El cerrajero
Sinopsis de la película
Sebastián es un cerrajero de 33 años que no cree en las relaciones exclusivas. Mónica, su relación más estable de los últimos 5 meses, queda embarazada y es muy probable que sea de él. En el intento de minimizar la posibilidad, empieza a sufrir visiones con los clientes a quienes va a abrirles las puertas. Entre ellos Daisy, una ex empleada doméstica de 19 años peruana, que termina refugiada en su casa, intentando averiguar su destino con el don que ella cree ver en él. Este choque de mundos con Daisy donde descubre una relación nueva, casi paternal, y el ir y venir con Mónica, lanza a Sebastián a una nueva posibilidad: abrir su propia puerta.
Detalles de la película
- Titulo Original: El cerrajero
- Año: 2014
- Duración: 77
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes conseguir una copia de esta película en formato HD y 4K. Seguidamente te añadimos un listado de fuentes de descarga disponibles:
Opinión de la crítica
5.1
62 valoraciones en total
Sencillo y austero, pero efectivo, drama argentino con toques de comedia romántica donde se mezclan lo cotidiano con lo fantástico en medio de un humo hediondo que inunda sentimientos y vínculos rotos. Buenas interpretaciones de Esteban Lamothe y de Yosiria Huaripata.
La directora y guionista Natalia Smirnoff edifica una narrativa donde entrelaza el costumbrismo barril con dosis de elementos sobrenaturales que no siempre encajan sin hacer ruido, pero que le dan un toque de originalidad y extrañeza.
La propia realizadora contó que ubicó temporalmente en el año 2008, cuando Buenos Aires se volvió irrespirable por el humo por las protestas de los productores del campo contra el aumento de las retenciones a las exportaciones que impuso la Resolución 125, mientras le tocaba experimentar un encierro el llamado a un cerrajero.
Con el premio a Mejor dirección artística en el Festival de La Habana, la propuesta de Natalia Smirnoff es una especie de fábula urbana, llevadera y entretenida, de personajes comunes y sencillos que se van acercando y alejando en la medida que el humo y los sobrenatural inundan sus vidas.
Calificación Fanaseriecine: 6 ½ sobre 10
Cuéntame un cuento y verás que contento, me voy a la cama y tengo dulces sueños…
Erase una vez…, un hombre tranquilo y sereno, argentino de 33 años que le gustaba su vida, ir a la suya y no meterse con nadie, cerrajero de profesión adora reconstruir y montar cajas musicales, libre y solitario no cree en el compromiso ni las ataduras, eso de amor verdadero para toda la vida, fidelidad, es un cuento chino.
La escena ocurre en Buenos Aires, 2008, la llamada época del humo donde toda la ciudad estuvo invadida por un clima molesto y desagradable durante tres semanas, una especie de niebla maloliente y repulsiva, muy extraña en dicha tierra, que nadie era capaz de explicar su por qué o procedencia.
Pero, he aquí que nuestro protagonista recibe la noticia de que su chica está embarazada y duda si tenerlo o no, indecisión que le torturará a partir de entonces entrando en una espiral de enfado, enojo y susto, miedo no reconocido por la incertidumbre de poder ser padre sin estar preparado, sin quererlo, paternidad de la que siempre rehusó envuelta en un humo que le asfixia y del que necesita escapar, salir desesperadamente.
Y, he aquí que en plena realización de su trabajo, el cual venera y honra, empieza a recibir visiones, flashes inesperados sobre la vida de sus clientes, recepciones que ni controla ni puede evitar manifestar públicamente, inmiscuyéndose, sin quererlo ni pretenderlo, en el presente de desconocidos, no todos amables y agradecidos, que le traerá problemas e inconvenientes amén de un repaso, casi obligado, de su persona, pasado, fobias y cuentas personales pendientes.
Un hecho metereológico real le sirve de excusa a Natalia Smirnoff, escrito y directora, para inventar una pequeña historia, natural y modesta, franca, breve y fugaz que sabe a poco, la verdad, pues no penetra en profundidad en la materia, se limita a pasar esquivamente por el asunto, enseñar las cartas pero no jugar una gran partida, su agradecida ligereza se torna levedad poco saciable, no colma todas tus apetencias ni cubre todas las necesidades de curiosidad y entretenimiento vertidas, corta y exigua, como la rareza atmosférica que tiene lugar en la ciudad y que tiene variadas interpretaciones a cual más dispar, gusta y ameniza, se observa con interés y ganas pero aporta pocos nutrientes, satisfacción reducida y limitada que te deja con hambre, con deseo de saber más, de indagar con mayor fervor y no dejarte con incómoda carencia de oferta pobre que enturbia el buen ritmo llevado.
La confusión y desespero de la ciudadanía ante ese aire irrespirable trasladada a una vivencia en particular, singular existencia que ve toda su armonía y quietud patas arriba y vuelta del revés, desconocimiento de su origen y de su por qué que aviva las teorías y aumenta el caos, lidiar con estos síntomas imprevistos cambiarán su actitud, forma de pensar y vida abriéndole las puertas a una nueva realidad y rumbo que él, por si mismo, era incapaz de realizar, de llevar a cabo a pesar de ser experto en llaves maestras y cerraduras de todo tipo.
Pequeña ayuda del destino para avanzar y evolucionar en el tiempo, fábula sabrosa pero escasa, la grata sencillez de su andadura y realización acaba siendo lo que más se le echa en cara, se aprecia y estima su simpleza pero haberle echado un poco más de imaginación y esfuerzo, empeño y dedicación a una buena base que no desarrolla todas sus posibilidades, surge y desaparece de forma inhóspita, no deja huella ni rastro pero queda en la memoria como anécdota inexplicable de recuerdo entrañable, es fácil apreciarla, no es difícil encontrar espacio para su degustación, complicado no querer más de ella, aceptada validez que no exaspera pero inquieta por su, no deseada, pequeñez.
Disfruta de esta incursión, de unos pocos días, en la alterada rutina de un anónimo cerrajero que no volverá a ser el mismo ni a estar igual, destrozado en su ánimo, perdido en su esencia, se repondrá y volverá a caminar, no es intensa, es cálida, de roce superfluo que no satura ni compensa, genial como corto, de menor categoría si hablamos de un largo, y he aquí donde reside la cuestión pues al tratarse de un filme necesita más contenido y desarrollo y, en cambio, opta por una escala ínfima y más reducida…, a ella le vale, se repliega y conforma, que te valga a ti es otra historia pues la ilusión despertada por este errante de los pestillos y cerrojos no se ve colmada, conformarse aquí no tiene acepción negativa, es simplemente acertarlo tal y como se presenta y tal y como quiere ser, sin más.
lulupalomitasrojas.blogspot.com.es
Film de un estilo indie. Me resultó extraño, raro, por momentos inentendible.
La historia que se cuenta es media vaga. No quiero adelantarles nada pero se trata de un cerrajero que tiene un poder mágico cuando hace su trabajo y en sus ratos libres hace cajas musicales, todo esto en una Buenos Aires rodeada de humo.
La actuación de Esteban Lamothe es buena, me gustan estos papeles en los que hace de una especie de loser, de tipo común, que en este caso es encargado de una cerrajería.
No sé que más se me ocurre escribir acerca de esto ya que no me atrapó.
Jack Cienfuegos igual siempre recomienda apostar al cine Argentino.