Los últimos años del artista: Afterimage
Sinopsis de la película
Afterimage sigue a uno de los artistas de vanguardia polacos más importantes: Wladyslaw Strzeminski. El título de la película hace referencia a las imágenes remanentes, a las ilusiones ópticas que continúan apareciendo bajo los párpados tras haber mirado un objeto que refleja la luz.
Detalles de la película
- Titulo Original: Powidoki (Afterimage) aka
- Año: 2016
- Duración: 98
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Opinión de la crítica
Película
6.4
53 valoraciones en total
La película, Los Últimos Años del Artista: Afterimage, se presentó el año pasado en la sección oficial del Festival de cine de Toronto. Al mes siguiente, en octubre, su realizador Andrzej Wajda moriría a la edad de 90 años, poniéndose fin a la carrera artística de uno de los directores más relevantes de la historia del cine polaco. En el año 2000, consiguió el reconocimiento de la Academia de Hollywood al recibir el Oscar Honorífico por su importante contribución al mundo del séptimo arte. En el mes de abril pasado, tuvimos la oportunidad de ver este film en la I edición del Festival Internacional de Cine de Barcelona – Sant Jordi. Se trata de un biopic sobre el famoso pintor vanguardista polaco, Wladislaw Strzeminski. Estreno 30 de junio.
No se a ciencia cierta si Andrzej Wajda fue consciente de que estaba al final de su vida cuando realizó este film, pero sin lugar a dudas Los Últimos Años del Artista: Afterimage es un precioso homenaje a dos ilustres figuras del ámbito de la cultura y el arte en Polonia, en el ocaso de sus vidas, cuyas obras, tanto en el cine como en la pintura, han tenido un amplio reconocimiento mundial. Andrzej Wajda tiene muchas cosas en común con Strzeminski, primeramente, en su fascinación por el arte y en especial por la pintura, lo que le llevó tras la guerra, a estudiar pintura en la Academia de Bellas Artes de Cracovia, antes de ingresar en la Escuela de Cine de Łódź.
Y en segundo lugar, por sus desavenencias y enfrentamientos con el poder establecido, cuya política estaba encaminada a limitar la expresión artística y a imposibilitar otras alternativas de pensamiento. Hay que recordar que debido a su admiración y simpatía por Lech Wałęsa, así como por el movimiento polaco del sindicato solidaridad, realizó El hombre de Mármol (1976) y El Hombre de Hierro (1981) con el propio sindicalista haciendo de si mismo. Esto propició que el gobierno polaco ilegalizara su productora de cine.
Los Últimos Años del Artista: Afterimage describe los cuatro años finales de la vida de Wladyslaw Strzeminski, desde 1949 hasta 1952, cuando la sovietización de Polonia fue más enérgica y el realismo socialista puso fin al multipartidismo y a las libertades civiles para imponerse como forma obligatoria de expresión artística. Los Últimos Años del Artista: Afterimage narra los enfrentamientos entre Władysław Strzemiński y el nuevo orden político establecido en Polonia que censuraba cualquier corriente que se alejara de sus dogmas basados en propagar la conciencia de clase y el conocimiento de los problemas sociales.
Andrzej Wajda investiga la vida y el arte de un pintor vanguardista y maestro excepcional, que fundó en 1934, el segundo Museo de Arte Moderno del mundo. Se convirtió en una figura admirada y adorada por sus alumnos y por la gente en general, respetado por intelectuales tanto dentro como fuera del país y, además, para muchos jóvenes como Wajda (en los últimos años de la vida de Strzeminski, el cineasta era un joven veinteañero) en un luchador por la libertad artística. El pintor se convirtió en una seria amenaza para las autoridades polacas de la época que intentaron por todos los medios doblegarlo y convencerlo para que cambiara de postura, sin embargo, el débil pero tenaz artista se negó a renunciar a sus ideas y principios, y no se sometió al gobierno polaco del periodo estalinista.
