La mujer bandido
Sinopsis de la película
La bella y ambiciosa Barbara Worth, una aventurera del siglo XVII, comienza su carrera de bandido robándole el novio a Caroline, su mejor amiga. Pero pronto descubre que la existencia junto a él, de nombre, Ralph Skelton, es demasiado aburrida y decide comenzar una nueva y emocionante vida ocultándose tras una máscara y lanzándose a los caminos para asaltar a los viajeros.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Wicked Lady
- Año: 1945
- Duración: 104
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Opinión de la crítica
Película
6
84 valoraciones en total
Esta estupenda película británica titulada La mujer bandido tiene suficientes atractivos para haber sido una película más que reconocida, sin embargo no tuvo suerte en su día y en la actualidad mucho menos.
El argumento basado en una novela de Magdalen King-Hall sobre una mujer malvada que se convierte en una fuera de la ley casi por despecho es muy atractivo, además las infidelidades, la maldad humana, los celos y sobre todo el desear los bienes ajenos, es decir la envidia, están presentados excelentemente esta cinta.
Su director británico Leslie Arliss realizó su mejor trabajo de una filmografía bastante escasa, aunque tuvo sobre todo un gran mérito para el cine al descubrir a uno de los mejores actores de todos los tiempos, James Mason, con el que trabajó dos años antes en otra película y repitió en esta en sus primeros papeles en el cine de importancia.
La protagonista Margaret Lockwood está muy bien en el papel de perversa protagonista y realiza también uno de sus mejores papeles, lo cual no está mal para haber trabajado ya por entonces con directores como Alfred Hitchcock o Carol Reed. Los actores secundarios también magníficos, aunque lo más interesante es que pareciendo una película de aventuras, va transformándose en un drama antológico y en algunos momentos con escenas de intriga e incluso terror gótico.
En definitiva película recomendable para rescatar que pese alguna cursilería propia de la época merece la pena sin lugar a dudas.
Nota: 6,4.
Película de 1945 que engrosa el cine clásico en toda su plenitud, dirigida por Leslie Arliss y protagonizada por Margaret Lockwood en el papel de Barbara Worth . La cinta está ambientada en Inglaterra en el siglo XVII en la que Caroline (Patricia Roc) es la que está encargada de dirigir el hogar de Ralph Skelton, pero éste se interesa por Barbara Worth. Convertida en la esposa de Ralph, por su posición económica no se conformará con esta vida e intentará evadir las obligaciones de su aburrido matrimonio. Comenzará una etapa como bandido, asaltando a los viajeros. James Mason es el amante al uso de la protagonista, por el que ella lo dará todo y también por el que se mueve la trama en su mayor parte. Esta película está basada en la novela The life and Death of The Wicked Lady Skelton , escrita por Magdalen King-Hall. La película está correcta y el reparto es destacable, con un Mason que rezuma juventud. El tema de feminismo radical aparece como motivo de una protagonista que se mueve en una sociedad patriarcal, que aunque actúa por el egoísmo intenta hacerse un hueco por sus logros y por su actitud sin importar el sexo, increíble este rasgo de Lockwood en una película que reposa sobre sus hombros a lo largo de toda la trama. Buena.
La mujer bandido es un melodrama histórico, ambientado a fines del siglo XVII, y con toques de intriga y aventura. Me interesaba verla por su punto de partida, muy interesante – una mujer que se convierte en bandolera, y asalta diligencias, adoptando una doble vida en la que, por un lado, es una ladrona y asesina, y por el otro, es una respetable dama de buena posición social-, por el asunto del personaje con doble vida, que me resulta atractivo, y por su reparto, que incluye a James Mason y a Michael Rennie en papeles secundarios.
Aquí destaca, por supuesto, la dirección artística, la ambientación histórica, y el diseño del vestuario. Los eróticos y sugerentes escotes que luce Margaret Lockwood, la protagonista, a lo largo de casi todo el metraje, son, a mi juicio, impresionantes y sorprendentes, y no sé cómo los pudo pasar por alto la censura británica de 1945. Evidentemente, ésa era una manera de presentar a la protagonista como mala o malvada , tal como reza el título original del film, cuyo desenlace final vehicula un moralismo que, pese a todo, deja lugar a cierta ambigüedad, pues, en efecto, el mal es atractivo, y la mala es atractiva.
El papel de Margaret Lockwood en esta película británica me recuerda al de Hedy Lamarr en otra película coetánea, estadounidense, La extraña mujer (The Strange Woman,1946), de Edgar G. Ulmer.
Por lo demás, es una obra entretenida, pero cuenta con algún giro de guión que resta solidez a la historia.