El declive de Patrick Leary (Serie de TV)
Sinopsis de la película
Serie de TV (2010-2011). 13 episodios. Después de dejar el ring, Holt McCallany (CSI: Miami), un veterano boxeador de los pesos pesados, trata de encontrar un nuevo camino en la vida con el apoyo de su familia. Sin embargo, sus acuciantes problemas económicos lo sitúan frente a un dilema: volver a boxear o aceptar un trabajo como cobrador de deudas.
Detalles de la película
- Titulo Original: Lights Out (TV Series)
- Año: 2010
- Duración: 40
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Opinión de la crítica
Película
7.4
97 valoraciones en total
Impresionante serie la que se ha marcado FX, la historia de un boxeador que se retiró por que su mujer no aguantaba más golpes, y que por problemas monetarios tendrá que volver al ring, aún a costa de su maltrecha salud, ya que el tipo está muy tocado a causa de los golpes que recibió.
En la serie tenemos de todo, drama familiar, deporte, trama criminal (por las mafias que rodean al boxeo), promotores ladrones y todo un arsenal de personajes indolvidables, empezando por el protagonista (Holt McCallany), un tipo al que he tenido el gusto en descubrir en esta serie, y que se hace con tan complejo papel desde el minuto 1, así como su sufrida esposa Theresa, una excelente Catherine McCormack (actriz inglesa que a finales de los 90 trabajó bastante en cine), su padre, también excelente Stacey Keach (el inolvidable alcaide de Prison Break), su hermano y bala perdida Johnny, el promotor Barry Word (un tipejo que controla el mundo del boxeo), sus tres hijas, o el gran Ed Romeo (personaje que sale en tres ep., pero del que pides un spin off en cuanto le ves).
La serie no se hace pesada en ningú capítulo, aunque sea previsible, está tan bien contada que es imposible no rendirte ante ella. Reconozco que soy muy aficionado al cine sobre boxeo, y cuando ví el tráiler casi lloro…
Pero no todo es bueno, ya que la serie ha sido cancelada dada su baja audiéncia, que no llegaba ni al millón de espectadores en FX, lo que es una pena, ya que cualquier mediocre serie de abogados, polícias o médicos saca diez veces más, pero la vida es así, y hemos tenido el placer de contemplar durante 13 eps. la vida de este boxeador y su família, de los que nunca nos olvidaremos.
Saber que FX decidió cancelar Lights Out y dejar la serie en una única temporada puede generar una duda lógica en cualquier persona que se proponga verla. A mí me pasó. Pero el duro y perfecto final del último capítulo me dejó claro que no había cometido ningún error dándole una oportunidad.
Sí, la serie podría haber seguido perfectamente con nuevas tramas en torno a la familia Leary y el mundo del boxeo, pero a la historia que se nos cuenta en estos trece capítulos no le falta (ni le sobra) una sola coma.
Si eres amantes del boxeo estás de enhorabuena, porque en Lights Out se desprende auténtica pasión y amor por este deporte, así como crudeza a la hora de tratar sus zonas oscuras. Y si los puñetazos no te dicen nada, tranquilo porque la serie es mucho más que eso, afrontando por igual dramas familiares e intrigas criminales con realismo y honestidad.
Despeja tus dudas y salta al ring.
Estamos ante una de las mejores series de los últimos tiempos que, sin embargo, ha pasado desapercibida para el gran público. Tanto, que la cadena que la emitía, FX (‘Sons of Anarchy’, ’Damages’), la canceló después de haber emitido la que ha sido la primera y única temporada de este gran drama. Casi mejor así: nos queda una serie de 13 episodios vibrantes y de gran factura que sin duda nos atrapará de principio a fin y, de este modo, no corremos el riesgo de que los guionistas y el paso de las temporadas le resten esplendor.
‘Lights out’ es la historia del ex-campeón de los pesos pesados Patrick ‘Ligths’ Leary (genial Holt McCallany en el papel), una historia de pasión por el boxeo y de superación personal. Después de retirarse del boxeo profesional, el protagonista decide centrarse en el trabajo en su gimnasio y en su familia. Pero los problemas económicos (y otros que vendrán detrás) están al acecho y no le van a conceder a nuestro púgil un retiro tranquilo. Patrick afrontará su cotidianidad como si aún estuviera en el ring, aguantando golpes que vienen por doquier con la máxima tenacidad (incluso de personas muy cercanas a él) y dando el máximo de sí mismo por defender a los suyos.