La película describe a una persona con una actitud terca y egoísta, que concibe el arte como una formación unida a la vida, que funciona dentro de ella, por eso su vida es por y para el arte, sin haber cabida para mucho más. De hecho renuncia a otras alternativas ofrecidas tanto por su hija (Bronislawa Zamachowska) como por una estudiante (Zofia Wichlacz) enamorada del artista. Además, Strzeminski, tenía mucho prestigio fuera de Polonia y amigos huidos del Este que podían haberle echado una mano, como Malevich, Kandinsky o Chagall, sin embargo prefiere afrontar la vida en solitario e incomprensiblemente sin pedir ayuda. Este aspecto no se entiende muy bien en la película y no explica con claridad el porqué de esa actitud.
Cuando Strzeminski se niega a seguir la línea del partido su vida se convierte en una auténtica pesadilla, pierde su posición de profesor, no le conceden la cartilla de racionamiento, al borde de la inanición, la desesperada situación en la que se halla le obligó a ganarse la vida como un humilde pintor de carteles y a montar escaparates. Andrzej Wajda describe las secuelas y el deterioro experimentado por su país tras la Segunda Guerra Mundial, además de mostrar como un pequeño pero poderoso grupo es capaz de imponer sus ideas al resto y coartar las libertades individuales de las personas.
El título de la película, Afterimage, se refiere a la Teoría de la Visión desarrollada por Władysław Strzemiński, según la cual una imagen se queda grabada en la retina, el ojo retiene una imagen posterior después de ser contemplada por el pintor, pero esta nunca será una duplicación exacta de la realidad como pretendía inculcar el Realismo Social, sino que estará influida por la personalidad y las emociones del artista. En el film, la muerte de su esposa, activará en la retina de Strzemiński los bellos ojos azules de su difunta mujer y por ello, vemos al artista teñir un ramo de flores blancas de azul y llevarlo a su tumba como una forma de expresar su recuerdo.
Esplendida interpretación de Boguslaw Linda en el complicado papel del artista Strzemiński que aprendió a pintar únicamente después de que le fuera amputada una pierna y un brazo tras la Primera Guerra Mundial, pero sobretodo, hay que destacar a la actriz de catorce años Bronislawa Zamachowska, como la hija del pintor, con una soberbia actuación ofreciendo los momentos más emocionantes de la película.
Cinemagavia: http://cinemagavia.es/pelicula-critica-afterimage/
El director Andrzej Wajda realiza su último trabajo antes de morir retratando los últimos días de la vida del pintor vanguardista Wladyslaw Strzeminski, uno de los artistas polacos más importantes y autor de las teorías del unismo y la visión.
Un artista que pese a las dificultades físicas, por heridas durante la Primera Guerra Mundial sufrió la pérdida de un brazo y una pierna, y pese a las dificultades sociales, al no ser proclive al discurso de un gobierno dictatorial a las órdenes de Stalin y mantener su independencia, como debería hacer cualquier artista, ya que los artistas están para observar lo que les rodea y procurar ver más allá, mostrando una verdad desde una perspectiva distinta de formas en que sólo ellos pueden hacer.
Sus diferencias con el sistema le impusieron un severo castigo, dejándole fuera del mismo. Sin poder trabajar en Lodz, en la Real academia de bellas artes, de la que fue fundador y que en la actualidad lleva su nombre, sin poder enseñar arte, y posteriormente sin poder conseguir ningún tipo de trabajo y retirando sus obras para que fuera olvidado.
Pero el siguió, continuó levantándose y pintando, manteniendo sus convicciones y su dignidad de la mejor forma que podría cualquiera en esa situación, que se deterioraba rápidamente hasta llegar al punto de no poder conseguir pinturas ni comida.
Austero, eficaz y un poco monótono drama polaco que se hunde en el barro del arte enfrentado a nuevas estructuras y necesidades de un régimen político como el estalinista. Muy potente y acertada interpretación de Boguslaw Linda.
