El gendarme de Saint-Tropez
Sinopsis de la película
El Gendarme Cruchot y su hija comienzan una nueva vida en St. Tropez. Allí, el policía se toma muy en serio su trabajo mientras observa cómo Nicole va haciendo amigos en el lugar. La chica les dice a sus nuevos compañeros que pertenece a una familia de millonarios y se mete en un gran lío con una banda de ladrones… Jean Girault dirigió las seis películas centradas en las aventuras del Gendarme Cruchot, desde 1964 a 1982. Durante casi 20 años, Louis de Funès encarnó a este alocado Sargento.
Detalles de la película
- Titulo Original: Le gendarme de Saint-Tropez
- Año: 1964
- Duración: 93
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Opinión de la crítica
Película
5.8
73 valoraciones en total
Tenemos un actor, Louis de Funès, quizás el más taquillero de toda la historia del cine francés, y tenemos una larga serie de películas que protagonizó desde la década de los años 60, hasta principios de los 80. Todas estas películas están cortadas por el mismo patrón, sea quien sea el director de turno.
El gendarme de Saint-Tropez sigue fielmente la línea chillona y estridente de todos sus films, algunos de calidad y otros bastante aburridos. Sin ser esta su mejor película, tampoco es de las peores. Es un film bobo y tontorron que va de menos a más con un humor infantil, fruto de una época en que las películas eran sencillas y simples. Tiene secuencias muy divertidas y graciosas, con un guión banal y sin complicaciones,
Nuestro querido Louis de Funès, es un gendarme de una población costera francesa. Como puede suponerse, los enredos no tardarán en aparecer y las escenas alocadas serán el plato fuerte de esta distraída cinta.
Recomendación: Para rellenar 90 minutos de buena risa inocente y sana.
Louis de Funés triunfó con esta película tenia 50 años
La risa es una cosa humana, una virtud que sólo pertenece a los hombres, a quienes Dios, quizás, se la entregó para consolarlos de ser inteligentes , escribió Marcelo Pagnol.
Con todo respeto a los críticos de cine demasiado serios que consideran la comedia como un arte menor, una especie de pariente pobre del arte dramático, resulta infinitamente más difícil hacer reír que hacer llorar. Louis de Funès posee este don.
Un don fuera de lo común que ha llevado al extremo. Él, que soñaba con trabajar con Roman Polanski, habría podido trabajar en películas de más renombre y trascendencia, ponerse al servicio de los mejores diálogos.
¡Qué importa!… Cumplió su misión puesto que sus personajes cómicos han cruzado las fronteras del tiempo.
Esta es el inicio de una serie de películas que realizo Louis de Funes personificando a un gendarme al que le pasan siempre una serie de hechos graciosos. Como todas sus películas Louis de Funes muestra su histrionismo y muecas de todo tipo que lo hicieron realmente famoso. Si bien este film es menor dado la época podríamos decir que entretiene siempre dentro de un humor casi inocente y para toda la familia. De Funes es trasladado junto a su hija a Saint Tropez en donde se verá enredado con el robo de un cuadro famoso y deberá encontrar los culpables junto a sus compañeros gendarmes tan torpes como él. También trabaja Michael Galabru como su jefe. Con las salvedades que dije anteriormente se deja ver sin problemas.
El mito Louis de Funes arrancó con esta película, en la que muy pronto se dieron cuenta de las posibilidades humorísticas del nuevo personaje. Un cincuentón que se traslada a la localidad costera de Saint-Tropez acompañado de su hija (una bellísima Geneviève Grad con 20 años en aquél entonces) para desempeñar su nuevo cargo de Gendarme. Allí tendrá a un grupo de policías más ineptos aún que él y su hija conocerá la liberación de pasar del aburrimiento de un pueblo pequeño a una ciudad llena de vida y de gente.
El conservadurismo del gendarme choca no sólo con la liberación de su hija, sino con el estilo de vida de la gente de Saint-Tropez. Especialmente hilarante son las escenas de investigación en la playa, con entrenamientos previos. Pero no serían igual de divertidas sin su protagonista. Sus muecas, sus gestos, sus movimientos rápidos, sus diálogos… conquistaron al público francés y de allí tras su enorme éxito comercial gustaron al público extranjero. Entre ellos el español, contando además con un buen doblaje.
Un gendarme rural es ascendido y destinado a una comisaría de Saint-Tropez. Una vez allí, su hija le hará meterse en un lío con una banda de ladrones.
El primero de una saga de films dirigidos por Jean Girault y protagonizados por Louis de Funès, que cosechó un considerable éxito en buena parte de Europa. Realmente, se trata de una comedieta para devotos del cómico francés, que vista hoy no guarda mayores virtudes.
Me trasladan a Saint-Tropez con un galón de más.