excesos, en los decorados, en la naturaleza de lo contado. Hay todo eso y en realidad no hay nada. Hay un mestizaje imposible conducente a lo inverosímil, un guión arbitrario, unas referencias gratuitas a la iconografía religiosa, una contraposición de Limpieza/Suciedad increíble, una metáfora rebuscada de la sucia sociedad que nos rodea. Me parece a mí que no hace falta hacer una especie de inclasificable melodrama místico/fantástico de vocación jeroglífica para decirnos esto. Me quedo con la realidad, entonces.
Lo único realmente aceptable son algunas interpretaciones y las buenas intenciones.
Deja que fluya la imaginación…la ciencia ficción en estado puro, la poesía macabra, el bien y el mal, angeles y demonios, almas confundidas de cuerpos, junto con abre los ojos una de las mejores pelis españolas de los últimos tiempos…abtengase puristas y demás mentes cerradas…