Majstori, majstori!
Sinopsis de la película
Narra un día en una escuela de Belgrado. Marcado por dos hechos: la limpiadora se jubila al día siguiente, y hoy le hacen una fiesta de despedida. Y por otra parte, la profesora de inglés ha denunciado a uno de sus compañeros: afirma que le obligó a iniciar una relación bajo amenazas gracias a su abuso de poder.
Detalles de la película
- Titulo Original: Majstori, majstori! (All That Jacks)
- Año: 1980
- Duración: 83
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Opinión de la crítica
Película
6.7
80 valoraciones en total
En primer lugar quiero que quede claro que mi crítica no es más que una prolongación de la de mi amigo Vozidar, que nos dejó un pequeño regalo en su hermosa crítica (uno de los 34 que podemos leer en FilmAffinity) de este peculiar film. No es esta una película en la que uno pueda meterse en frío, es decir, con el fin de pasar el rato sin más, de hacerlo estoy seguro que el espectador quedará al final de ésta con cara de circunstancias. Por lo tanto creo que es necesario tener un pequeño conocimiento de cómo funcionaba un régimen basado en el llamado socialimo real .
Este film pertenece a toda una tradición nacida de la Escuela de Praga donde encontraríamos a grandes directores como Krzistof Zanussi (recomiendo Iluminacja ), Krzistof Kieslowski, Feliks Falk o Agnieszka Holland. Markovic es parte de esta corriente de directores de Europa del este que desarrollaron una actitud de crítica reconciliatoria más que de confrontación dialéctica frente al orden establecido. En cualquier caso es posible que Markovic vaya un poco má allá de esta crítica reconciliatoria, como voy a tratar de explicar en el spoiler. No obstante, si en algo se parece el yugoslavo a sus colegas es en sus preocupaciones: el día a día en el socialismo real, con especial hincapié en sus defectos funcionales: burocracia, soborno, desempleo, individualismo, exceso de ambición, arribismo… Algunos de estos temas están muy presentes en Majstori, Majstori! , tanto que son su eje vertebral, especialmente el arribismo de la directora, como ahora veremos.
Sin embargo nada se ve verdaderamente claro hasta la aparición de Miloje, un personaje verdaderamente estelar. Como Vozidar destaca muy acertadamente son los últimos 15 minutos los que encogen el alma, aquellos en los que Markovic despliega todo su virtuosismo. Miloje es la materia gris en la sombra, la representación de la nomenklatura yugoslava que mueve los hilos en la sombra. Desde el mismo momento en que entra en acción con la directora de la escuela surgen toda una serie de contradicciones que merece la pena que atendamos con algo más de atención:
A Miloje le preocupa claramente el exceso de celo de la directora, siempre dispuesta a crecer y mejorar. En un primer momento esto no tiene porque parecer algo negativo. Sin embargo Miloje nos muestra cómo verdaderamente se ha mezclado con esto una ambición personal, un individualismo que poco tiene que ver con los valores de la Federación. Además observa la gran escuela belgradense como algo deshumanizado que ha perdido cualquier viso de armonía y equilibrio orgánico dada la gran cantidad de alumnos y la modernidad de los medios con que cuenta. No obstante su discurso está cargado de hipocresía porque lo que realmente teme es el buen hacer de la directora, buen hacer que podría amenazar su posición y la de otros como él, ya que ésta desea hacerse conocer por los buenos resultados de sus alumnos.
La vía nacional hacia el socialismo de Yugoslavia tras la ruptura con Stalin se denominó autogestión. Como tantas cosas en Balcanes, era lo que era sin serlo y parecía lo que no parecía porque no lo era aunque lo era. Es decir, era un tinglado. Existía una decentralización económica a varios niveles, que se suponía que alcanzaban hasta los centros de producción, controlados por sus propios trabajadores, pero en realidad el partido, que era uno, controlaba todo. Era una economía centralizada con apariencia de descentralización y, eso sí, sufrió los problemas de ambos modelos. El fundamental fue el descontrol del gasto. Yugoslavia vivió de la deuda y creció gracias a ella. Llegados los 80, hasta los ayuntamientos podían comprar deuda en los mercados occidentales. El resultado fue que entre 1981 y 1985 hubo un descenso del nivel de vida y poder adquisitivo de más de la mitad. Si hablas con yugoslavos que vivieron aquella época, recordarán con humor la reuniones a la que les obligaba la autogestión en sus centros de trabajo. Del mismo modo, recordarán el nepotismo que suponía, de enchufes y redes familiares, la creación de puestos de trabajo fantasmas y cómo se ocupaba la empresa de toda tu familia en sentido estricto. Hasta le hacía regalos a tus hijos por Navidad. La productividad de todo aquello quedó comprometida tras la crisis del petróleo, la ayuda del FMI a México, que le impidió asistir a Yugoslavia y la crisis industrial de todo el mundo occidental, sumado a la del comunismo en general. Ya sabemos que a Yugoslavia se le atragantó el proceso que debería haber conducido al desmantelamiento del sistema comunista y desencadenó nacionalismos y guerras.
En esta película se muestra la autogestión en una escuela. El descontrol del gasto está presente en cada detalle, hasta crean un canal de televisión propio para registrar los eventos que celebran. La corrupción de baja intensidad también aparece en numerosas circunstancias, como la profesora que organiza todas las excursiones a un mismo lugar porque tiene acuerdos secretos con los autobuseros. Etc… etc… En general, los profesores no están a lo que tienen que estar, son individualistas, egoístas y frustrados. Uno dice que como carpintero podría tener un Volvo y ahí está con los putos críos .
La protagonista es kevo, de keva, que es el slang de madre . La señora que limpia las instalaciones. Ella no tiene ocasión de tener problemas sentimentales, no hace más que trabajar, desde primera hora. Explotada en el trabajo y en casa. Se lo especifican, que también trabaja en casa . Porque si leemos el feminismo surgido en Yugoslavia, una crítica que hacía era que la revolución no había liberado a la mujer realmente. Como metáfora, vemos que el finiquito que le dan a la limpiadora hay una pugna por robárselo con diferentes picarescas…
Film crítico con el sistema, atrevido, moralista quizá. Pero de precisión y gran acierto, a la vista del desmoronamiento posterior de todo este sistema sin ninguna solución de continuidad. Es bonito, sin embargo, observar toda esa arquitectura racional del colegio, se aprecia lo que tuvo que ser construir esos centros de la nada. Pero, como es obsesión en el cine de Goran Markovic -sobre todo lo señaló en Vec vidjeno- la alegría del sistema era de cartón piedra y debajo estaban siempre las fuerzas atávicas, insatisfechas, llenas de rencor.