Decrecimiento, del mito de la abundancia a la simplicidad voluntaria

Existe un mundo presente, el mundo del deseo, del tener, del siempre más, caracterizado por la ausencia de límites al crecimiento económico. Un mundo que hoy se derrumba a causa del declive de los recursos energéticos, las materias primas y la crisis ambiental. Y existe un mundo que ya está llegando, el mundo del ser, donde los llamados objetores de crecimiento reinventan su modo de vida adaptándolo a los límites de la biosfera y a las necesidades reales del ser humano.