La noche de los muertos vivientes
Sinopsis de la película
Siete desconocidos quedan atrapados en una granja solitaria mientras unos zombis caníbales, que recobran vida por la influencia de una onda espacial radiactiva, emprenden un ataque despiadado y atacan a todo aquel que encuentran a su paso… Remake del clásico de terror de mismo nombre dirigido en 1968 por George A. Romero -aquí en labores de guionista-.
Detalles de la película
- Titulo Original: Night of the Living Dead
- Año: 1990
- Duración: 88
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Opinión de la crítica
Película
6.2
63 valoraciones en total
Busqué ambas para comprobar y francamente la mejor es la del 68. Esta version ofrece dos factores que la hacen destacar respecto a la primera: color y cambio de guión. Aunque el color le haya quitado realismo a los zombies, les añadió un aspecto mas, sino terrorífico, si muy repulsivo (tomo como ejemplo al primer zombie) que nos hace admirar el trabajo de maquillaje, cabe destacar que la abundancia de sangre en cada muerto es la más vista en las previas secuelas de Romero. Resaltante también las ligeras variaciones en el guión que hacen la película menos previsible. Puntos negativos: no consiguió causar la sensación de encierro y suspenso que la primera, el ataque del zombie del cementerio no impactó tanto como esperaba. Nada se compará con la agresividad mostrada por el primer zombie de la versión del 68…me quito el sombrero ante ese actor, donde quiera que esté.
Aunque sea difícil calificar un remake, he de decir que hay ocasiones, en las que la copia supera el original. La noche de los muertos vivientes era una película que se tornó clásico por romper con los tópicos del miedo, hasta entonces basados en vampiros y hombres lobo. Pero fue con el filme de Romero con el que el miedo venia de nosotros mismos. Éramos nosotros la amenaza. Con el paso del tiempo hay quien ha querido ver aquella peliculita en blanco y negro, como una critica a la sociedad destructiva por naturaleza en la que vivimos. Es mas, la idea original nació de Tom Savini después de haber estado en Vietnam.
A principios de los 90, el propio Savini decidió hacer una revisión de la obra y consiguió lo que pocos han conseguido en este mundo del cine de terror, lleno de sagas, secuelas y en ocasiones, horrores varios. La película esta muy bien dirigida y tiene momentos en los que acojona bastante. Las interpretaciones son solventes y es el lento caminar de los zombies lo que aumenta la tensión argumental.
En definitiva, si eres amante del buen cine fantástico, rodéate de colegas una tarde y os la veis entre birras y patatas fritas que pasareis un buen rato. Garantizado.
En 1990 el prestigioso maquillador de efectos especiales, Tom Savini, debuta en la dirección con este remake de La Noche de los Muertos Vivientes , el gran clásico de George A. Romero.
El propio Romero firma el guión de esta película e introduce ciertas modificaciones, siendo quizá la más significativa la relativa al personaje de Bárbara, que ya no es aquel ejemplo de indefensión y pasividad de antaño, ahora la nueva Bárbara lucha como un jabato convirtiéndose así en el auténtico azote de los muertos . Otra importante modificación que cabe señalar es el final, que ahora se me antoja bastante más light y comercial que el de la obra original, mucho más potente y dramático.
Personalmente, y salvando las distancias con la obra original, creo que esta versión de Savini puede considerarse como una buena película de este sub-género: esta nueva versión ofrece, como lógicamente era de esperar, unos zombies estéticamente mucho más elaborados junto a una más que correcta fotografía en color.
Entre los peros de esta película, decir que, por ejemplo, el famoso ataque inicial en el cementerio ha ganado velocidad pero ha perdido mucha tensión… esa brusca aparición del primer zombie ha sido, al menos para mí, un tanto decepcionante, también cabría señalar una cierta sobreactuación por parte de los actores Tony Todd y Tom Towles, siendo quizá Patricia Tallman (Bárbara) la que ofrece una mejor interpretación.
Aun así, creo que la película es muy disfrutable. Aunque no supere a la versión del 68, esta película es un buen ejemplo de que no todos los remakes destrozan necesariamente el original. Hay excepciones, desde luego que las hay.
Si existe algún ejemplo de Remakes que no destrocen al original, sino que mantenga el tipo e incluso aporte algo más, sin dudarlo, este es uno de ellos. Si bien, con respecto a la original de 1968, esta producción de 1990, pierde en cuanto a atmósfera y ambientación, gana en cuanto a escenas impactantes, calidad de efectos especiales y maquillaje, así como en la intensidad de la acción. También se permite ciertos lujos en cuanto al argumento, que si bien respeta la estructura general del mismo, aporta algunas modificaciones, y modifica sustancialmente el crudo y desesperanzador final de la versión antigua, regalándonos uno un tanto más light y comercial.
Este remake mantiene la fibra y tensión de la versión original y agrega el color que aquella no poseía. Sustentada por ese guión sumamente dinámico e inquietante, con situaciones impactantes por el grado de violencia y angustia que surge de esa batalla trabada entre los humanos y los zombies que devoran cualquier ser de sangre caliente.
Escenas truculentas por canibalismo, indefensión y angustia en el medio de la nada, una casa convertida en fortín y en la única defensa en contra de lo macabro y mortuorio.
Como positivo, además es obligación destacar el aporte de Tony Todd, quien sostiene con su interpretación el dramatismo de la cinta.
Mucha intensidad lograda con pocos recursos, gran ambientación conseguida con escenarios sencillos pero sugestivos para aclimatar una cinta de horror.
Lo demás, una versión comercial más de este sub-género de horror que tantos adeptos posee.
Un remake que nos ofrece mucha garra y fuerza desde la bizarría y la histeria de sus variantes. A mi criterio está a la altura de las circunstancias y sin dudas que vale la pena pasar un rato entretenido con esta cinta sencilla pero contundente, sin muchas más pretensiones que estremecer y dar sobre el final una ácida crítica sobre el comportamiento instintivo e irracional del ser humano, lo cual nos deja reflexionando aunque nos cueste creerlo.