La desconocida
Sinopsis de la película
Irena, una inmigrante ucraniana asentada en Italia hace muchos años, combina la vida cotidiana con los fantasmas del pasado, lo que da lugar a un inquietante rompecabezas. Tras sobrevivir a un viaje dramático, Irena fue víctima de hombres brutales y sin escrúpulos. Las humillaciones y malos tratos sufridos vuelven constantemente a su memoria y no le permiten vivir en paz. Sólo permanece en su memoria un recuerdo hermoso: el de un melancólico y desgarrador amor perdido.
Detalles de la película
- Titulo Original: La sconosciuta (The Unknown Woman)
- Año: 2006
- Duración: 118
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Opinión de la crítica
Película
7
81 valoraciones en total
La película trata la historia de Irena, inmigrante ucraniana que llega a algún lugar del norte de Italia huyendo de su reciente y oscuro pasado en busca de una segunda oportunidad en la vida. El director va descubriendo la historia de la protagonista en dos hilos narrativos diferenciados. Por un lado, su misterioso pasado, servido mediante justos y justificados flashbacks que permiten comprender la trama pero sin excesos en su uso, por otro, los verdaderos motivos de la estancia de Irena en la ciudad. Ambos no serán desvelados, garantizando el suspense y la atención del espectador. Así, lo que comienza con atisbos de drama se convierte en un thriller psicológico que va ganando nuestra curiosidad con el paso de los minutos. Porque en esta cinta nada es lo que parece y el director juega hábilmente con el espectador en secuencias que van adquiriendo sentido a medida que la película avanza a través de un guión magníficamente orquestado para llevarnos poco a poco a su terreno. Nada en ella sobra, todas las escenas contienen esa información trascendente ofrecida en pequeñas y magníficas dosis que obligan a no perderse ni un segundo. La carga dramática, medida a la perfección y muy contenida, mantiene la tensión y consigue atmósferas repletas de intriga, al tiempo que nos muestra escenas crudas y frías de violencia sexual explicita para denunciar el infierno que actualmente viven miles de mujeres como Irena, sumidas en la esclavitud sexual.
La desconocida es un film sólido que se sustenta en un guión lúcido y magníficamente elaborado, desplegado con una fuerza poco usual que logra crear una atmósfera digna del mejor thriller europeo. Cuenta con muy buenas actuaciones, entre las que destacan, además de la protagonista (Ksenia Rappoport), la actuación de la niña (Clara Dossena), o la de Michele Plácido, que consigue poner los pelos de punta, e incluso Angela Molina en un papel secundario. La factura se completa con la excelente banda sonora a cargo del maestro Ennio Morricone, banda sonora a la altura de otras compuestas por él como Cinema Paradiso o La leyenda del pianista en el Océano, aunque para este caso ha sabido imprimirle ese necesario toque más oscuro. La cinta se estrenó ayer viernes 26 de septiembre en España, a pesar de que fue rodada hace un par de años y acumula varios premios europeos. Confieso que la vi con cierto escepticismo, porque los últimos trabajos de Tornatore no estaban, en mi opinión, a la altura de lo que esperaba (es inevitable comparar después de una obra maestra como Cinema Paradiso), pero he de decir que, aún siendo una trama difícil de seguir y que requiere mucha atención, no sólo no me decepcionó en ningún momento sino que no puedo más que recomendarla porque se trata de una película excelente. (Puerta de Babel)
Tanto desde el punto de vista dramático como desde el de thriller de intriga, La desconocida evoluciona igual que si se tratase de la sinfonía del autor de la banda sonora (Ennio Morricone): in crescendo.
Se nos presenta a una mujer ucraniana -interpretada con destacado derroche de tensión dramática por la actriz rusa Kseniya Rappoport- como un puzzle diabólico. Si bien nos desconcierta desde el comienzo su forma de comportarse, pieza a pieza, con ayuda de algunas escenas retrospectivas acompañando a la acción presente, iremos descubriendo todo lo que esconde el sorprendente personaje de Irena… Como bien le dirá la niña Tea irónicamente en uno de sus diálogos: Uno no puede fiarse de ti, ¿eh? . Es mejor no creer tener las soluciones antes de tiempo debido a nuestra gran intuición , porque sólo al final veremos completado el rompecabezas.
El drama, que ya aparece desde la primera secuencia que describe el mundo sórdido del pasado de Irena, también crece paralelo a la intriga. Cuanto más sabemos, más dura se vuelve la realidad de la protagonista.
¡Levántate! Esa es la clave de toda la historia. Lo que resume las dos horas de metraje en las que no hubiera sobrado incluso añadir media hora. Pues si de algo peca esta obra es en parte de acelerarse en el montaje de algunas tomas, así como en hacer algún flashback vertiginoso, que hubieran encajado probablemente mejor dosificando tiempos y recreando algunas situaciones.
