Colombo: El asesinato más inteligente del mundo (TV)
Sinopsis de la película
En esta ocasión el Teniente Colombo debe detener a un asesino de una inteligencia prodigiosa. La victima, que había sido su socio, lo había amenazado con denunciarlo por robar dinero de los clientes. Episodio Nº39 de Colombo
Aunque Colombo tiende a ser definida o considerada como una serie de TV, nunca fue una serie propiamente dicha. Exceptuando la presencia recurrente del personaje principal, no presenta ninguna de las características de una serie tradicional (episodios semanales, de duración regular, con cast, dirección y equipo de producción fijo). Pensados como telefilms (de hora y media como promedio de duración), cada episodio cuenta con una historia independiente y con un director y un equipo de producción distinto. Los films tuvieron una transmisión irregular, pero con un mínimo de tres o cuatro producciones por año hasta 1978. Más de diez años después, Falk retomó su personaje por dos años (1989-1990). A partir de 1990, Columbo dejó de emitirse con regularidad, y los siguientes films fueron estrenados como especiales. Por estas razones, los 68 episodios de Colombo se dispersan irregularmente a lo largo de 35 años (1968-2003).
Detalles de la película
- Titulo Original: Columbo: The Bye-Bye Sky High I.Q. Murder Case (TV)
- Año: 1977
- Duración: 73
Opciones de descarga disponibles
Si quieres puedes conseguir una copia la película en formato 4K y HD. Seguidamente te añadimos un listado de fuentes de descarga disponibles:
Opinión de la crítica
6.8
79 valoraciones en total
The bye-bye sky high I.Q. murder case (El asesinato más inteligente del mundo) dirigido por Sam Wanamaker en 1977 es el tercer telefilm, último de la sexta temporada y, cuarenta de la serie, pilotos incluidos, en el que se narra el hastío crónico que siente Bertie Hastings (Sorrell Booke) sobre las pesadas bromas que su amigo Oliver Brandt (Theodore Bikel) reitera en su insoportable, larga y prolongada pesadez. Ambos pertenecen al selecto Club Sigma dedicado a las personas superdotadas con C.I. Durante el cruce de dos escenas paralelas y múltiples planos detalle, el realizador nos familiariza en un generoso plano secuencia con los recursos materiales necesarios para liberarse de la amenaza que atenaza a Oliver.
En una de las presentaciones más cinematográficas que de Colombo (Peter Falk) se hayan podido hacer en la serie, el realizador recurre a elementos cuasi de obligada aplicación: penumbra, silueteado y desgarbado personaje en semioscuridad entornada, tenue contraluz agudizada por el vaporoso humo del cigarro, rematado con el sobresalto del posible sospechoso tras presenciar la inesperada aparición del detective en la escena del crimen: la biblioteca. Sam Wanamaker vuelca sobre la secuencia conocidos recursos escénicos y de iluminación: escrutadoras miradas, silencios valorativos y acercamiento precavido entre investigador y sospechoso.
En su desconocimiento inicial, un sorprendido Colombo entra en contacto con el selecto Club Sigma para personas superdotadas. En su ignorancia no cabe la sorpresa, sí la admiración por lo nuevo conocido, como no podía ser de otra manera. Colombo es invitado por el mejor amigo del asesinado Bertie: Oliver Brandt, según primeras informaciones recabadas por el sargento Burke (Todd Martin), a una prueba de lógica. De esta manera entra en juego el desconocido CI de Colombo frente al CI del Club Sigma, entre verdades a medias, mentiras premeditadas, juegos de deducción surgidos de las preclaras mentes de sus socios contrastando sus sesudas deducciones con las del detective entre las sublimes melodías de Tchaikovsky.
Deducción tras deducción, fracaso tras fracaso en cada una de las teorías sugeridas por los miembros del club, hacen que la observación y la sutil asociación del espacio-tiempo aplicado al entorno de los hechos, den finalmente la respuesta al crimen entre cambios de escena, plano general de exterior, americano, primer plano y algún brevísimo primerísimo primer plano, recabando finalmente en la descuidada torpeza del sospechoso y la de sobre quien inicialmente le recibió bañado en una contradictoria mezcla de halagos y dudas le ofreciera juegos de cálculo y le adulara o le ignorara más de lo que normalmente suele suceder.
Breve temporada finalizada entre juegos de razonamiento lógico para superdotados (Colombo incluido, con inestimable ayuda desde la sombra de su deductiva mujer), precedido por un desfasado teniente Lucerna venido a menos en su cada vez menos aclamada serie y, el fracasado intento de vivir de la cultura museística gobernado por una idealista directora desapareciendo por el fondo de la escena cogida del brazo de un respetuoso acompañante.
Complemento genealógico. Colombo cita en cuatro ocasiones a su mujer, otro personaje lo hace en una ocasión, además, Colombo cita a su sobrino (ahijado de su mujer en dos ocasiones, otros personajes también lo citan (al sobrino) en tres ocasiones.
Un episodio peculiar en el que no se echa en falta ninguno de los aderezos de la serie. De entrada ya nos acentúa la sonrisa ver llegar al Teniente en su viejo y destartalado Peugeot. Sus atuendos sigue siendo la clásica gabardina y unos pantalones morados. Se hurga en los bolsillos buscando papeles con anotaciones y los consulta estirando bien los brazos para poder leer porque ya no ve bien de cerca. Es la estampa del hombre vulgar, que incita a la impaciencia con su tranquilidad. No obstante, sea cual sea el caso, se guarda bien la serie de dotarlo con un gran corazón. Aquí escucha a una muchacha perteneciente al club exclusivo de personas con un alto coeficiente de inteligencia y tiene mucho cuidado de añadir, después de decirle que posee una brillante inteligencia, que es una mujer muy bonita. Detalle que sorprende a la muchacha pues asegura que nunca le habían dicho nada acerca de su físico y queda encantada, igual que el espectador, lógicamente.
El episodio transcurre con las debidas apariciones por sorpresa del Teniente ante el sospechoso, una tras otra, como siempre, haciendo que el culpable empiece a vislumbrar que no puede quitárselo de encima. Este es el mayor aliciente de la serie, ver como los castiga poco a poco, como los mina la paciencia, los agota, y el resultado es siempre efectivo y el esperado. Colombo es retado a resolver un acertijo sobre el peso de 3 bolsas de monedas de oro que termina averiguándolo gracias a la ayuda de su mujer, según dice. Es raro que algún episodio defraude y este tiene un final tajante a pesar de ser un poco rebuscado, tal vez por tratarse de un crimen cometido por un tío muy inteligente.
A destacar la breve aparición de una jovencísima Jamie Lee Curtis como una camarera que le regaña a Colombo por entrar en la cafetería comiendo un donut adquirido en una pastelería. Se lo tiene que entregar.
Al final, el asesino, ya pillado, le propone una pregunta de un test de inteligencia a Colombo convencido de que también posee un alto nivel de inteligencia, y el Teniente no tarda ni cinco segundos en deducirlo.
¿Qué palabra de estas 4 no tiene relación con las otras 3?
asfalto
siesta
tortura
llave