Luz de gas
Sinopsis de la película
En plena época victoriana un pianista se casa con una bella joven, y juntos se van a vivir a casa de una tía de ella misteriosamente asesinada años atrás. La felicidad de la mujer termina cuando empieza a oír ruidos que la aterrorizan.
Detalles de la película
- Titulo Original: Gaslight
- Año: 1940
- Duración: 84
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Opinión de la crítica
Película
7.3
92 valoraciones en total
No he visto Luz que agoniza , el remake americano de esta película con el mismo título original. Y no lo he visto por un reparo que tengo: Charles Boyer me da asquito. Rezuma azucar glass por todo su cuerpo. Ya, ya sé que es un prejuicio mío, pero después de ver esta película, la original, la fetén, me alegro.
Y me alegro porque el desconocido Anton Wallbrook hace una actuación portentosa. Un buen malo tiene que tener cierto maquiavélico atractivo para ser convincente. Y a Boyer sólo se lo encuentro cuando agoniza, con o sin luz.
Seguramente Ingrid Bergman sea más glamourosa y llamativa que la tal Diana Wynyard, pero esta en su sosería le queda mejor el traje de esposa pasiva. En cuanto al detective, aquí es un gordinflas typical english, así que no hay subtrama amorosa que valga. Y más breve, como bien recomienda Baltasar Gracián.
Además ésta es inglesa, qué diablos.
Los laberintos de la mente guardan bajo llave secretos, deseos, ilusiones y temores que durante los años 30 y 40 fueron campo abonado para un público cinéfilo y deseoso de dejarse seducir por implicaciones psicológicas de hondo calado.
T. Dickinson juega la baza de la intriga y maneja con habilidad la oscuridad, el silencio, la sospecha, el contraste, la inseguridad y la desesperación.
Hace filigranas con lo imposible, convierte al azar en su aliado y fragmenta la acción en dos espacios casi separados que apenas se interfieren a pesar de tener un objeto común.
La inducción a la locura y la investigación representan los dos polos argumentales de una historia tensa, larvada y destructiva.
La verdad es que tanto ésta como el remake americano Luz que agoniza me encantan. La historia está muy bien, es muy intrigante y te mantiene pegado al sillón de principio a fin. La ambientación también es fabulosa llegando a recrear la angustia que sufre la protagonista, que hace un excelente papel, con diferencia el mejor de todos. Las interpretaciones en general son mejores las del remake, pero aquí los actores también están muy bien. Otra cosa que me gustó más del remake es que profundiza más en la psicología de los personajes (sobre todo en el de la protagonista, en ésta ella se ve más pasiva en comparación con la grandiosa interpretación de Ingrid Bergman -que es claramente superior-). No obstante es una JOYA grandiosa del cine británico, bastante olvidada y eclipsada por su posterior remake de 1944, ya he dicho grandioso también. Realmente merece la pena verlas ambas porque son grandes películas, pero sobre todo ésta se merece más consideración de la que tiene y rescatarla de ese olvido tan injusto en el que ha caído porque de verdad es una discreta pero gran OBRA MAESTRA.
La historia con una ambientación bien planteada y unos personajes no muy bien presentados no consigue enganchar del todo, en cambio hay algunas situaciones y secuencias que reflejan lo que está ocurriendo de una manera subyugante entre la crueldad del protagonista y la debilidad de la mujer en su personalidad.
Dr. Hackenbush.
Es muy cierto cómo son varias las perspectivas desde las que se pueden ver una película y los elementos que influyen en su visionado, como si es la primera vez que se ve el filme, la predisposición con la que se hace y si se han visto versiones o remakes de la misma historia. En este caso en concreto a mí me han influido especialmente los dos últimos criterios, ya que aunque me he decidido a verla con muy buen ánimo y gustándome el cine clásico y británico, no he podido evitar compararla con la versión americana de 1944, dirigida por George Cukor y protagonizada por Ingrid Bergman y Charles Boyer.
Las bases de la trama son idénticas, la obra teatral del dramaturgo inglés Patrick Hamilton, la pareja en la que el marido trata de desestabilizar hasta la locura el estado mental de su esposa con oscuros propósitos, sin embargo hay ciertos cambios en ella, ya que la relación con la víctima no es la misma y el desarrollo tiene ligeras modificaciones respecto a la posterior película, como el proceder del marido que resulta mucho más claro desde un principio, la relación con la criada o la intervención policial. Sin embargo, lo que a mi parecer resulta más obvio es cómo se trata este problema desde el inicio y no hay una evolución previa ni el toque romántico presentes en la versión americana.
En lo referente a la ambientación está tan conseguida como en su análoga y el trabajo de los es correcto y adecuado a sus respectivos papeles, pese a lo que prefiero el del actor francés y el de Bergman, que consiguió una interpretación más matizada y profunda que la presente y por la que fue merecidamente galardonada con un Óscar.
Como conclusión me gustó mucho más el filme de Cukor, capaz de crear mayor intriga y suspense, pero esto no quita que haya disfrutado viendo esta interesante película que puede considerarse un buen clásico.