Adam and Dog (C)
Sinopsis de la película
La historia sobre el primer perro del Edén. ¿Qué ocurrió en aquellos primeros días de la Creación que hizo al Hombre y el Perro inseparables? El Perro, que vive observando el mundo con curiosidad, se encuentra con una extraña criatura: un humano llamado Adán, y con eso descubre que ha logrado una nueva conexión con su entorno.
Detalles de la película
- Titulo Original: Adam and Dog (S)
- Año: 2011
- Duración: 15
Opciones de descarga disponibles
Si deseas puedes descargar una copia la película en formato 4K y HD. Seguidamente te mostramos un listado de posibilidades de descarga activas:
Opinión de la crítica
Película
6.4
24 valoraciones en total
El primer cortometraje de animación nominado al Óscar se trata de un corto un poquito antiguo, ya que data del 2011, pero se ha decidido incluir en la categoría correspondiente este año porque el pasado se les olvidó (supongo).
En cuanto al corto, narra la historia del primer perro de la Tierra, y su relación con el primer hombre (Adán). En mi opinión, el corto logra transmitir la sensación de felicidad del animal y todos sus sentimientos. Esas miradas… Solo con ladridos, paisajes y gran animación, Minkyu Lee creó un gran corto con un mensaje muy bonito. Eso sí, el acto final era muy predecible. Pero eso es lo de menos, porque el resto del corto y la música de Joey Newman son maravillosos.
Conclusión: Aunque sea bueno, no es perfecto ni es mi favorito para los Óscar, pero tengo que admitir que no me defraudaría para nada que la historia de Adán y su perro se llevase la estatuilla.
Con referentes como Malick, Tarkovsky, Orson Welles o Hayao Miyazaki sobrevolando la pantalla, Adam and Dog (Minkyu Lee, 2011), mejor cortometraje en los premios Annie 2011 y nominado como Mejor cortometraje de animación para los Oscar de este año (podría ganarlo sobradamente), nos habla de la hipotética relación del primer humano en la faz de la Tierra, Adán, y del primer perro del Edén. La ausencia de diálogos, su discurrir pausado y su estética preciosista nos llevan en volandas hacia uno de los finales más bellos que se haya visto jamás en un cortometraje, inmerso en una contraposición que, entre la tristeza y la ternura, para el tiempo. Imprescindible.
Lee recrea la leyenda del primer hombre, Adán, y el mejor amigo de éste, un perro.
En 15 minutos se muestra como un perro perdido se transforma en la principal atención de un hombre prehistórico que sobrevive casi igual que el mismo perro. Tras aparecer la primera mujer, el perro pierde el protagonismo y sobrevive en la búsqueda de su amo.
La odisea está bien contada, es acertádamente muda y tiene una técnica aceptable con, eso sí, un buen uso del color.
La música ayuda mucho a recrear los sentimientos pero más allá de eso no creo que cuente nada nuevo ni demasiado original.
Lo mejor: las imágenes del bosque.
Lo peor: no me atrae su argumento.
Es interesante que Minkyu Lee con pocos medios haya conseguido una obra tan bella. La animación es soberbia y te deja eclipsado la utilización de los colores en ella. Comenzando con un bonito juego de luces en la primera parte y terminando por utilizar colores apagados en la recta final.
Nos podríamos pasar horas hablando de lo bonito que es Adam and Dog pero tampoco podemos olvidar el argumento. Como es obvio, trata del primer hombre y el primer perro sobre la tierra. Toda la narración es desde la perspectiva de ese perro y toma la decisión de ser un corto mudo, solamente escucharemos los sonidos de los animales y del ambiente.
El corto es demasiado preciosista, con demasiada carga visual. Falta que agarre al espectador con lo que cuenta, pero no es así. Es una oda al mejor amigo del hombre, ese amigo que abandonas y aun así, el te seguirá queriendo.
Le falta mas profundidad, las formas las tiene. Pero es un grato viaje al Edén y no me resultaría extraño que ganase el Oscar. Hay que estar atentos a este nuevo cineasta llamado Minkyu Lee, si este es su primer corto, estoy deseando ver que podría conseguir con su segundo.
Minkyu Lee cita entre sus referentes nombres como Terrence Malick, Andrei Tarkovsky u Orson Welles. No es una comparación, es una aproximación. La poesía implícita en la obra de los tres titanes mencionados sobrevuela, por instantes, aunque sólo sea de forma espectral, la imagen que Lee captura en su reimaginación del jardín del Edén transitado por un Adán antes de conocer a su Eva. El punto de vista es el de un perro, el primero, el mejor amigo del hombre, ya desde el génesis.
Lee realizó Adam and Dog de forma independiente ayudado por amigos (profesionales todos ellos, eso sí) y busca -más que contar una historia- capturar un instante, congelar el tiempo. No hay diálogo, la narración no avanza, es moroso en su tono pero enriquecedor en lo que ofrece, la recompensa en forma de imagen que queda grabada a fuego en la memoria. Ese encuentro en el maizal, el primer acercamiento, su bellísimo final… un triunfo, además de artesanía pura: fondo pictóricos en alta definición, animación tradicional alejada del agobio tecnológico y mucha sensibilidad al servicio de una obra que, si bien no termina por volar tan alto como sus referentes, tampoco se ahoga en el baile de nombres que Minkyu Lee admite haber tenido como modelos: porque la poesía, el milagro del movimiento, esos insertos a modo de planos naturalistas (que recuerdan a otra cumbre como es El viejo molino o a ciertas producciones de Hayao Miyazaki) se sienten puros, orgánicos, no forzados.
Adam and Dog es excelso. Ganador del premio Annie en 2011 y nominado al Oscar en 2012, merece esto y más: la reivindicación de un autor, con estilo propio, en un formato que rara vez es reconocido por los medios pero que encuentra cada cierto tiempo nuevas voces que terminarán por elevar el grito y hacerse notar. En resumen: una delicia.