El campo de cebollas
Sinopsis de la película
1963. Dos policías que patrullan por las calles de Hollywood paran a una pareja de sospechosos. En un momento de despiste, uno de ellos saca una pistola, los desarma. A continuación, los policías son conducidos a un lejano campo de cebollas, donde uno de ellos es brutalmente asesinado mientras que el otro consigue escapar.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Onion Field
- Año: 1979
- Duración: 122
Opciones de descarga disponibles
Si quieres puedes descargarte una copia la película en formato 4K y HD. Seguidamente te añadimos un listado de posibilidades de descarga directa activas:
Opinión de la crítica
Película
5.9
87 valoraciones en total
Impresionante film capaz de tumbar al más predispuesto sin piedad alguna.
Hay hechos o argumentos que por muy trágicos que fueran no deberían llevarse al cine y menos de esta manera. Justitas interpretaciones y unos planos eternizantes, inmóviles, para un guión sin giros ni atractivos.
Leyes, interrogatorios, acuerdos… Parece…, parece, que sí, que hay algo… Nada. El más absoluto tedio.
Al finalizar, si sigues consciente, experimentarás la desazón de saber que has malgastado tu precioso tiempo en no sabes qué. No digo que caigas apesadumbrado, pero te costará tiempo centrarte de nuevo.
Esta impresionante película aborda las consecuencias (psicológicas, jurídicas) de un acto criminal, adaptando una novela de Joseph Wambaugh, antiguo policía, y beneficiándose de un tono neutro y un tratamiento semidocumental. También es remarcable el trabajo de los actores, en especial un turbio James Woods. Los destinos de dos policías y dos delincuentes se cruzan una noche, cuando los primeros detienen el coche de los segundos.
Por un lado tenemos a los detectives de la policía de Los Ángeles, James Campbell (Ted Danson) y Francis Hettinger (John Savage) y por otro a dos delincuentes de poca monta, Gregory Ulas Powell (James Woods), un sanguinario tipejo que se cree un maestro del crimen y Jimmy Lee Youngblood Smith (Franklyn Seales), un mestizo entreverado que acaba de salir de la cárcel y que pese a no estar hecho de la misma pasta que Gregory, se deja llevar por este y se convierte en su colega de fechorías.
Narrada de forma pausada y tomándose su tiempo para describir de forma magnífica a los personajes va atrapando al espectador (quizá también influya que al conocer la historia real sabemos que inevitablemente policías y ladrones van a acabar convergiendo trágicamente en el campo de cebollas del título) y haciéndote sentir la angustia ante el que sabemos inevitable final.
Basada en el hecho real descrito en el libro de titulo homónimo escrito por el ex policía de Los Ángeles, Joseph Wambaugh, tenemos un buen thriller con una conseguida atmosfera verite en la primera parte del metraje que se convierte en un fresco del sistema judicial de la época y un drama psicológico en su segunda mitad, en la que por una parte tenemos al policía superviviente que ha quedado evidentemente trastornado y por la otra a los 2 delincuentes tratando de evitar la cámara de gas aprovechando mil y uno recovecos legales.
Primer largometraje de Ted Danson en el que se luce en su breve papel (la angustia que vemos siente en sus últimas escenas traspasan la pantalla) y un James Woods que se convierte en la estrella de la función en base a los matices que aporta a su desagradable personaje, John Savage bien y una breve aparición de Christopher Lloyd como un preso del corredor de la muerte experto en leyes.
Por último señalar que está rodada en los escenarios naturales donde sucedieron los hechos, que James Woods gano por este papel el premio al mejor actor secundario en el Kansas City Film Critics Circle Awards 1980 y la acertada y comprometida (gran parte la financio de su bolsillo)) dirección de Harold Becker,
Dada la decadencia sin freno de la cartelera actual, ya prácticamente reducida a la nada, es siempre gratificante ver películas buenas del pasado. Este film es de esos desagradables pero de calidad. Yo creo que los humanos, no todos, pero la mayoría, tenemos un sentido individual innato de lo que es justo y de lo que no lo es. Las leyes, aún suponiendo que en su mayor parte puedan estar hechas con buena intención, son frías y manipulables. Pero lo que vemos en esta película, que asegura basarse en hechos reales, es una repugnante burla a las más elementales nociones del sentido común y de la justicia. Y esta infame burla se lleva a cabo utilizando los mecanismos legales y judiciales al uso. Este nivel de aberración es ya difícil de creer.