American Girls (100 chicas)
Sinopsis de la película
Un día de invierno, tras ser expulsado de la clase de dibujo, Sam va caminando por la calle cuando una ráfaga de viento hace que sus dibujos de mujeres salgan disparados por toda la calle. Mientra Sam intenta agarrar sus dibujos, escucha a una mujer que le dice: Creo que has perdido tu sonrisa . Es la espectacular Hope, que le entrega uno de sus dibujos, un retrato de una sonrisa. Hope le hace sonreír y Sam se enamora de su increíble sonrisa. Ella le invita a un café y juntos comparten muchas sonrisas. 3 o 4 meses más tarde, Sam, que se ha convertido en repartidor de una tienda tras malgastar cuatro años de universidad, está efectuando una entrega a la residencia femenina Susan B. Anthony. Allí descubre que le está entregando un pedido a la mismísima Hope, que ha cambiado un poco en los últimos meses. Ha perdido su sonrisa. Está muy deprimida y no le explica a Sam por qué. A partir de ese momento, Sam convierte en su objetivo descubrir qué le ha sucedido a Hope, y no dudará en meterse en una residencia con 99 chicas con el fin de acercarse a la chica que ama… y descubrir las causas por las que se encuentra tan triste.
Detalles de la película
- Titulo Original: Girl Fever aka
- Año: 2002
- Duración: 98
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Opinión de la crítica
4.3
21 valoraciones en total
Lo único a destacar de toda la película podría ser la protagonista (Erinn Bartlett) y el conjunto de tías buenorras que aparecen luciendo palmito. Por lo demás, se trata de otra comedia romática del montón sin peculiaridad ninguna. En algunos momentos resulta excesivamente aburrida porque tiene un guión totalmente plano y simplón. La trama es tan pobre que la han intentado llenar con historias paralelas absurdas, como la del amigo del protagonista que es un obseso de la masturbación, o el conseje de la residencia de chicas, que es un mirón, pero dichas escenas resultan ser más absurdas que graciosas.
Realizar una comedia con toques románticos e integrar humor escatológico es algo que muy pocos logran y este largometraje no logra aunar ambos conceptos.
La base de la historia no pintaba mal, pero se ve que les interesaba que el humor necio y vacío ocupara gran parte del metraje y provocando que el film logre en el espectador el mayor de los hastíos. Una colección de gags asquerosos y sin ningún tipo de gracia en absoluto.
El trabajo del elenco protagonista diría que es más que justito, siendo las féminas del film las que logran que aquello valga algo la pena. Jennifer Morrison y Erinn Bartlett (está más para posturear que otra cosa), logran que esperemos algo más de la película, mientras que los personajes masculinos son un auténtico cero a la izquierda, salvando de esta quema a su protagonista.
Una lástima que partiendo de una idea tan interesante el resultado final, sea una auténtico despropósito.