Planta 4ª
Sinopsis de la película
Miguel Ángel, Izan, Dani y Jorge, son un grupo de chicos que logran con su alegría desafiar el desprecio del destino y hacer soportable su convalecencia en la planta de traumatología de un hospital. Los Pelones descubren en este contexto la importancia de la amistad y de la pertenencia a un grupo. Pero frente a las reafirmaciones colectivas, está la identidad de cada uno reaccionando a su situación: la soledad pretendidamente autosuficiente de Miguel Ángel, el temor de Jorge al diagnóstico, los recuerdos imborrables de Izan, las inquietudes emocionales de Dani… El humor es la fuerza vital que emplean Los Pelones para alterar su suerte.
Detalles de la película
- Titulo Original: Planta 4ª
- Año: 2003
- Duración: 101
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Opinión de la crítica
6.6
71 valoraciones en total
Pues a mi por el contrario, no me ha decepcionado en absoluto esta película. Me ha gustado…principalmente por la forma tan sencilla y entrañable con la que se trata un tema tan delicado como es esta tan temible enfermedad. Imposible tratar este tema sin retratar el sufrimiento y el drama personal…pero hete aquí que estos chicos, los llamados los pelones intentar evadirse como pueden del drama que les supone la enfermedad y hasta de la mismísima muerte acechándoles a cada momento de su vida, haciendo las mil y una travesuras dentro del hospital donde se ven condenados a vivir mientras dura el tratamiento. ¿Estopa? pues me parece fantástica su intervención…es algo más con lo que amenizar el dia a dia de esos chicos.
Planta 4ª es una cuidada comedia llena de emotividad con tonos agridulces ambientada entre un grupo de adolescentes internados en la cuarta planta de un hospital. Antonio Mercero vuelve a trabajar con chicos jóvenes, una constante de muchas de sus películas y de la serie por la que siempre será recordado: Verano azul.
El filme, basado en la obra de teatro de Albert Espinosa Los Pelones, narra la historia de un grupo de quinceañeros que comparten un barrio muy peculiar: la planta de traumatología de un hospital. La película presenta el día a día en ese pequeño microcosmos. Aparte de las dietas hipo sódicas, también hay pacientes nuevos que conocer, enfermeras de las que burlarse, incursiones nocturnas por los pasillos del hospital, partidos de baloncesto a jugar en sillas de ruedas… Mercero utiliza el humor como la fuerza vital para mostrar la vida de estos jóvenes, que está basada en las experiencias personales del autor y guionista Albert Espinosa, que superó un cáncer y pasó gran parte de su adolescencia de hospital en hospital.
Aunque este hospital tenga costumbres, jerarquía, lenguaje y economía propios, es un reflejo del mundo. En él hay gente mejor y gente peor, momentos felices y amargos…
Con un tema tan bueno como el que tenemos entre manos se podría haber hecho una gran película. Sin embargo, los actores patinan constantemente, los diálogos son a menudo lamentables (he tenido varios ataques de vergüenza ajena durante la película) y la búsqueda de la lágrima fácil es tan, pero tan evidente, que no se me arrugó la barbilla ni en los momentos supuestamente más duros. Y esto lo dice una que lloró con Terminator II.
Por otra parte, no tengo mucha base para afirmarlo, pero me da la sensación de que no se han documentado muy bien sobre el funcionamiento y el ambiente de un hospital. No creo que sea tan fácil entrar a una sala de radiología y hacerse una radiografía, como Pedro por su casa, por poner un ejemplo.
Ya sabemos que Mercero es un experto director de niños y adolescentes, que extrae lo mejor de ellos. Los chavales cumplen, aunque algunos diálogos resulten forzados por estar pensados más bien para adultos (cuando el pelón y la anoréxica hacen el pacto, por ejemplo), pero, en general, los chicos tienen cosas de chicos.
También sabemos que Mercero tiende hacia la sensiblería fácil (si es que ésta existe), pero su peculiar sentido del humor y su sabiduría entretienen en todo momento.
Una de esas pocas películas que transmiten alegría usando una historia a priori triste.
Efectivamente, sobra la comercial intervención de Estopa. Supongo que esto resulta más molesto si la ves en el cine (y si no te gusta Estopa, claro), donde no puedes pasarla a velocidad rápida.
Una película muy bonita. Me han gustado mucho las interpretaciones de todos los pelones , me parece que están bastante creibles, y hecha con mucha naturalidad. Engancha facilmente, y al espectador le llega al interior de forma muy emotiva. Una mirada hacia adelante, y poniendo un interés para que aquellas personas con cancer ( o con otro tipo de enfermedad incluso), no se rindan, hasta el final, tomándose la vida como broma, pero al mismo tiempo dandole importancia al intento de continuar viviendo, superándose dia a día. Muchas de la escenas quedaran para el recuerdo. Le doy un 8. Muy RECOMENDABLE.
PD: Las escena del helado, con los tres pelones en bañador es una de las mejores, pero cada escena de esta película es destacable.