El rostro de la muerte
Sinopsis de la película
Alice es una extraña y problemática niña que vive con su madre y con Karen, su hermana pequeña. Cuando Karen muere durante su primera comunión, las sospechas recaen inmediatamente sobre Alice. Cuando la niña es acusada, su padre separado inicia una investigación en busca de la verdad…
Detalles de la película
- Titulo Original: Communion aka
- Año: 1976
- Duración: 98
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Opinión de la crítica
Película
5.4
50 valoraciones en total
Un retorcido y modesto slasher de la década del setenta, en el cual podemos ver: fundamentalismo religioso, atmósfera insana donde los trastornos psicológicos abundan, misteriosos personajes que esconden sus intenciones detrás de falsas apariencias, un asesino serial que oculta su rostro detrás de una máscara, brutales homicidios que no tienen contemplaciones por ningún personaje, una niña muy siniestra que nos deja estupefactos con sus comportamientos, una compleja investigación policial que no encuentra las pistas necesarias.
Otros datos:
• Brooke Shields aparece muy poco en el filme.
• Hay partes en que el filme decae en intensidad debido a que algunas escenas y diálogos son poco incitantes.
• Lo más atractivo es que el slasher involucre a una feligresía católica y a una niña de doce años con comportamientos extraños.
• Hay mucha atmósfera de perturbación mental.
• La cinta posee varias secuencias impactantes por su grado de violencia y por no tener reparos ni concesiones con ningún personaje.
• La partitura musical colabora para generar climas escalofriantes.
• Muchos de los personajes poseen conductas sórdidas y pervertidas.
Si bien la película tiene algunos baches narrativos, es un filme que cautiva en su desarrollo ya que despliega un slasher muy perverso utilizando en muchos de los casos a una niña de doce años como principal sospechosa. Pero ello no es todo, además el filme busca sobresaltar aún más al terminar desplegando sus olas de crímenes dentro de una comunidad religiosa católica donde supuestamente debe existir paz y armonía. Esa yuxtaposición entre lo sagrado y lo profano es la clave para que la cinta sea espeluznante en algunos pasajes.
Una de las joyitas del cine de género de los setenta que más está olvidada por la crítica y público, pero que sin embargo es bastante curiosa.
Una historia que te atrapa, contanda de forma algo torpona, pero que al menos sabe mantener la tensión y el misterio durante todo el metraje y con unas actuaciones que aunque son histriónicas juegan perfectamente con lo que la trama necesita.
Y al mismo tiempo también se atreve a navegar por temáticas que podrian incluso a llegar a discusiones de cierta profundidad, lo cual no está nada mal para una película que podria ser poco más que un protoslasher para saciar a los más morbosos.
Una joyita que los amantes del género deberían ver si o sí.
Llevo un buen rato dándole vueltas a esta crítica y no sé ni por donde empezar… ¡hay tanto que decir!
Lo primero es que, el periódico que la regalaba ponía como reclamo publicitario que salía Brooke Shields, efectivamente no mintieron, salir sale, pero se la cargan a los 10 minutos! (no es spoiler, viene en la sinopsis) Menos mal que la peli que quería era 39 escalones y no compré el periódico sólo por esta…
Luego es preciso que para ver esta película estés muy atento, o se te pasarán los detalles, y es que aquí aparecen y desaparecen personajes como por arte de magia, de pronto un personajes se convierte en alguien importantísimo (pero no tienes ni idea que tiene que ver en la trama), para luego desaparecer y no volver a verle hasta casi el desenlace…
La hermana sobre la que recaen las sospechas, no se sabe si es la asesina o no, pero la niña es rarita de cojones, ¿Cómo se puede ser tan siniestra con sólo 12 años?
El vecino gordo aparte de ser insustancial para la trama es bastante… no sé como explicarlo… ¿desagradable? ¿Acaso por no poder moverse de casa tiene que llevar manchados los pantalones porque se ha hecho sus necesidades encima? Por cierto, la escena del gato es tremenda…
La madre histérica, el cura que se parece a Julio Iglesias, el padre al que cambian de peinado en mitad de la peli y parece otro actor, la niña siniestra, la tía con mala uva… ¡todos los personajes parecen sacados de un psiquiátrico! ¿A quién se le ocurrió juntarlos a todos y montar una película?
Ahora que me doy cuenta, esto ni siquiera es una crítica, sólo son las cosas que no me puedo quitar de la cabeza después de ver esta película.
Inentendible que cambiaran un título tan sugerente como Alice, dulce Alice, por uno como El rostro de la muerte, pero bueno, dejando de lado eso, esta película de terror setentero, mostrándonos una vez más que en cuanto a terror hecho en Hollywood, los 70 fueron lejos la mejor de las décadas.
Una niña bastante retorcida, es sospechosa de la muerte de su hermana, aunque sus padres se niegan a aceptarlo, y tratan de encontrar a la verdadera culpable.
La historia se alarga más de la cuenta, pero no llega a aburrir, una muy buena recreación de época, la fotografía también es muy buena, al igual que la sordidez que embarga cada plano, la música inscidental también es excelente, clásica en una especie de homenaje a los thrillers de Hitchcock.
Alice Sweet Alice es un extraño slasher acerca de las sospechas alrededor de una niña asesina.
El primer acto de la película es bastante aterrador, llenando de sospechas al espectador con unas grandes secuencias católicas.
A partir de la mitad de segundo acto (cuando el asesino se revela) la película comienza a bajar porque la tensión ya no logra ser la misma.
El clímax y el final son muy buenos y aterradores.
Vale la pena verla, pero si eres como yo que esperaba demasiado, tal vez deberías bajar tus expectativas porque en realidad no es la gran cosa.