Nuestras pequeñas batallas
Sinopsis de la película
Mientras que Olivier, de 39 años, pone tanto esfuerzo como puede en su trabajo, Laura, su esposa y la madre de sus dos hijos, desaparece de la casa y lo deja solo para que asuma sus responsabilidades. Olivier, desconcertado, tendrá que asumir su nuevo papel como padre y criar a sus hijos por su cuenta.
Detalles de la película
- Titulo Original: Nos batailles aka
- Año: 2018
- Duración: 98
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Opinión de la crítica
Película
6.7
83 valoraciones en total
Un buen retrato de este mundo en el que vivimos donde la deshumanización en el trabajo, el agotamiento en la familia y los problemas económicos que se sufren, hacen que la vida se haga muy cuesta arriba y personas que no consiguen llevar el ritmo caigan en la insatisfacción o el abandono.
Olivier, es encargado y sindicalista en una fábrica, vive a las afueras de la ciudad con su esposa Laura y sus dos hijos. Todo parece ir bien, pero un día Laura sale de la casa llevándose sus pertenencias y desaparece abandonando a su familia. Olivier muy agobiado por su trabajo tendrá que lidiar con la educación de los hijos y llevar la casa. Los intentos de encontrarla no surten efecto…
Un buen drama francés que te golpea con dureza por la realidad que cuenta, todos nos hemos visto reflejados en muchas cosas que cuenta. Romain Duris hace uno de su mejores papeles que embutido en su trabajo y en los problemas de la empresa no ve las señales de angustia que su esposa le envía.
El director Guiullaume Senez evita la explicación de los motivos del abandono y encuentra un equilibrio perfecto entre la rutina de la vida diaria de esta familia rota así como la solidaridad emocional entre las personas que le rodean. Sobre todo de su madre y hermana.
La puesta en escena es discreta y eficaz, centrándose más en los sentimientos encontrados del padre, así como del niño y la niña pequeña, la cual sufre un pequeño trauma que le impide hablar durante un tiempo. Toda una mirada sensible y conmovedora de esta sociedad en la que vivimos con muchas batallas sociales que hay que ganar en nuestra lucha diaria.
Un gran film y un grandísimo final.
Destino Arrakis.com
Cine belga intimista y reivindicativo. El entorno inicial fábrica con métodos fordistas donde está todo automatizado y los suicidios por despido laboral forman parte del paisaje. El mundo laboral masculino del 24/7 y como los empleados lo asumen abandonando a su familia y a sus seres queridos.
Lo emparenta con el cine de Lafosse. Es lo contrario a una película típica de Hollywood: salen los problemas familiares, las rutinas hogareñas, los niños son maduros, salen también los sindicalistas, etc. De pronto la vida golpea y la reacción puede ser un estallido momentáneo de violencia. No había visto ninguna película de este director belga y me ha gustado mucho. El actor Ramis en su papel de padre descuidado, Olivier, hace un buen trabajo mostrando muchos matices. La película muestra una precariedad laboral que se resume muy bien en esta frase de Jorge Riechmann: Nuestro problema no es reconstruir el Estado de Bienestar –es pensar cómo lograremos dar de comer a la gente en los años que vienen.
Nuestras pequeñas batallas es el segundo film de Guillaume Senez tras 9 meses, un drama social sobre dos adolescentes que deciden seguir adelante con un embarazo. En su última película sigue apostando por el drama social, esta vez con el objetivo de representar a la clase media en su puesto de trabajo y en su vida cotidiana más familiar, profundizando en la paternidad y en el duelo por el abandono. Olivier de 39 años trabaja como jefe de equipo en una empresa especializada en la distribución de productos por compra electrónica. Está muy implicado laboralmente y se preocupa por sus compañeros de trabajo, haciendo presión en las reivindicaciones que puedan tener siempre apoyado por el sindicato. Le dedica tantas horas a su empleo que nunca está por casa. Su mujer Laura, su hijo Elliot y su hija Rose le echan de menos. Laura trabaja como dependienta en una tienda de ropa, así que la madre de Olivier les ha de echar una mano de vez en cuando. La constante ausencia de Olivier provoca que Laura se vea superada por la situación, siendo incapaz de afrontar el trabajo, las tareas del hogar y la responsabilidad absoluta de criar a sus hijos. Un dia Laura desaparece y Olivier tendrá que aceptar el abandono y afrontar su nuevo papel en la familia. Nuestras pequeñas batallas es cine familiar, social e intimista del que deja mella tras su visionado. Con obsesión por el detalle y mostrando unos retratos totalmente creíbles de los diferentes personajes, la película afronta temas complejos como la precariedad laboral y la conciliación, mostrando como es capaz de desquiciar a las personas y romper esquemas familiares aparentemente consolidados. Fracaso tras fracaso, el recorrido de Olivier supondrá un aprendizaje que lo convertirá en mejor trabajador, padre, hijo, hermano, y en definitiva, mejor persona. Mucha atención a su perfecto desenlace.
Más críticas de cine y series (y algún que otro monigote): https://unhombresinpiedad.com