Victoria (Serie de TV)

5 comentarios en «Victoria (Serie de TV)»

1. Mi enhorabuena a los creadores de esta serie. Maravillosamente ambientada, lo primero que llama la atención por encima de todo y que te deja ensimismado es la fotografía. Impresionante es quedarse corto.No se puede decir menos del vestuario y de los actores. Trabajan todos bien, los principales y los secundarios. Me han sobrado algunos escarceos, que al final no han llevado a nada, pero supongo que serán importantes en la historia real. He visto las dos temporadas del tirón, casi sin descanso y eso que llevaba tiempo sin encontrar nada interesante.
   
   De esta reina sabía bien poco, pero con esta serie me han entrado ganas de leerme toda su historia (y debe ser larga). En fin, como no quiero contaros nada os invito a que vosotros mismos veáis los primeros años de una jovencísima Victoria.

2. Hacía falta un biopic así de completo sobre la vida de uno de los personajes más conocidos e importantes del siglo XIX europeo.La miniserie busca desmitificar el legado de la reina, a su persona, a la era que se bautizó con su nombre y a su corte, desmenuzando su funcionamiento. También desvela la habilidad que tenía la reina para sobrevivir a sus primeros errores de gobierno, a los intentos de otros por gobernar en su nombre y cómo acabó ganándose el respeto y la admiración de todo su pueblo.
   
   Con una enorme tradición teatral atrás, los ingleses vuelven a regalarnos una nueva joya histórica. Interpretaciones. vestuario, ambientación, fotografía, banda sonora, todo fabuloso.
   
   Jena Coleman Doctor Who es la mejor Reina Victoria que ha dado el séptimo arte. Esa, aparentemente frágil jovencita, que toda la corte creía poder dirigir a su antojo, pero que se reveló con un carácter indómito. La serie sigue todos los sucesos de gobierno, escándalos cortesanos y principales acontecimientos internacionales sucedidos a lo largo de su vida. Todos ellos vistos, desde el punto de vista de la reina.
   
   La compleja relación con su madre, su tío lord Cumberlad, con su primer ministro, Lord Melbourne, la relación romántica con el príncipe Alberto, incluso abordando el tema de la hemofilia que traspaso a sus descendientes.
   
   Completísimo repaso a 60 años de la historia de Inglaterra y del mundo. Merece la pena verla, tanto si te gusta la historia, como si te gusta el bien cine.

3. Para todos aquellos que echen de menos Downton Abbey y estén esperando a que salga la nueva temporada de The Crown, esta es vuestra serie. Daisy Goodwin, la creadora de la serie y su guionista, es a su vez novelista. Su novela Victoria, en la que está basada la serie, parte directamente de los extensos diarios que escribió la propia reina, quien tuvo una larga e interesante vida.
   
   Es cierto que quizás no se pueda considerar la serie más precisa históricamente hablando. Sus licencias probablemente enfadaran a los más puristas, sin embargo el conjunto es más que aceptable. Podemos perdonarles que todos sean mucho más guapos que los personajes reales, la propia reina Victoria no era ni la mitad de guapa que la actriz que le da vida (Jenna Coleman), y su relación con el primer ministro Lord Melbourne (Rufus Sewell) nunca fue más allá de una relación de amistad con alguien que podría haber sido su padre. A parte de todo esto, la serie es magnífica. Ninguno de estos aspectos desmerece su visionado.
   
   El elenco de actores es uno de sus fuertes. Jenna Coleman, conocida por aparecer en la serie Doctor Who, cambia de registro retratando a una de las reinas más longevas del Imperio Británico, papel que le va perfecto. Tom Hughes está encantador y cautivador como el príncipe Albert, y su química con Jenna Coleman hace que desde el primer momento salten las chispas que debieron de saltar en la vida real. Lo cierto es que me encanta el personaje del príncipe Albert. Le da vidilla a la serie y a la vida de la reina, lo que probablemente sea cierto. No mucha gente tenía la suerte de encontrar al amor de vida en la persona con la que todo el mundo se empeñaba que se casara.
   
   El largo reinado de Victoria se va desgranando poco a poco. Comenzando por el mismo día en el que este empieza tras la muerte de su tío, y va avanzando, resaltando los acontecimientos políticos importantes que hubo en torno a su figura así como su vida personal, marcada irremediablemente por ser una mujer joven en pleno siglo XIX. Pero no todo gira en torno a ella, al igual que en Downton Abbey, y que en Arriba y Abajo, aquí también hay algo de historia sobre los sirvientes de palacio. Es algo que ya no se va a poder evitar introducir en las series de época de este estilo, y es, además, algo que estaba presente históricamente, pues las diferencias de clase eran muy grandes, y más en este caso tratándose de una serie sobre la realeza.
   
   Lo cierto es que la serie tiene todas las papeletas para ser un éxito dentro del género y la calidad de su guión y de toda su puesta en escena son claves para ello, como sucede siempre con los dramas de época. Sin duda, merece la pena, y estoy deseosa de que se estrene la segunda temporada.

4. Cuántas grandes películas, obras de arte, libros, ideas en general se han visto minusvaloradas por haberse lanzado al mismo tiempo o poco después que otra similar, con mucho predicamento o con más publicidad o, simplemente, más tempranamente expuesta, como digo. El caso que se nos viene a la mente es Amenábas y LOS OTROS o VALMONT, luchando ambos contra colosos que se adelantaron por muy poco a ellos (EL SEXTO SENTIDO o LAS AMISTADES PELIGROSAS). En cualquier caso, el tiempo siempre acaba recompensando la calidad, como en estos dos casos sucedió, incluso muy pronto. Espero que suceda con esta serie británica, tan cuidada como cualquier producto de por allí, con actores de gran envergadura, buenos guiones, bien estructurada y ambientada, que se ha visto eclipsada por la no menos magnífica THE CROWN, multipremiada y aplaudida en Europa y en Estados Unidos. Sin dejar de ser una hagiografía de la reina Victoria, esta serie nos pasea por situaciones y momentos claves de su reinado, poniendo en conocimiento de forma pedagógica momentos tan importantes como la llegada y pujanza del ferrocarril, la hambruna de la patata en Irlanda, los atentados o intentos de atentados contra Victoria y su entorno, la esclavitud y el comienzo de su rechazo y otros muchos. En el lado más negativo, quizás la visión de la reina y su entorno es en exceso bienintencionada y muy edulcorada en ciertos momentos. Aparecen y desaparecen personajes sin mucha razón para ello. Pero, con todo, una buena serie de TV con un aspecto didáctico que, en mi caso, agradezco.

5. Los Británicos hacen muy buenas series y en especial las series históricas. Recrean muy bien el periodo victoriano: Su siglo de oro. La última de ellos The Crown, sobre el reinado de Isabel II me resultó espléndida. La veneración británica sobre la institución de la monarquía, se demuestra en estas producciones con todo lujo de detalle.