Si en general prácticamente todos los personajes, principales y secundarios, están escritos e interpretados con fuerza, son las escenas entre Kseniya y la pequeña actriz Clara Dossena las que muestran un potencial realmente extraordinario. Constituyen el engranaje que mueve la trama ideada por el propio Tornatore y que descubre rubricando con un final emotivo por qué para Irena es tan importante que Tea sepa caer y levantarse. Metáfora de algo que en realidad a todos alguna vez nos vendría bien, aunque no hayamos sufrido ni la décima parte que ella.
Una recomendable película del director de la conocidisíma Cinema Paradiso, que regresa con un thriller intenso y muy dramático sobre una joven ucraniana en Italia, Irena, que él mismo ha guionizado.
Con un pasado de humillaciones y violencia la protagonista intenta rehacer su vida en Italia, trabajando como empleada doméstica de una familia de joyeros.
La desconocida se adentra en las entrañas de Irena, interpretada magistralmente por la actriz rusa Kseniya Aleksandradrovna Rappoport y por el que ha sido nominada a premio a la mejor actriz europea de los European Films Awards y al premio Donatello.
Con música del genial Ennio Morricone , una fotografía muy ciudada y un excelente montaje, La desconocida consigue dejarnos sin aliento cada segundo.
Más que una película de denuncia, esta coproducción italo-francesa, es un ejemplo de un género que otros italianos como Dario Argento cultivó en los 60 y 70, y que sigue vivo. El thiller europeo de suspense, estéticamente impecable y conmovedor es una buena alternativa a los argumentos gastados de las producciones norteamericanas, muchas veces con exceso de víscera y poca sustancia argumental.
Su elaboración es impecable y logra mantener al espectador en vilo ofreciendo 118 minutos de duración ausentes de aburrimiento, con la dramática historia que iremos conociendo según se desarrolla el metraje, que habla de una misteriosa mujer llamada Irena, atormentada por recuerdos dolorosos que se presentan en la película en forma de flashbacks, tal y como pasa con la otra cara de lo que le viene a la mente, esta vez aliviándola y consiguiendo hacer aparecer una tímida sonrisa en su rostro.
Irena es una inmigrante ucraniana que lleva muchos años en Italia, y a pesar de guardar un gran fajo de billetes en su bolsillo busca trabajo como cualquier persona necesitada de aferrarse a cualquier empleo con tal de subsistir. Por mediación de un conserje que pretende sacar tajada del beneficio que consiga Irena de su nuevo empleo, logra ponerse a trabajar como limpiadora en una comunidad de vecinos bien posicionados e incluso entabla buena relación con la sirvienta de una de las casas. Y mientras, los recuerdos más crueles siguen haciendo presencia una y otra vez en la mente de una Irina que inspira amargura y pesar, estando ausente cualquier atisbo de felicidad en la misma.
Todo resulta extraño y extremadamente intrigante, lo que ha conseguido hacer, por lo menos a un servidor, mantenerse enganchado a la pantalla durante toda la duración de la cinta, ya no sólo para averiguar el desenlace de la trama si no también para descubrir por qué le vienen esos pensamientos, algunos crueles y otros dulces y esperanzadores, a Irena, que está muy bien interpretada por la actriz rusa Kseniya Rappoport y sobre la cual cae todo el peso del argumento de la película, dejando apenas unos minutos de protagonismo al resto del reparto, entre los que se agradece la presencia de dos grandes conocidos en el cine italiano, el actor Pierfrancesco Favino y Michele Placido, que también hace las veces de director (Romanzo Criminale, 2005 o Il grande sogno, 2009) y al que podemos ver haciendo un interesante papel en Camino sin retorno (2006) junto a Alessio Boni.
(Sigue en el SPOILER sin desvelar detalles del argumento por falta de espacio)
Con La desconocida, Tornatore despeja las dudas que pudieron aparecer con la autoría real de Una pura formalidad donde muchas malas lenguas hablaban de la mano de Roman Polanski (actor en esa película) en la dirección. A mí me queda claro que eso no fue más que un buen tributo a un director que maneja como pocos la psique humana.
Tornatore no es Polanski y aunque La desconocida permite que le prestes toda la atención, no consigue exprimir al espectador como creo que buscaba. Y me imagino que en mi caso se debió a la forma elegida por el director a la hora de contar esta trágica historia. Los flashbacks usados para mostrarnos como el pasado de Irena regresa para convertirse en presente me alejan de la trama principal, que si bien es la que aguanta toda la primera parte de la película, con el paso de los minutos me percato de un aquí no pasa nada que el guión sólo sabe solucionar con los flashbacks. Es decir, Tornatore genera un cambio en el interés de la historia producido por un guión torpe.
La banda sonora, recuerda mucho a las bandas sonoras de Bernard Herrmann con A. Hitchcock, pero Tornatore no consigue solapar las partituras de Ennio Morricone, un genio vivo, a las imágenes.
Me sigo quedando con el Tornatore de Malena o Cinema Paradiso, donde el director intenta buscar otro tipo de sentimientos que consigue con mucha mejor fortuna.