El secreto de la aldea
Sinopsis de la película
Ahonda en la oscura historia de la complicidad de Polonia durante el Holocausto desde el punto de vista del granjero católico Jozef Kalina (Maciej Stuhr), que descubre las huellas de la masacre de judíos durante el Holocausto en su aldea. Su investigación revelará un oscuro secreto del pasado sucedido en el pueblo de Jedwabne, cerca de Varsovia, en julio de 1941.
Detalles de la película
- Titulo Original: Poklosie (Aftermath)
- Año: 2012
- Duración: 104
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Opinión de la crítica
Película
6.6
93 valoraciones en total
Al principio resulta inevitable cuestionarse sobre la integridad psíquica del individuo protagonista (el hermano que vive en el pueblo). De acuerdo, digamos que es un tipo… raro. De esos, de lo que en todos los pueblos hay uno. Le miran como si fuera especial, nadie le guarda demasiada estima. De hecho no le cae a nadie bien y todo el mundo le desprecia. Puede que lo tachen de loco (luego veremos que no), pero aquí se contrasta una primordial característica de la sociedad rural, que tanto se distingue a la que habita en un poblamiento civil. En el pueblo a todo el mundo le importa todo lo que haces, hasta la hora a la que vas al baño y la marca de dentífrico que usas. No hablemos ya si sales todas las noches a traer bloques de piedra y cruzas el pueblo. En la ciudad sucede todo lo contrario, a la gente se la suda hasta tal punto todo lo que haces y lo que te pasa, que aunque te pasees en pelotas en plena ciudad vas a conseguir atraer lo justito de atención. ¿Qué es peor? Seguramente lo primero, pero a veces resulta chocante percatarse de que en los núcleos tan poblados, la relación con el prójimo brille por la más absoluta de las indiferencias. De acuerdo es normal, que en una ciudad poblada no existan lazos entre sus habitantes, pues al fin y al cabo son muchos, pero si lo miras por otra parte, resultan algo desconcertantes los entresijos de nuestra sociedad en el sentido de que alguien, por ejemplo, se pueda llegar a sentir solo estando rodeado a la vez de tanta gente. Si no se conoce en detalle nuestro funcionamiento como entes vivos, nuestra psicología, resulta de lo más contradictorio, ¿no? El caso, el tío de esta película, Jozef creo que se llama, se dedica a transportar lápidas de unas ruinas a su campo. Bloques de piedra por los que en total ha pagado en torno a unos 20.000$. Y sí, tiene toda la pinta de que el tipo parece estar tocado de la cubatilla, al menos un poco. Tal y se lo cuestiona el otro hermano, el que ha venido de Estados Unidos de visita a su pueblo natal. Pero las cosas se empiezan a complicar, poniéndose sobre la mesa conceptos tan primordiales como la justicia y la libertad. De acuerdo, este tío que transporta lápidas de un lado para otro no tiene por qué ser tu amigo, pero además el tipo es inofensivo, así que, ¿qué necesidad hay de molestarle y tratarle de ese modo? Ante los acosos, los ataques y la progresiva discriminación que va sufriendo este, su hermano, el forastero se ve implicado inevitablemente en la causa de su hermano, cuyas raíces residen en el asesinato de judíos en esas tierras cometidos en el periodo de la II Guerra Mundial. Él no es judío, pero su bondad innata y altruísmo influyen mucho en él por lo que decide crear un cementerio decente para odas esas personas. Su hermano comprende su desazón, pero incide en que de eso fue hace mucho tiempo y le insta a que se dedique más a hacer su propia vida, pero se ve arrastrado en todo lo que incumbe a su hermano, pues al fin y al cabo vive con él, en su casa, bajo un mismo techo. En lo que la discriminación y la hostilidad por parte de los locales (típicos paletos de pueblo) aumenta, hasta el punto de resultar un problema a la hora de ejercer la vida cotidiana, el hermano de Jozef, con más olfato para las cosas, decide investigar los orígenes del hecho y descubre que detrás de todo ese desprecio y odio que les tiene todo el pueblo, se esconde una causa mucho más sólida y racional que el de unos meros prejuicios sin fundamento, la esencia de los cuáles están muy bien recogidos en el filme, logrando una denuncia sólida y feroz.
La película posee un estilo de narración que se aleja de la trepidación de los guiones hollywoodienses y los del cine de acción o suspense en el sentido más estricto de la palabra, lo cual puede causar desencanto en algunos espectadores (no es una película para proyectarla un sábado por la tarde, ni con los niños) por la escasa sincronía de gustos (a muchos puede ser que simplemente no les interese lo que esta película está contando) o por un ritmo poco presuroso, pero que no obstante encierra un relato interesante y potente que va explotando y ganando intensidad con el paso de los minutos pese a su en ocasiones premioso tempo. Es un testimonio histórico, pero a la vez se trata de algo más que de eso, porque se ve reflejado en la época actual y cómo repercute sobre aquellos con los que directamente está relacionado, relatos paralelos que constituyen en realidad uno solo, se trata de una relación causas-consecuencias. Como ya digo, a mí me ha parecido interesante.
