El hombre que sorprendió a todo el mundo
Sinopsis de la película
Egor es un valiente guardabosques que trabaja en la taiga siberiana. Es un buen hombre de familia, respetado por sus vecinos, y espera un segundo hijo de su esposa Natalia. Un día, sin embargo, Egor descubre que tiene cáncer y que le quedan tan solo dos meses de vida. Al final, sin otras opciones disponibles, decide ser él mismo. Ninguna medicina tradicional o magia chamánica puede salvarlo. Finalmente, sin otras opciones, intenta desesperadamente burlar a la muerte. Para sorpresa de todos, Egor opta por tomar la identidad de una mujer como una forma de combatir la enfermedad, lo que despertará el rechazo por parte de su entorno.
Detalles de la película
- Titulo Original: Chelovek, kotoryy udivil vsekh
- Año: 2018
- Duración: 105
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Opinión de la crítica
6.7
29 valoraciones en total
Dejando a un lado la falacia de que toda película LGTB es buena por definición, y juzgando, como ha de hacerse, por el producto, esta es una película interesante pero de una lentitud exasperante. No porque no pasen cosas, que pasan, sino porque el ritmo es tan pausado que, si se ve después de comer, la siesta está asegurada.
Muy interesantes el paisaje, el mundo rural, los animales, la sordidez de un ambiente aislado y lleno de prejuicios.
Buena la dos interpretaciones principales, pero la historia se alarga innecesariamente para contarnos una fábula, ha anticipada cuando una bruja relata el cuento de cómo un animal supo burlar a la muerte.
Baja al pozo de las esencias del cine que cambia. Un baño de realidad recorre cada poro del espectador al darse de bruces con una inquietante parábola de lo que somos realmente, de lo que queremos en cada persona y de la lucha entre lo que pensamos y lo que realmente sentimos. Nunca fue tan clara la dicotomía entre el respeto y la intransigencia. Los directores exponen de forma silente un ambiente opresivo donde la naturaleza esclaviza y veja más que el más importante de sus protagonistas. Partiendo de lo inesperado, de un sentimiento oculto y enterrado, el guion nos lleva sin cortapisas al choque de tramas, sin artificios. Frío, seco, palpable y espeluznante. Todo cambia cuando el corazón no ve salida. Las conclusiones del análisis de su protagonista enternece al más gélido de los corazones. Las sensaciones más bajas recorren a todos sus personajes, un decálogo fidedigno de lo esperado, pero no por ello menos desgarrador. Con sutileza vemos reflejados los valores impuestos en nuestras sociedades, y la lucha encarnizada entre la realidad y su necesario cambio. Evgeniy Tsiganov y Natalya Kudryashowa brillan con luz propia. Él en el abismo del desahucio interior y el renacimiento de sus sentimientos. Ella en su encarnizada lucha interna. Bella en su dureza. Desconsoladora en su realismo.
Tengo la sensación de que hay dos películas en una dentro de el hombre que sorprendió a todo el mundo .
La primera, y la que creo que les interesa menos a la pareja de directores, es una cinta sobre la muerte y el duelo anticipado. Que está centrada en lo que ocurre en nuestra familia cuando conocemos que alguien ha entrado en una cuenta atrás y le quedan, tan sólo, dos meses de vida por delante (también hay un subtexto sobre la pobreza y la falta de recursos). Esa película, que es una que podría haber sido muy interesante de tratar, para bien o para mal no es realmente lo que hemos tenido.
Lo que tenemos finalmente es la segunda película. Una sobre las más bajas pasiones humanas. Sobre la incomprensión, la violencia y los prejuicios. Una cinta que es dura, cruel y en ocasiones por el tipo de dirección que le imprimen, algo fría en sus imágenes más estéticas que funcionales.
En cualquier caso, creo que este giro al guion y esta segunda parte de la cinta (que ocupa mucho más metraje que la primera) no sólo es lo que querían contarnos realmente sino que es donde la película más brilla. De una cinta sobre el duelo pasamos a cine de denuncia y de los buenos (y de las duras, también).