El legendario director Andrzej Wajda (El hombre de Mármol y El Hombre de Hierro de 1976 y 1981), ya con 90 años, se lanza a navegar en las turbulentas aguas de las contradicciones y enfrentamientos entre el arte y la política, y lo sale completamente airoso sobre la base de un guión bastante esquemático y lineal escrito por Andrzej Mularczyk.
Desde la época del comunismo estalinista, Wadja se propuso contar la historia del vanguardista artista polaco Wladyslaw Strzeminski, primero había pensado en hacerlo desde la óptica de la tortuosa relación con su esposa, pero finalmente decidió encararlo desde la faceta política para detonar las contradicciones con el comunismo deformado en los finales de los años 40 y principios de los 50, sin por eso dejar abierta una puerta a las dudas y los conflictos.
La propuesta de Andrzej Wajda no tiene los brillos y la solvencia de antaño -ya algo parecido había sucedido con Walesa (2013)- pero a pesar de sus dispersiones o las monotonías narrativas, la profundidad temática y la muy factura de ambientaciones e interpretaciones, le dan un vuelo especial al conjunto del film.
Wadja no le esquiva al debate con los dogmas y la propaganda en el terreno de la creación y evolución artística, por lo que allí radican muchos de sus méritos, algunos de los cuales se permiten cuestionar las propias críticas, aunque claramente se posiciona en contra de las limitaciones del estalinismo.
El propio Wadja es un admirador de Strzeminski y padeció al régimen por su simpatía con el sindicato Solidaridad, lo que significó el cierre de su productora cinematográfica, lo que le agrega un plus al film.
Calificación Fanaseriecine: 7 ½ sobre 10
Ya se ve, por la escasez de críticas, que es para minorías. Pero es de lo mejor de los últimos años, por la ambientación, el tema que plantea, la interpretación.
Rodada con sobriedad, sin exageraciones, conteniendo siempre el drama. Además contribuye a que sea conocido fuera de Polonia el gran artista que fue Strziminski.
La relación entre el artista perseguido y el grupo de jóvenes es entrañable. Nos deja en suspenso sobre el destino de la más asidua, una mujer más guapa que casi todas las famosas.
Andrzej Wajda director de casi 90 años edad y con casi 40 largometrajes a sus espaldas nos sigue demostrando que aún puede realizar películas interesantes. Entre sus obras más destacadas podemos incluir Korczak y Katyn por esta película estuvo nominado a los Oscar en la categoría de Mejor Película de habla no inglesa.
La historia se desarrolla en 1948 cuando Stalin toma Polonia y su doctrina totalitaria se impone en todos los ámbitos de la sociedad. A partir de ese momento el pintor Wladyslaw Strzeminsk ve como sus ideales políticos son rechazados por la nueva situación, esta situación política se opone a toda su creación como artista. Es expulsado de la universidad y toda su obra es destruida.
A partir de ese momento el pintor con un estado de salud bastante malo y con la ayuda de sus estudiantes empiezan una lucha contra el partido. Podemos observar durante todo el metraje la decadencia del pintor tanto como persona y como artista.
Afterimage es un retrato sensible de la época, el director nos quiere mostrar a través de la imagen, la dirección, la fotografía y la puesta en escena como la llegada de este régimen provoca un mundo gris y oscurecido. El realizador nos quiere mostrar una representación realista y honesta pero en muchos tramos cae en la monotonía, repitiendo muchas escenas y con acontecimiento ya contados anteriormente.
La cinta es todo un homenaje que el director ha querido hacer a unos de los más grandes artistas de su país.
El elenco de actores podemos decir que están bastante bien, con una gran actuación de Boguslaw Linda, secundado por un gran número de actores secundarios que realizan de forma correcta su trabajo.
Lo mejor: La puesta en escena y la ambientación
Lo peor: En muchos tramos cae en la monotonía