The Libertine
Sinopsis de la película
Londres, 1660, Época de la Restauración. En un periodo en el que tienen lugar constantes descubrimientos y progresos en el mundo de la ciencia, la religión y las artes, vive el decadente John Wilmot (Johnny Depp), Conde de Rochester, amigo y confidente del rey Carlos II de Inglaterra (John Malkovich). Wilmot, destacado poeta, dramaturgo, soldado y cortesano, mujeriego, hedonista y libertino, es uno de los personajes más peculiares e influyentes del siglo XVII.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Libertine
- Año: 2005
- Duración: 114
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes obtener una copia la película en formato HD y 4K. A continuación te añadimos un listado de posibilidades de descarga activas:
Opinión de la crítica
Película
5.4
34 valoraciones en total
Primer largo de Laurence Dunmore, diseñador y realizador publicitario. Se basa en la obra de teatro The Libertine , de Stephen Jeffreys, estrenada en el RU en 1994. Se rodó en la Isla de Man, Blenheim Palace, Charlecote Park, Hampton Court Palace y otras localizaciones del RU. Nominada a 7 British Independent Awards, obtuo uno (actriz reparto, Rosamund Pike). Se estrenó en el Toronto Film Festival de 2004.
La acción tiene lugar en Inglaterra entre 1675 y 1680, en la época de la Restauración, cuando florecieron en el país las artes, las ciencias y los ideales de libertad. Narra la historia de los últimos años de John Wilmont (Johnny Deep), segundo conde de Rochester, héroe militar, dramaturgo, poeta y cortesano, rebelde y libertino, que llevó una vida licenciosa en extremo, como mujeriego, bisexual, alcohólico, jugador y embaucador.
La película construye un rico e interesante fresco de la Inglaterra de la segunda mitad del XVII, en la que el Parlamento reclama mayores poderes y nuevos aires de libertad recorren la sociedad inglesa. La figura histórica de John Wilmont (1647-1680) se adelantó a otros libertinos de renombre como Giacomo Casanova, el Marqués de Sade y Leopold Sacher-Masoch. La exploración y experimentación de los límites de la libertdad de costumbres y del hedonismo le convierten en víctima de numerosas penas de destierro, intrigas y desafectos, que se suman al carácter autodestructivo de su estilo extremo de vida. Son interesantes su lucha contra las normas convencionales, su reivindicación de la libertad y su defensa del librepensamiento, bases del progreso de la ciencia y las artes. La tensión dramática se incia con el rechazo que su figura provoca entre numerosos contemporáneos, su enfrentamiento con el Rey a causa de una representación teatral transgresora y crítica con la Monarquía, el grave conflicto con el soberano por una cuestión de faldas y su huida y ocultación para salvar la vida.
La música descansa en solos de piano, violín, cellos y órgano y composiciones para grupos de cuerda, que trasmiten sentimientos de tensión y romance y evocan una época dominada en Inglaterra por el liderazgo de Händel. Es emocionante la canción final ( Oh, Domine Deus, da nobis pacem ). La fotografía opta por una estética de paleta sucia (barro, humos, niebla), ambientes sórdidos (tabernas, prostíbulos) y tenebristas (Saint James Park). Hace uso de un cromatismo sepia, austero y de fuertes contrastes. El guión elebora unos diálogos brillantes y define bien a los personajes: Wilmont (libertinaje y delirio sexual), Barry (independencia femenina), Rey (celos y venganza), madre (puritanismo), etc. La interpetación de Johnny Deep es magnífica y encomiables las de Malkovich, Morton y Rosemund Pike. La direccción imprime a la obra ritmo, coherencia y algunas elipsis excesivas.
La película describe una época oscura de la historia inglesa y exalta la libertad, la independencia femenina y el librepensamiento.
Tenía muchas ganas de ver esta película, y casi me dieron ganas de quitarla a la mitad. Pasados 45 minutos el guión es muy pobre, y la película resulta un poco aburrida y sosa. La interpretación de Johnny Depp es buena, pero la actuación no cuadra dentro de la película.
Pero es que a pesar de que Johnny Depp haga una interpretación fabulosa, el guión es aburridísimo.
Apenas consiguió mantener mi atención.
Si quereis ver una vez más a Depp demostrando que es uno de los mejores actores actuales, no dudéis en verla, pero no esperéis que la película os atraiga más.
Sensaciones encontradas son las que me produjo la visión de esta película, de dudoso éxito en nuestra cartelera, con mucha seguridad. Si tuviera que extractar, diría que me ha parecido más interesante que buena. Interesante porque gran parte de los asuntos que toca me lo parece, pero discutible por su realización y por el guión, con frecuencia confuso y algo disperso.
Pero dominando todo ello se encuentra un actor, que yo catalogaría como uno de los mejores en la actualidad, Johnny Depp. A pesar de no haberle podido escuchar con su voz original -algo ya imposible en mi ciudad, salvo en la filmo- su encarnación de ese personaje tan singular como parece ser que fue el conde de Rochester, es de las que dejan huella.
El director, quizá porque su escuela ha sido el mundo de la publicidad, parece tener el baile de San Vito en muchas secuencias, por la forma en que mueve la cámara. Sistema empleado por él que creo no se aviene con el tono ni la época retratada. Debe ser que es la mejor forma que él conoce para intentar disimular el origen teatral del texto, sin conseguirlo ciertamente, porque parece muy obvio.
Lo mejor, la ambientación. Conocida es la habilidad de los británicos para que nos creamos sus decorados, su aire. Esa humedad, ese barro, esa suciedad, esa zafiedad, grosería ambiental, que bien recuerdan a los grabados de Hogarth, es lo que a la postre más me ha convencido, junto a Depp, de este filme, que no obstante sus imperfecciones, recomiendo a los aficionados.
Elevar la voz sin temor a ser rechazado por lo que dices es, sin ninguna duda, un riesgo que vale la pena correr y esa es la actitud tanto de Johnny como de Dunmore en este filme de estética ennegrecida, turbia y confusa.
Estética aplicada a la narración, la cual recoge dichos adjetivos y hace que la visión de la película sea por momentos costosa. Pero la gran actuación del Sr. Depp y el resto del reparto hace que ese esfuerzo merezca la pena, haciendo asi de esta, una película bastante interesante.
Lastima de algunos cambios secuenciales desconcertantes, los cuales te hacen plantear dejar de verla en según que momento, y un ritmo, en ocasiones, cargante, sino fuera por ello, en la mente de todos los que vieron y veran este filme, se recordaría durante mucho tiempo las audacias de este gran libertino.
Por último, remarcar el prólogo y el epílogo, donde Johnny Depp se encuentra solo frente al objetivo, mirando el uno al otro, conmoviendo el uno al otro, entre palabras y gestos. Hay es donde se demuestra quién es realmente un gran actor y sino que se lo digan a David Strathairn, ganador del Oscar 2006 por Buenas noches y buena suerte .