La película, que se apoya especialmente en su actriz protagonista, Natalya Kudryashowa, que está magnifica nos invita a adentrarnos en las miserias humanas y, especialmente, en lo que significa formar parte del colectivo LGTBIQ+ en una Rusia que no tolera, precisamente, a las personas de ese colectivo. Sobre toda esa problemática irá girando el guion viendo como, poco a poco, nuestro protagonista se enfrenta a ese cambio de paradigma que se produce desde el momento en que decide vestirse de mujer.
Tampoco quiero añadir mucho más, ni entrar en detalles más concretos de la trama. Únicamente quiero añadir que, pienso, que al final se les va un poco el guion de las manos. No me acaban de encajar las piezas en el último tercio de la cinta. Quizá es cosa mía y no del guion, no lo sé. Creo que lo que hacen no le sienta tan bien a esta historia. En cualquier caso, creo que esta es una peli más que interesante y, en general, notable. Eso sí, advierto que tenéis que estar predispuestos a ver una película que, si bien no cae en ser muy contemplativa, si tiene un ritmo claramente pausado.
La pareja formada por Aleksey Chupov y Natasha Merkulova, aparte de ser matrimonio en vida real, forman un tándem como directores y guionistas. Ya nos sorprendieron hace unos años con su ópera prima Intima Parts, película aclamada por la crítica internacional. Ahora nos presenta su nuevo trabajo, un drama familiar donde se mezcla el folclore y humor rusos con la política contemporánea. La cinta está basada en los recuerdos de Merkulova de su infancia en Siberia.
El hombre que sorprendió a todo el mundo ha pasado por diversos festivales de todo el mundo, entre los que destacan el Festival de Rotterdam, el Festival internacional de Uruguay y el Festival de cine de Busan. Pero su verdadero éxito lo cosecho en el Festival de cine de Venecia dentro de la sección Orizzonti donde obtuvo el premio a la mejor actriz. Estos días forma parte de la sección Identidad del Atlàntida Film Festival.
Nos cuenta la historia de Egor, un guarda forestal que trabaja para el gobierno en la estepa siberiana, tiene una vida apartemente normal junto a su mujer y a su hijo y encima su esposa está de nuevo embarazada. Egor es un hombre bastante respetado en el pueblo, pero su vida dará un giro drástico cunado descubre que padece un cáncer terminal. A partir de ese momento hará todo lo que sea necesario para intentar engañar a la muerte.
A medida que la película va avanzando vamos viendo como el carácter y la forma de actuar del protagonista van cambiando, se cierra en un bucle en el que nadie puede entrar, su mujer no dará crédito cuando lo vea disfrazado de mujer. A partir de esta situación el estilo narrativo de la cinta cambiará completamente y todo lo que habíamos visto hasta ese momento se convertirá en una lucha contra los derechos LGTB en la Rusia actual.
Pero claro estamos en un país donde la propaganda de este grupo se prohibió completamente y en las zonas rurales y muy conservadoras estos temas son como una bomba de relojería para todos aquellos que no se adaptan a lo que denominan una vida normal, con un núcleo familiar. Egor pronto se da cuenta del ataque de sus vecinos y tanto él como su hijo recibirán continuas palizas.
La película analiza todo este procedimiento, está muy bien dirigida y tiene una estructura narrativa que engancha. Tanto la música como los bellos paisajes son una pieza fundamental en todo el proceso. El espectador se sentirá identificado con Egor y sentirá hasta pena por él en algunas escenas. Las actuaciones de los dos actores protagonistas son sublimes. No es una película fácil pero si entras en su tono y en su ritmo pausado disfrutarás mucho con ella.
Lo mejor: La estructura narrativa y el trabajo de los actores.
Lo peor: Su ritmo pausado puede perjudicarle.
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