Las cuatro verdades
Sinopsis de la película
La película consta de cuatro historias basadas en cuatro fábulas de Lafontaine: una mujer intenta recuperar a su marido, un pobre infeliz intenta suicidarse, un hombre celoso llega a pactar con su rival, y una pareja se queda encerrada en un apartamento.
Detalles de la película
- Titulo Original: Les Quatre Vérités (Le quattro verità)
- Año: 1962
- Duración: 110
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Opinión de la crítica
Película
5.9
41 valoraciones en total
Entretenida película de cuatro episodios independientes entre sí inspirados en las moralejas de algunas de las conocidas fábulas de J. de La Fontaine.
Por encontrar nexos comunes, digamos que las cuatro piezas están desarrolladas con ingenio, cada una acorde con la idiosincrasia de sus respectivos guionistas y directores, pero en todas ellas se constata creatividad y dominio del oficio.
En todas aflora la vertiente psicológica, la crítica social pero sobre todo demuestran buena factura cinematográfica, un excelente dinamismo narrativo y un cáustico sentido el humor.
También la interpretación de los protagonistas -variado elenco- resulta convincente así como la ambientación.
Las cuatro verdades de Luis García Berlanga, Alessandro Blasetti, Hervé Bromberger y René Clair, es un drama basado en 4 episodios. El primero de ellos el de un hombre celoso de su mujer, el segundo, el de una mujer que intenta recuperar a su infiel marido, el tercero, el de un hombre infeliz que toca el organillo e intenta suicidarse, y el cuarto y último, el de una pareja que se queda encerrada en el apartamento de ella. Dirigidos con un ritmo dinámico y vivaz, y cada historia a la personal manera de su director, tan solo el episodio del hombre que toca el organillo que es de Berlanga, y el de la pareja encerrada en su apartamento, merecen la pena ser vistos.
La fotografía en blanco y negro, está llena de detalles alusivos a cada historia, con imágenes bellas y estéticamente decorativas, muy apropiadas y atractivas. La música, es simpática y agraciada, con sonidos encantadores y melódicos que dan el punto agradable y sugerente a cada una de las historias. Y los movimientos de cámara y planos, usa con efectividad el reconocimiento, seguimiento, avanti, retroceso, generales y acercamiento en unas aceptables y buenas labores técnicas.
Las actuaciones, son acertadas y cumplidoras. Contando con las interpretaciones de caras conocidas como Manuel Alexandre, Agustín González, Lola Gaos, Ángel Álvarez, Anna Karina, Charles Aznavour y Leslie Caron entre muchos otros. Empleando para estos, unos vestuarios y caracterizaciones que son elegantes y distinguidos en alguna historia, siendo estos estilosos, y marcando la alta clase social a la que pertenecen los protagonistas, y otros humildes y carentes, en una oportuna dirección artística.
El guion, escrito por Rafael Azcona, Alessandro Blasetti, Hervé Bromberger, René Clair, Frédéric Grendel, y dividido en 4 historias que son fábulas de Lafontaine, son entretenidos y amenos pero sin ser todos al mismo nivel. En una disimulada labor cinematográfica, en la cual se limitan a narrar las historias de las fábulas pero sin impregnarle algo de pasión o interés, para llamar la atención del espectador. Utilizando una narrativa con voz en off afable y explicativa en el primer capítulo, y el resto es natural y académico, con tono sencillo y acogedor.
En conclusión, la considero una cinta entretenida a ratos, con 4 capítulos de los cuales tan solo dos son competentes y aceptables para el público. Recomendable por las historias de Berlanga, que es el hombre que toca el organillo e intenta suicidarse, y por la historia de la pareja atrapada en un apartamento, ya que las otras dos, son meramente historias narradas sin mucho afán en crear interés. Por lo que en líneas generales, considero Las cuatro verdades, una película prescindible por no ser lo suficientemente interesante de ver.
Film de episodios inspirado en las fábulas de La Fontaine: El cuervo y el zorro , La liebre y la tortuga , La muerte y el leñador y Los dos palomos , dónde el animalismo de aquellas se transforma en personajes de carne y hueso, en un notable film de espíritu crítico/picaresco, humor muy latino y dónde en cada capítulo se aprecia cada una de las acusadas personalidades de sus cuatro realizadores, siendo los dos últimos los mejores: en La muerte y el leñador , Berlanga ensancha su plácido estado de gracia en una obra contundente en su munor dentro de una situación muy dramática y apegada al neorrealismo de su inmaculado Plácido , Broberger hace con Las dos palomas un divertido y fluido juego dual de deseo acartonado, sugerido y pensado en el surrealista encierro que sufren dos desconocidos: una modelo y un mecánico. Una película de lo más curiosa y recomendable.
