El hijo
Sinopsis de la película
Lorenzo, un pintor de unos 50 años, reconstruye su vida luego de unos tiempos difíciles. Se encuentra ansioso por el hijo que tendrá con su nueva mujer, Sigrid. Durante el embarazo, ella empieza a tener cierto comportamiento obsesivo y malicioso, que tensa la relación entre ambos. La situación se complejiza y las emociones no parecen están controladas por la pareja. Con el nacimiento del bebé, los conflictos se agudizan y el vínculo entre ellos se torna oscuro y peligroso, hacia un lugar casi sin retorno.
Detalles de la película
- Titulo Original: El hijo
- Año: 2019
- Duración: 92
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Opinión de la crítica
Película
5.3
23 valoraciones en total
No me ha gustado. Hay poco que merezca la pena en este thriller descafeinado, sin mucha tensión, sin escenas típicas de este género. Es muy blandito, algo aburrido. Se deja ver ya que es de metraje corto. Me ha decepcionado, francamente. Correctas actuaciones. Nada más que destacar. No recomendable.
Me deja un poco estupefacta el final de la película, aunque no entre en detalles de este, sino hasta que llegue a la zona de spoiler.
Tiene unos puntos realmente buenos de suspenso, de planos y también algunos en los cuales Furriel fue capaz de hacerme sentir nervios, ansiedad, incomodidad, impotencia. Su personaje te transmite absolutamente todo lo que debe, pero en cuanto a la que hace de Sigrid (o como se escriba) es insoportable. Una actriz total y completamente antipática, no por como sea su personaje, sino porque la forma de actuar es total y completamente carente de personalidad real. Parece una caricatura de una persona y no una persona real existente, no me gustó para nada, horrible. El personaje de Renato sobre actuado como todos los personajes que hace ese tipo, nada nuevo bajo el sol la verdad de ese lado.
Es una película que, para mí, entretiene y te mantiene varias veces al borde de la silla, intentando mostrar que en cualquier momento se va a destapar la olla y va a pasar algo tremendo, pero que nunca sucede. O si pasa, es algo pequeño y pasajero. La peli venia bien hacia la mitad y un cuarto, pero luego cae estrepitosamente.
Mediante un relato que salta en el tiempo constantemente se nos revela una historia más que interesante, con un manejo del suspenso notable que poco a poco nos introduce en el drama de su protagonista (aunque siempre dudamos respecto a su cordura). En ese sentido El hijo cumple con creces durante su trámite con el objetivo de mantenerte ahí, atento, inquieto y al tanto. Pasan los minutos y sientes el estar frente a una gran cinta de suspenso, sin embargo,… (al spoiler)
Mientras se ve El Hijo, cuesta mucho desprenderse del recuerdo que uno guarda de El Bebé de Rosemary de Román Polanski, una obra maestra del terror gótico moderno en el cine. Posiblemente inspirado en aquel clásico y basado en un guión de Leonel D´Agostino sobre una historia de Guillermo Martínez, el film deja verse como una historia de suspenso, bien contada pero no exenta de ambigüedad, altibajos en su ritmo, y sobretodo trampas argumentales.
El film posee todos los elementos del género. Una casa con un altillo tenebroso que obra de atelier de Lorenzo. Una pareja deseosa de tener un hijo. Un esposo pintor de cuadros que luce algo alterado. Una esposa extranjera que se mantiene distante y cuando se embaraza se escuda en un ama de leche de aspecto sombrío. Un matrimonio amigo que padece de infertilidad, que se muestra esquivo y hasta parece envidiar la dicha ajena.
No obstante ello, el film comienza bajo la apariencia de un matrimonio enamorado. Lorenzo y Sigrid parecen tener una vida apacible. Su mujer es noruega y la ha conocido en un viaje. Desean tener un hijo. Cuando Sigrid se embaraza, la convivencia parece volverse un paraíso. Pero cuando la criatura nace, sorpresivamente, estalla el infierno.
¿Quién se ha vuelto loco en la pareja? ¿Por qué la vida de ambos parece desestabilizarse? ¿Dónde ha quedado el amor que la pareja se profesa al principio de la película? ¿Cuándo han comenzado a temerse uno al otro? ¿Qué tiene ese niño que desestabiliza la vida de sus padres?
Schindel toma como centro de la historia al personaje de Lorenzo. Toda la película girará en su torno. El personaje espera con ansiedad el nacimiento de su hijo, pero cuando esto acontece, la conducta de Lorenzo comienza a mostrarse con ciertos desequilibrios emocionales que no son ajenos a la pretensión de su esposa de no dejarlo ver a su hijo. La mezquindad de Sigrid parece volverlo alterarlo al borde de la misma locura.
El film se vuelve hermético y casi no brinda explicación alguna. Fuera de toda lógica, la trama se sostiene en función del golpe de efecto y el film parece transitar una montaña rusa de sentimientos encontrados. Cada escena esta correctamente desarrollada. Es valida por si misma. Pero cuando el espectador intenta conectar el todo, se encuentra con que al rompecabezas que le entrega Schindel le faltan algunas fichas. El film, entonces, se vuelve arbitrario, carente de lógica, y por ende, de interés.
Podría decirse que Schindel solo busca provocar y desafiar, evitando en todo momento evitar la pasividad de quien está sentado en la butaca. Incluso agrega un doble final, lo cual no solo vuelve loco a sus personajes sino también al espectador, que se siente igual o más perdido que el propio director que con suma astucia pareciera dejar abierta una puerta abierta para tener la posibilidad de filmar una segunda parte.
Esta es una de esas películas que parecen más interesantes de lo que realmente son. El brillo y la destreza con que Furriel y Gusman desempeñan sus roles, es inversamente proporcional a la profundidad de la historia que nos va contando este film. Funciona, sin dudas. Pero se queda corta en varios aspectos, los cuales resultan fundamentales para comprender de qué va la cosa en cuanto al nudo argumentativo.
El Hijo podría haber sido un film sobresaliente, pero su segunda mitad desperdicia esa opción. Una pena.