Mamá María
Sinopsis de la película
Patience Portefeux es una traductora especializada en escuchas telefónicas para la brigada de estupefacientes de París. Es un trabajo precario y mal pagado. Un día, Patience se dispone a hacer un favor al problemático hijo de una mujer y acaba involucrada en un trapicheo de drogas fallido, lo que le deja con una pila de cannabis en su posesión. Mientras mantiene su trabajo en la brigada anti-droga, Patience cruza al otro lado y se convierte en camello.
Detalles de la película
- Titulo Original: La daronne
- Año: 2020
- Duración: 104
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Opinión de la crítica
Película
5.8
61 valoraciones en total
La historia está basada en la novela de Hannelore Cayre, quien se inspiró en su experiencia como abogada criminalista. Toda una enrevesada historia de narcotráfico de hachís que gracias a la sublime interpretación de Isabelle Huppert nos ofrece un film sumamente entretenido con giros muy divertidos.
Patience Portefeux, es intérprete judicial de legua árabe, colabora con la policía en las escuchas a los narcotraficantes. También mantiene un romance con el inspector jefe la comisaria. En una operación donde se está introduciendo en Francia un camión con 1,5 toneladas de Hachis procedente de Marruecos escucha que el conductor es hijo de la enfermera que cuida a su madre, así que decide avisarle en secreto de que se deshaga de la mercancía porque va a ser detenido. Las intenciones de Patience es apoderarse de la droga…
El director Jean Paul Salomé (Espías en la sombra, Arsene Lupin) mezcla bastante bien el humor en esta película policiaca, sobre todo con el doble juego que comienza a ejercer la protagonista como una madame narcotraficante, ya que empieza a vender en París todo el alijo que tiene y rápidamente se da a conocer entre los narcos, como en las investigaciones de la policía.
Huppert deja de lado sus papeles de mujer turbia y psicópata para ofrecer una imagen de fragilidad y a la vez de fuerza en su personaje, que con mucha sangre fría sabe manejarse muy bien entre la legalidad y la ilegalidad simplemente con un disfraz.
Destino Arrakis.com
Es complicado catalogar esta producción francesa ya que por su planteamiento parece una comedia, contando incluso con algún que otro personaje paródico, pero rodada en un tono bastante serio aunque sin que ocurra nada excesivamente dramático o impactante, convirtiéndose en un mero esparcimiento creado para lucimiento de su protagonista femenina.
Y es que Isabelle Huppert es el centro artístico y narrativo de una película que acaba y empieza con ella, y donde los secundarios solo son marionetas a su servicio, tanto dentro como fuera de la pantalla. Todos estos factores hacen que este largometraje no sea ni bueno ni malo, pero sí bastante irrelevante.
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La Daronne ( argot para mamá en francés barriobajero) o ¨´Mama weed¨ como ha sido titulada para el público de habla inglesa, aunque con lo que trafica es hachís y no marihuana, es una película que gira completamente alrededor del personaje interpretado por la bella Isabelle Hupert ( para mi la versión francesa de Michelle Pfeiffer). Una traductora de árabe para la policía, viuda, con una madre en una residencia y dos hijas mayores y que vive sola en un apartamento con todos los vecinos chinos ( sí, chinos) en las afueras de París.
La película bascula demasiado entre varios géneros sin llegar a concretarse en uno. Podría ser una comedia, pero también es un drama, o incluso podría ser una pelicula policiaca. Eso sí, siempre con Isabelle Huppert, llamada Patience en la película, muy significativo el nombre elegido, en la pantalla. Apenas pasa un minuto sin que no salga su personaje. Y eso lastra al film porque no hay pinceladas del resto de personajes, meros secundarios. Por ejemplo, me quedé con ganas de ver más en la historia a la vecina china, que podía aportar una vis cómica muy favorecedora. En cambio, las dos hijas de Patience no aportan nada. La historia de la madre en la residencia es demasiado trillada. No así el personaje de la cuidadora Khadija, de lo mejor de ¨La daronne¨ y el nexo de unión de la historia.
En suma, como comedia, no funciona. Falta explotar más situaciones, malentendidos, que siempre funcionan para hacer reir. Tampoco funciona como drama (la marginalidad, inmigración, vejez,etc, son historias secundarias en la pelicula). Y como policiaca hay demasiadas casualidades, inverosimilitudes y equivocaciones para que funcione.
Un cinco por la belleza de Isabelle Huppert que llena la pantalla. y poco más.
Entretenida película francesa, que tiene como mejor aval la presencia y trabajo de la gran (aunque de pequeño tamaño) Isabelle Huppert. Ella es el alma del film, prácticamente aparece en todas las escenas y su personaje es rico en mostrar sentimientos, a veces con pinceladas en su rostro y mirada.
El filme combina varios géneros de forma que a uno/as les parecerá perfecta y a otro/as insatisfactoria. En mi opinión funcionan a medias pero complementándose de forma que al espectador le interesa en todo momento aunque compruebe, a medida que avanza el metraje, que hay que tomárselo como un cuento, pues si se reflexiona, nada tiene demasiado sentido ni credibilidad.