204/04(02/06/21) Muy divertido film ‘ómnibus’ (historias breves o episodios, habitualmente unidos por un tema común o mediante una narración enmarcada). Cuatro historias-cortos de diferentes nacionalidades (dos franceses, uno italiano y otro español), con diferentes directores (todos reputados: Luis García Berlanga, Alessandro Blasetti, Hervé Bromberger y René Clair), y diferentes protagonistas (estrellas la mayoría: Leslie Caron, Anna Karina, Monica Vitti, Manuel Alexandre, Agustín González, Lola Gaos, Anna Karina, o Charles Aznavour). El nexo de unión son las 4 conocidas fábulas escritas por Lafontaine, pasando aquí los animales a humanos, teniendo diferentes tonos cada segmento, los tres no hispanos comedias románticas cercanas a lo caricaturesco, muy espíritu naif, y el tercero de Berlanga con claro sentido de crítica social propia del neorrealismo italiano.
El primero El cuervo y el zorro de Hervé Bromberger con guión propio junto a Frédéric Grendel (Las Diabólicas), en un aire bufo picaresco ingenioso desde la voz en off que narra la ‘fábula’ en tono chistoso, con un marido ultra celoso que guarda a su bella esposa en una jaula de oro que un ‘zorro’ intentará asaltar con astucia y artes de adulación, intentando aprovecharse de la arrogancia del celoso guardián, Tiene unos bufonescos Michel Serrault como El Cuervo, otorgándole una gran vis cómica en su engreimiento, Jean Poiret como Rernard, este alter ego de zorro, excelente en sus lisonjas a Corbeau, y está una hermosísima Anna Karina, mujer florero que se expresa por gestos. Muy bien llevado el maquiavélico plan del ‘zorro’, aunque en el rush final se le va de las manos a algo extraño cercano al homoerotismo.
El segundo La liebre y la tortuga dirigido por Alessandro Blasetti con guión propio y de Suso Cecchi DAmico (Ladrón de bicicletas), resulta una comedia romántica en modo vodevil, con una esposa intentando con sus armas recuperar a su infiel marido. Estas se apoyan en su flema para pasar unos días de veraneo con su esposo y la amante. La tara es que nadie se puede creer que el idiota del rol encarnado por Rossano Brazzi sea capaz de abandonar a la colosal belleza de Monica Vitti, aunque sea también guapa el personaje que da vida Sylva Koscina, es que no hay color con el encanto y sensualidad arrolladora de la rubia, es quizás en este sentido el más flojo, aunque por ver a la magnética Vitti. Teniendo una ambientación muy kitsch en su lujo hedonista de estar en un hotel de playa de lujo, donde las mujeres visten a la última, pasean en lanchas, y cena en restaurantes de lujo.
El diferente es el tercero, La muerte y el leñador dirigido por Luis García Berlanga con guión propio y de Rafael Azcona, un bloque en que no hay romance alguno, es en un aire muy a lo Plácido por el retrato de una sociedad cainita, con un protagonista en caída libre, que cada paso que da se hunde más y más en la miseria, en una espiral agobiante, con más de drama que de humor. De hecho este es el único que tiene afán de crítica social, siendo claramente deudor del neorrealismo italiano. Ello con una ambientación realista, llevándonos por la Gran Via, ferias, el rastrillo, mataderos, o una deprimente carreta desierta. El mejor de los cortos, El protagonista es el alemán Hardy Krüger que borda su patético rol de organillero, sensacional su actuación, como lo vemos desintegrarse entre la maraña burocrática, encabezada por un siempre brillante Agustín González, cayendo en el mundillo del crimen con un épico Manuel Alexandre como ladrón de guante blanco, hasta desembocar en la ruptura total. También aparecen otros clásicos de nuestro cine como Xan das Bolas, José Luis Coll o Lola Gaos.
El cuarto y último Los dos pichones René Clair, con guión propio, nos adentra en una especie de buñueliana El ángel exterminador, donde una pareja de desconocidos por azar quedarán encerrados en un apartamento, y mediante ello se producirá un jocosa batalla de sexos, donde cada uno contará lo sucedido a sus amigos desde su punto de vista, Teniendo de protagonistas una grácil Leslie Caron y un buen Charles Aznavour, interactuando en off en muchos momentos, anticipando lo que va a suceder, con claro sentido de screw-ball, dejándote un buen sabor de boca en su mordacidad. Habiendo una ambientación muy teatral en el modo que el corazón de la historia son dos únicos personajes.
En conjunto, sumados unos y otros me da una buena propuesta en su aire desenfadado, que solo busca entretenerte un rato, y lo consigue, incluso Berlanga en su tristón relato. Fuerza y honor!!!