Nunca juegues con extraños 3

5 comentarios en «Nunca juegues con extraños 3»

1. Una película desastrosa en todos los sentidos. Nada tiene que ver con la primera parte. Mal hecha, mal argumentada…y lo peor es que pretenden hacer una cuarta parte.
   
   Los actores malisimos, el protagonista principal hace las escenas sin bajar la ceja del ojo!

2. Cuando supe que Declan OBrien se pondría al frente de esta tercera entrega de JOY RIDE (franquicia que no debería haber sido tal, vistos los resultados de la primera secuela), pensé que esto iba a ser un desastre y no solo no me equivoqué, sino que es de las secuelas más absurdas que haya tenido el disgusto de ver. Viendo el currículum previo de este señor (las 3 últimas entregas de WRONG TURN- akka KM 666- akka CAMINO SANGRIENTO, sic), lo cierto es que uno no puede esperar una obra maestra, ni tan siquiera un buen film, pero rebajar a simple slasher televisivo una saga que no era tal (en la primera entrega era un juego del gato y el ratón sin siquiera una sola muerte y, además, con un final de los buenos y aunque la secuela era bastante inferior, el director Louis Morneau supo imprimir de intriga la trama y dotar de carisma a sus personajes), es cuanto menos sonrojante y, por qué no decirlo, de inútiles. Viendo NUNCA JUEGUES CON EXTRAÑOS 3 (y si uno ha sido tan valiente para tragarse CAMINO SANGRIENTO 3, 4 y 5), lo cierto es que puedes pensar que el señor OBrien está simplemente rodando una nueva entrega de los 3 caníbales, porque el film es tan impersonal, que si no es porque los deformes no aparecen y se nombra por ahí a un tal Rusty Nail (por cierto, gran error mostrar su rostro durante todo el film, cuando en las 2 anteriores, lo mejor era el misterio con el que es llevado el aspecto del personaje), lo mismo podría llamarse NO HABLES CON EXTRAÑOS QUE EL CAMINO ES MUY SANGRIENTO 3/4.
   
   Ya simplemente con la escena que arranca el film y el nivel de interpretación de los 2 actores , sabes que estás ante un nuevo truño y los títulos de crédito iniciales son, cuanto menos, risibles.
   
   El nivel de casquería es absurdo, han convertido en otro Jason (salvando las distancias) del tres al cuarto a un psicópata, que en las anteriores se dedicaba a jugar psicológicamente con los sufridos adolescentes, algo mucho más efectivo, que simplemente hacer 4 o 5 set pieces a lo SAW, con el único propósito de dar asco.
   
   El guión es… Espera… ¿Qué guión?
   
   Las interpretaciones son… Espera… ¿Son actores?
   
   La dirección es… Jajajajajaja! De eso no hay…
   
   ¿Lo peor? Ver el making of del DVD y escuchar al inútil de Declan decir que su intención ha sido crear un cruce entre el primer JOY RIDE y FAST AND FURIOUS (y se queda tan pancho, el imbécil…).
   
   – Lo mejor: nada, todo huele a refrito mil veces visto y además muy mal hecho y llevado a cabo de forma nefasta.
   
   – Lo peor: no hay por donde cogerla, pero lo más lamentable es que vuelven a dejar un final abierto (!!!!!)…

3. Tercera entrega que es un calco de la segunda, aunque en esta ocasión la única variante es que el chico descerebrado es un corredor de carreras con un modesto equipo, y lo habitual con sus respectivas novias que cogen una ruta alternativa para ahorrar tiempo desestimando todos los consejos para que no vayan por ahí… Repetitivo hasta la saciedad, con policías imbéciles incluido, irreal a más no poder y con los clichés y tópicos recurrentes de este tipo de género. Una especie de mezcla similar a la saga de Viernes 13 . Sólo para amantes del cine gore.

4. Tercera e imagino que última entrega de la franquicia Nunca juegues con extraños. Para comprender el estilo de películas que tiene esta franquicia hay que haberlas visto una por una. Partimos de la base de una primera entrega bastante aceptable, entretenida y bien llevada de la que, con los años, han ido sacando más secuelas para sacar tajada pero la calidad descendía cada vez más. La segunda parte ya era muy floja, apenas disfrutable y realmente era carne de videoclub. No aportaba nada nuevo ni tampoco nada destacable. Con esta tercera ocurre lo mismo, es decir, un producto pobre, cogido con pinzas y que huele a carnaza de videoclub con solo ver su portada.
   