Una historia que comienzo sin ser una historia, que no demuestra mucho que parece al principio ser una locura del personaje, pero mientras pasan los minutos esa locura va tomando forma y se pone seria y desde ahí la película cambia totalmente. Sorprendente la historia en si, un tema muy duro, trágico y que puedo haber sucedido lamentablemente, muy bien contado, esto hace que sea atrapante y tenga mucha intriga, y cuando te sorprende luego de unos minutos te vuelve a sorprender, te mueve las entrañas y hasta por el dolor que corre en la historia llega a tocar el corazón y hasta te hace derramar alguna lagrima, y otra ves vuelve a sorprender cosa que en los ultimo 20 minutos logra hacer varias veces.
Con un final muy bueno, dos actuaciones geniales de Maciej Stuhr, Ireneusz Czop.
Como dice el tirulo Este mundo es un asqueroso agujero de mierda .
Excelente.
Esta es una muy buena película que indaga en un terreno no muy transitado, como es el comportamiento de quienes sacaron sus ventajas de la ocupación nazi que buscaba el exterminio de los judíos. La lista de Schlinder nos mostraba la dualidad del comportamiento de un hombre, que si bien hizo su negocio con los criminales, también salvó con sus actitudes a cientos de personas que de otro modo hubieran terminado en los hornos crematorios. Poklosie va por otro lado, no se trata de un hombre, sino de un pequeño grupo de campesinos que desde hace décadas convive -sin gran remordimiento- con un secreto espeluznante, protagonizado por ellos en los años 40, cuando el nazismo se expandía por Europa.
Intrigado por la huida de su cuñada (con sus hijos) a Chicago, el protagonista decide emprender el regreso a Polonia para saber de boca de su propio hermano los motivos del abandono. de su esposa. A partir de allí el director va descubriendo capa por capa de una historia que finalmente se develará trágica, y sacará a la luz no sólo el asunto del pasado, sino algunos resentimientos que permanecieron dentro de una olla de presión durante años.
Una vez descubierto el horror, habrá que lidiar con el dolor del pasado, y allí los hermanos se enfrentarán a un dilema que los pondrá a prueba. Si la verdad revelada es cruel, hacerla pública en una aldea en la que aún conviven los cómplices de aquellos actos tiene un costo que no todos están dispuestos a pagar.
La película es cien por cien recomendable. Más en el spoiler.
Imprescindible obra maestra que trata un tema tabú de la mejor de las maneras posibles, con una banda sonora de escándalo, unas interpretaciones merecedoras de todos los premios habidos y por haber, una fotografía impecable y una delicadeza absolutamente para quedarse mudo.
Un polaco exiliado que lleva viviendo en Chicago veinte años regresa a la granja familiar para averiguar por qué su cuñada ha abandonado a su hermano y se ha marchado a los Estados Unidos con sus hijos. En su Polonia natal encuentra un pueblo hostil y a un hermano que parece haber perdido la cabeza y ha conseguido reunir en su parcela más de 300 lápidas judías de la época del Holocausto que servían como pavimento de caminos e incluso decoración de cuartos de baño rurales. Las investigaciones del recién llegado le llevan a descubrir una verdad oculta, terrible, en la que su propio padre tuvo un papel protagonista.
El director de la extraña y memorable Cerdos regresa al cine años después con una película impecable, maravillosamente dirigida e interpretada, heredera del cine de Costa-Gavras y que partiendo de un hecho pequeño destapa un retazo de la vergonzosa historia europea que al parecer nadie quiso descubrir durante décadas y analiza la situación de un país que aún intenta desprenderse de las agujetas del comunismo y el sentimiento racista más oculto.
Lo mejor: Es perfecta. Es muy difícil encontrar obras así de redondas. La banda sonora de Jan Duszynski es una maravilla.
Lo peor: No tiene una sola tacha.
Estamos ante una de las mejores películas que se han filmado sobre la oscura historia de un país, una película que todo espectador de cine e historiador han de ver, que se desarrolla en 1990 tras la caída del comunismo, pero que revive viejas heridas y una estremecedora historia ocurrida en 1941 durante la Segunda Guerra Mundial.
Inspirada en hechos reales, Wladyslaw Pasikowski, director y guionista del film, se basó en el libro del historiador Jan Tomasz Gross. Relata con gran realismo y crudeza, la masacre de judíos en Jedwabne, cerca de Varsovia (Polonia), y para sorpresa del espectador los asesinos no fueron nazis.
El film suscitó mucha polémica y controversia. El actor Maciej Stuhr, el cual está soberbio con una interpretación digna de mención, incluso recibió amenazas de muerte: Esto nos llevará a no hacer nunca más actos vergonzosos que haya que esconder bajo la alfombra., dijo en una entrevista.
Poklosie se constituye así como la aceptación de una infamia y el retrato de lo fácil que es cruzar el límite entre lo honesto y lo que no lo es, perfectamente dibujado por la implacable ley del silencio que atenaza a los habitantes del lugar.
La historia de esta película, es una herida que toma largo tiempo en cicatrizar, su traducción misma la define, Poklosie en polaco significa Secuelas.