Pero esto es lo de menos, pues en el caos vital de la protagonista y los líos en los que se mete, está el disfrute con varias escenas (las compras en el supermercado) de verdadera gracia, que sin sacar la carcajada del espectador, sí que le provoca la sonrisa. Es comedia fina y todas las escenas, por ejemplo, en las que aparece la protagonista con la pareja de traficantes provoca divertimento.
En efecto, tal y como se ha apuntado por ahí, existen personajes que si no hubieran aparecido no pasaría nada, tal es la nulidad que aportan a la trama, así como momentos verdaderamente estrafalarios.
Pero en líneas generales está bien, tiene estilo visual y el montaje es de calidad.
Es curiosa y no aburre nunca.
https://filmsencajatonta.blogspot.com/
Película con un excelente ritmo de Jean-Paul Salomé, director de cine y guionista francés reconocido principalmente por su película Espías en la sombra (2008). Salomé se sirve de un guion propio junto a Hannelore Cayre, adaptación de la novela de la misma Cayre, La Madrina. La dirección es más que aceptable y la trama envolvente.
Isabelle Huppert se mete en la piel de Patience Portefeux, una traductora del árabe al francés que trabaja para la policía y que a sus cincuenta y tantos años, empieza a inquietarse por su inmediato futuro. Ella es una mujer viuda con dos hijas, asuntos económicos por resolver y obligaciones, sobre todo para con su madre «La Princesa», una mujer mayor de frágil salud.
Patience está destinada en la brigada antinarcóticos, trabajo sumamente desagradable, en el cual sortea como puede y con dignidad, las explosiones a veces violentas tanto de los detenidos como de los propios miembros de la policía.
La Huppert es desde el principio hasta el final La Daronne o en la versión española, Mamá María (incluso María Hachís habría sido más apropiado). El director Salomé lo sabe y por ello deja toda la carga de la película en manos de la actriz. Y a fe que Huppert aprovecha la oportunidad para interpretar un rol que va del lado de la Ley a la otra orilla del delito y la delincuencia, un personaje cargado de bribonada y bandazos que es interpretado con brillantez y lucimiento por la artista. Toda la película es Isabelle Huppert, una actriz que en este trabajo vuelve a demostrar que es capaz de todo, lo cual ya ha confirmado con directores como Michael Cimino, Michael Haneke, Chabrol, Verhoeven, Godard o Hong Sang-soo.
La película tiene un ritmo ágil que hace mantener la atención constantemente sin perder ripio. Toques de humor negro por demás de gran incorrección política donde la protagonista, con los gestos, miradas ladinas y la sonrisa cínica y definitiva de Isabelle Huppert, hace de especie de mujer todo terreno que ha de girar en torno a varios ejes.
Es una historia original, caprichosa incluso un poco loca, interesante y que está presidida por cierta carga antisocial, o sea, que Patiente se salta la ley y el código deontológico de la profesión que ejerce. Todo lo cual precipita una narración que en sus inicios resultaba lacia, hacia el territorio más movido de la truhanería, cuando ella decide quedarse con parte del alijo que se investiga y persigue, para gestionar por su cuenta la venta de la droga a pequeños narcos de barrio.
Mamá María acomete con fuerza, inteligencia y riesgo de su parte el negocio, lo cual que la cinta se pone interesante e incluso emocionante y tensa por momentos.
Patience se crea un personaje expresamente para introducirse en el mundo del tráfico y de los camellos. Se viste como una gran dama con chilaba de lujo, pañuelo de Hermès cubriéndole la cabeza y una estilosas gafas de sol. Lo cual hace que transmita una imagen imponente y misteriosa.
Mamá María tiene que vérselas con dos traficantes de poca monta que ejercen el rol cómico de ingenuos fascinados por la misteriosa mujer, pero también con otros capos más peligrosos y con la policía que le sigue los pasos.
Vemos, pues, a la Huppert de gran señora árabe negociando con los camellos, lo cual tiene su gracia. De igual modo resulta interesante la relación de Mamá María con su vecina de origen chino, con la que acaba estableciendo una inesperada complicidad.
Este es un trabajo más cómico de lo común en la Huppert, con un registro grácil, hasta parece que está en la pantalla para divertirse o jugar. La actriz ofrece una cara diferente a la de tantos personajes graves, trágicos o duros a los que ha dado vida.
Y recordaremos por largo tiempo que Isabelle tiraba las cenizas de su madre muerta en los pasillos de Las Galerías Lafayette, con esa sonrisa de satisfacción, como de haber de haber transformado en nuevo algo conocido.
Entre la fuerza de la Huppert y una temática variada y azarosa, y trenzando varios géneros a la vez, el film avanza con agilidad por paisajes urbanos parisinos, escenas callejeras y algunos toques de humor. Todo ello eleva la calidad fílmica de un guion irregular y un tanto desnortado, para convertir esta obra en una pieza recomendable.