   Normalmente suelen pasar estas cosas cuando intentan sacar jugo a una película que, por otro lado, tampoco era una obra maestra. Vieron que la primera tuvo mucho éxito y triunfó y se dijeron: Vamos a hacer más. Para las productoras tal vez sea un pozo de beneficios, no lo sé, pero para el público desde luego que no lo es. Nos venden productos tan flojos y pobres que lo único que nos hacen es perder el tiempo.
   
   La historia que nos plantea esta nueva secuela no sigue donde lo dejase la anterior, por lo que si no la has visto no te pierdes nada. Continua con el icónico personaje de la saga, el camionero psicópata, pero poco más. La trama arranca bastante bien con un prólogo más o menos interesante, pero en cuanto muestran al grupo protagonista pierde fuelle. Esta es la sensación que me ha transmitido, para vosotros puede ser otra distinta. A partir de ahí vemos la típica historia sin sorpresas de la que todos nos imaginamos por donde irán los tiros. Lo peor del asunto es que aciertas de antemano. Te imaginas así a ojo por donde irán, el típico suceso absurdo con el malo de la función que les hará perseguirles todo el tiempo… En fin, todo el conjunto. No sorprende, entretiene de mala manera y apesta a sobremesa de principio a fin.
   
   Interpretativamente hablando no creo que haga mucha falta extenderme mucho, ¿verdad? De todos es sabido que en películas como esta, de sobremesa, el apartado interpretativo es algo que no importa demasiado. Es algo en lo que casi nunca suelen invertir mucho dinero y eso, al final, se nota. Todos ellos son jóvenes, chicos y chicas de buen ver, pero cuyo talento es más bien escaso por no decir que no tienen. El camionero cumple bastante bien, pero tal vez sea por el carisma que le han dado más que por cosa de talento. No lo sé. Desde el primero hasta el último entran perfectamente en lo que todos os esperáis encontrar en una cinta como esta, interpretaciones flojas, del montón y de usar y tirar. No tiene más.
   
   En cuanto al tema de las muertes y demás debo decir que se lo han currado bastante. Con esto no pretendo insinuar que sean un lujo, para nada, pero viendo las limitaciones que posee, tanto económicas como de las otras, se nota que han puesto algo de empeño en que esto saliese bien. Algunos de los asesinatos están bien hechos, o al menos están todo lo bien hechos que se podía. No me ha decepcionado mucho este apartado, me esperaba algo bastante peor.
   
   En resumen Nunca juegues con extraños 3 es una secuela que, sinceramente, no merece la pena ver. Según acaba apunta a una cuarta parte, pero no creo que se haga viendo el resultado que han tenido la 2 y la 3. Nadie la está pidiendo. No se la recomendaría a nadie, pero no por mala, que un poco sí lo es, sino porque no aporta nada al séptimo arte ni a la saga. La única buena y aceptable, como digo, es la primera.
   
   Lo mejor: No tiene nada realmente bueno. A niveles muy generales se deja ver.
   
   Lo peor: Historia muy plana y previsible, apesta a sobremesa a kilómetros y un apartado interpretativo pésimo.
   
   * Floja *

5. De mal en peor. Como toda secuela en forma de subproducto estrenado directamente en mercado doméstico, esta nueva entrega solo trata de aprovechar la fama de la franquicia (que tampoco es que fuera mucha) y realmente es bastante lamentable.
   
   Algunas de las muertes son bastante macabras, y eso es lo único bueno que podemos decir de este bodrio.
   
   Los actores, puesta en escena, argumento, realización y montaje son completamente pésimos.
   
   Y además, encima de que tiene poco que ofrecer, algunas escenas se nota a distancia que están alargadas a conciencia para rellenar tiempo. Muchos diálogos, negociaciones con el asesino e incluso hasta los asesinatos en sí mismos se hacen de una forma deliberadamente lenta para que la película dure más partiendo del poco y malo material que tiene.
   
   Otra cosa que no me gusta es que tiene demasiadas escenas fuera de la carretera, lo que hace que se pierda la esencia de la saga. Lo más interesante era ver la cantidad de cosas que podían pasar en un coche en marcha, o en bares y hoteles de carretera en esas kilométricas vías de Estados Unidos. Pero aquí hay mucho tiempo gastado en una gran nave y en un cementerio de coches, sin la más mínima tensión.
   
   Como digo en el título, no veré más, pues no me extraña que hagan más partes.