Karate Kid III: El desafío final
Sinopsis de la película
El joven karateka Daniel Larusso libra su batalla mas difícil cuando el malvado Kreese le arrastra a una complicada situación, al obligarle a defender su título de campeón del torneo del Valley. Su maestro, Miyagi, no está de acuerdo…
Detalles de la película
- Titulo Original: The Karate Kid: Part III
- Año: 1989
- Duración: 111
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Opinión de la crítica
Película
4.2
91 valoraciones en total
La primera era entrañable. La segunda pasable aunque ya algo redudante. Y esta tercera entrega resulta pedante y ciertamente insoportable el 90% del metraje.
La historieta de siempre se repite ahora ya hasta la saciedad y de forma cada vez más tonta y caricaturesca: matones que persiguen al joven Daniel hasta que éste les reta en el campeonato de Karate del pueblo (se ve que el cansino archienemigo dueño del dojo del pueblo no tuvo sufiente con las humillaciones que sufrió en la primera y la segunda parte). El problema es que esta vez tenemos más ganas de que pierdan los protagonistas (la relación maestro-pupilo resulta ahora de lo más fria, antipática y forzada. Daniel-san está en esta película absolutamente insufrible (Ralph Macchio está terrible y sobreactuado), resulta un Daniel plasta y exhasperante con todo el mundo y con el espectador. El protagonista se ha convertido en un idiota que es todo lo contrario a la primera película. Y el profesor Miyagi (ahora un tanto desagradable y con gracias de vergüenza ajena con las que el guión le ha castigado) también lo está pero menos. El sensei está cada vez más caricaturizado. ¡Ya les vale cargarse el carisma de lo único que sostenía la saga!).
Y es que en Karate Kid III el temita del reto y el entrenamiento ya no es tratado con nada de esfuerzo y de cuidado. Es como si hubieran escrito el guión en dos días, los actores actuaran obligados o porque pasaban por allí y John G. Avildsen, que antes se recreaba en bellos paisajes de siluetas en el atardecer con banda sonora oriental, ahora realiza de la forma más rutinaria al estilo del peor cine ochentero que se recuerda. Cualquiera de las dos anteriores son tesoros si se las compara con esta (ya que trataron una historia inocente con mucho más cariño y humanidad tanto en el guión como en la realización).
En fin, un aburrimiento. La historia reincide y se degrada con un tratamiento de lo más pobre (se adivina la situación que pasa al minuto siguente sin esfuerzo), un ritmo lentísimo, una actuación de Ralph Maccio irritante, unas gracias de pena y unos malos malísimo de esos de ¡ja ja ja! bufonescos. Solo se salvan los pocos momentos en los que el señor Miyagi reparte hostias como si ná, la banda sonora y…
Me pareció interesante la película, aunque fue la mas comercial de todas. La historia entretiene, el argumento parece demasiado trillado pero convence, y lo mejor es que Daniel saca a relucir su lado oscuro (la mejor parte de la película).
En cuanto a la música no puedo dar muchas quejas, ya que era la esperada, y ayuda a complementar escenas emotivas.
El final no obstante parece poco elaborado y traído por los pelos y eso puede decepcionar a algunos fanáticos o seguidores. Pero posee una frase con moraleja incluida muy sabia, en la cual se aclara que uno puede permitirse perder con su rival, pero no debe permitirse perder con el miedo, lo cual es muy cierto ya que el miedo y la duda son los peores enemigos del pensamiento humano.
Recomendada para aquellos simpatizantes del cine de Artes Marciales, y para los adolescentes que quieran encontrar equilibrio en la vida como diría Miyagi
John G. Avildsen decidió exprimir al máximo el éxito cosechado por Karate Kid con esta tercera parte, la cual directamente no aporta absolutamente nada, ni a la historia, ni al género.
Es increíble que una saga basada en el karate, tan mal coreografiada, alcanzase tanta repercusión. Lo normal es que en las películas de artes marciales (independientemente de la modalidad que se practique) el protagonista sea todo un especialista: Bruce Lee, Steven Seagal, Jet Li, Wesley Snipes, Chuck Norris o Jason Statham serían ejemplos de buenos protagonistas para este tipo de películas, pero ¿Ralph Macchio? Creo que juntando los tres filmes no encontramos una buena patada dada por este muchacho.
La primera parte tuvo su gracia por aquello de que un niño, perseguido por los matones de turno, acabe sobreponiéndose a su miedo y plantándoles cara. Además tenía su gracia la extraña pareja formada por un nervioso adolescente y un experimentado maestro de karate de Okinawa. En la segunda (que ya para mí sobraba) se trata de profundizar en la vida del anciano profesor Miyagi, ambientando la acción en su localidad natal. Pero, esta tercera, ¿a qué viene? No es más que algo totalmente repetitivo, como si la segunda parte no hubiera existido, enlazando la historia con el final del filme original.
Los personajes no sufren ninguna evolución (en tres películas en alumno de Miyagi todavía ha sido incapaz de aprender nada de disciplina, continuando como un manojo de nervios todo el rato), el relato es un calco de la primera y en los combates se nota demasiado que Avildsen fue el director de Rocky, no por la espectacularidad (todo el filme adolece de ella) sino por los giros imposibles que toman.
Karate Kid fue una película que, como ya he dicho, tuvo su gracia. ¡Qué pena que no lo hubieran dejado ahí!
Esta tercera parte de Karate Kid es la peor de todas con diferencia.
Los malos son demasiado malos y resultan patéticos. La historia ya se repite demasiado y que Daniel gane las peleas con un golpe secreto estaba muy bien en la primera película, bien en la segunda pero ya cansa en la tercera.
Las dos primeras películas entretenían sin ser grandes películas pero esta llega a aburrir, cosa que no hacían las anteriores.
Esta es una de esas peliculas injustamente tratadas por la critica pero que entretiene y mucho y enseña solidos valores en cuanto a la amistad.. que hacen de esta una dignisima sucesora de la primera, para empezar porque tiene un guión muy solido que no pretende ganar Oscars sino entretener y lo consigue, que es previsible… francamente hay muchos que ven previsibles el 90% de toooodas las películas que ve.. pero en esta ocasion salvo el final no lo es , para mi es muy recomendable y alos que la han crujido sin compasión solo darles un consejo veanla sin ninguna pretensión que es como hay que visualizar este tipo de filmes