Las dificultades económicas acaban siendo una entre tantas turbulencias a las que tendrá que hacer frente. Empezando por su interesado hermano (un acertado y sonriente Pablo Schreiber, el que fuera Nick Sobotka en ‘The Wire’), que se aprovechará del ex-campeón para reflotar las arcas del gimnasio y llenar sus bolsillos, los agentes que manejan el mundo del boxeo, la relación con su padre o la enigmática aparición de su madre después de mucho tiempo sin saber de ella. Pero lo que hace a Patrick Leary realmente invencible es su mujer Theresa (Catherine McCormack, esposa de William Wallace en ‘Braveheart’) y sus hijas, a las que ama por encima de todo y que suponen el pilar principal de su estabilidad y de su confianza. No cabe decir que, cuando Patrick no encuentra este pilar, queda a merced de los intereses de su hermano y de los agentes, que se aprovecharán de él a pesar de su salud.
Sin desvelar ningún aspecto del argumento, queda comentar el gran acierto de la cadena en la elección del reparto. Tras destacar a un gran McCallany como ‘peso pesado’ de la ficción y las buenas interpretaciones de Schreiber y McCormack como hermano y esposa, hay que destacar el entrañable papel de Stacy Keach como el padre de Patrick, de sus hijas y, especialmente, el papel de Daniella (Ryann Shane), y el enigmático personaje Ed Romeo (Eamonn Walker), que tendrá una breve aparición pero que marcará un punto de inflexión en la serie con su vozarrón y sus reflexiones.
No se pierdan esta tremenda ficción, una pequeña joya con un argumento sólido y creíble, unas grandes interpretaciones y unos intensos 3 capítulos finales que nos regalan un magnífico y emotivo final de serie con el que quedaremos por siempre encariñados con nuestro campeón Patrick ‘Lights’ Leary.
Acabo de terminar el último capítulo de Lights Out. Qué maravilla de serie. Son trece capítulos redondos, del primero al último. Una película magnífica dividida en trece partes donde todas las piezas encajan a la perfección.
Hace unos días, cuando descubrí que Lights Out no iba a continuar me entró una pena enorme, pero al acabar la serie he llegado a la conclusión de que es mucho mejor así. No tiene sentido continuarla. La historia que nos querían contar ya está contada, y el sabor que deja en la boca es el de algo grande, el de saber que has visto una serie redonda, perfecta.
Holt McCallany -que hasta el resto de sus días ya siempre será Patrick Lights Leary- está soberbio. Es el tío que todos querríamos ser, o el amigo que todos querríamos tener. Porque esta serie no trata sobre boxeo, no. Esta serie trata del amor hacia los tuyos, del honor, de la dignidad, de la integridad, de asumir que estás en el hoyo y sacar fuerzas de donde no las hay para salir de él.
Los secundarios sean posiblemente lo mejor de la serie. Barry K, Death Row Reynolds, Ed Romeo, el gran Stacy Keach o la aparición fugaz de David Morse en un papel memorable consiguen que el interés de la serie no decaiga jamás.
Otras series magníficas de una sola temporada -como Rubicon- podían, y debían, haber seguido. Pero Lights Out no. Cuando algo es perfecto es mejor no tocarlo y recordarlo así toda la vida.
Es la primera vez que escribo una crítica en filmaffinity, pero la ocasión la merece. Maravillosa serie, increíblemente interpretada por el gran McCallany (ya para siempre, Luces ). Aquellos que no hayan tenido la oportunidad de verla, por favor, no lo duden, ver la historia de este personaje y su familia es una delicia. Casi todas las escenas familiares (él con sus tres hijas y su mujer), a mi personalmente, me parecieron muy cercanas, reales, emocionan y llegan al espectador, sorprendiéndote a ti mismo con alguna que otra lagrimilla.
Sin embargo, cuando uno termina de ver esta magnífica serie se pregunta una cosa: ¿cada vez gusta más al público aquello que no te haga pensar un poco? Este personajes y esta historia es realmente inspiradora, es algo preocupante que el público de la espalda a algo con tanta calidad. El declive no es de Patrick (él siempre será grande), el gran declive (y repito, preocupante) es el del público.