Después de la boda
Sinopsis de la película
Jacob ha dedicado su vida a ayudar a los niños pobres que viven en las calles de la India. Cuando el orfanato que él dirige está a punto de cerrar, un hombre de negocios danés le hace una oferta muy generosa: cuatro millones de dólares para evitar el cierre del centro de acogida infantil que regenta. Pero Jacob debe volver a Dinamarca para tratar el asunto. Una vez allí, su benefactor lo invita a la boda de su hija.
Detalles de la película
- Titulo Original: Efter brylluppet (After the Wedding)
- Año: 2006
- Duración: 122
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Opinión de la crítica
Película
7.1
78 valoraciones en total
Esa es la invitación que conlleva Después de la boda , un paseo por el amor y la muerte de la mano de la peculiar e inclasificable directora danesa Susanne Bier.
Cuando parece que tu vida no te va a dar más de sí, cuando te has encontrado a tí mismo, cuando gozas de una cierta paz interior… tampoco estás seguro.
La vida siempre te va a sorprender, generalmente para mal, pero, algunas veces, también para bien.
Sigo en Spoiler .
Impresionante film, el mejor para mi gusto de la directora, que un buen amante del cine paladeará como se paladea un buen vino.
Todavía estoy pensando en lo que acabo de ver…
Después de la boda sigue los caminos del más reciente cine danés. Hoy por hoy, Lars Von Trier es un claro referente en Dinamarca y Europa. Films excelentes, Bailar en la oscuridad, experimentales, 5 condiciones, odiados por muchos, Los idiotas, amados por otros tantos Rompiendo las olas.
Y no sólo Von Trier pasa de normas establecidas (para bien o para mal). Un claro referente en Dinamarca es el grandísimo film Festen, una maravilla de Thomas Vinterberg.
Pues bien, Susanne Bier, ahora parece que en manos hollywoodienses, hizo con después de la boda una película desgarradora, un drama que apuntaba a film de los que hay a patadas, pero que finalmente te deja con una sensación de trabajo bien hecho.
El transcurrir de la película es in crescendo, al igual que el de los personajes. Todo lo que hacen, lo hacen por un motivo. Una historia bien hilvanada en la que la curiosidad, el por qué de las cosas, tiene su respuesta y al final de la película no encuentras otra cosa que satisfacción por lo visto en la gran pantalla.
Como dice Chago77, no se olviden los pañuelos. Mi acompañante en el cine, hubiera agradecido antes este consejo.
Nominada al Oscar a mejor película extranjera, Después de la boda supone la confirmación de una de las voces más seductoras del reciente cine europeo. Tal es el impacto de su obra, que Hollywood ya está pergeñando el remake de dos de sus cintas (Te quiero pasa siempre y Hermanos), y la productora de Spielberg ya la ha fichado para hacer las Américas (Things we lost in the fire). Y es que el cine de Susanne Bier reúne el exquisito gusto por el melodrama de Douglas Sirk (Escrito sobre el viento, Ángeles sin brillo, Imitación a la vida…), la facultad indagadora de Bergman (Persona, Secretos de un matrimonio, Saraband…) y los elementos estéticos más refrescantes del Dogma (La herencia, Celebración). Casi nada. Con tamaña carta de presentación, sólo encuentro parangón en otros talentos igual de sensibles, Todd Field (En la habitación, Juegos secretos) e Isabel Coixet (La vida secreta de las palabras, Mi vida sin mí), capaces ambos de realizar lo que ya se conoce por estos lares como culebrón de autor.
La directora danesa sigue interesada en los secretos familiares. Con lo escrutador de su cámara en mano, en Después de la boda sus personajes vuelven a estar al límite. La fatalidad y el destino le permiten analizar de tal forma los dilemas morales y emocionales de sus protagonistas que uno acaba experimentado la misma agonía que ellos. Lenta e inexorablemente, el drama se va asentando en cuerpo y alma. Además, cuando nuestra credulidad corre peligro, es decir, cuando asoma el patetismo a causa de un exceso melodramático que no deja de ser sino mera subjetividad, aparecen unas elipsis tan apremiantes como vivificantes, la brillantez de un guión fabricado sobre moldes conocidos, sí, pero con un pulso tan firme e introspectivo que no hay cabo suelto que se precie, lo que suele ocurrir generalmente cuando se desatan las pasiones.
No desaprovechen la oportunidad de acercarse a una gran cineasta, a historias repletas de reflexión donde la fuerza de lo inesperado se cobra sus víctimas. Sólo hay que dejarse llevar por la intensidad que desprenden sus actores. Con tales interpretaciones, el compromiso del espectador es absoluto.
Después de la boda está fragmentada en dos partes. La primera de ellas, rodada bajo los cánones del DOGMA se centra en su personaje principal, Mads Mikkelsen, algo histriónico en determinados momentos del metraje. Es sólo, cuando la directora decide utilizar los focos y el trípode, cuando la cinta empieza a tener tanto forma como fuerza. Un acierto original el fracturar esta cinta que elimina el ritmo vertiginoso de la primera media hora DOGMA para serenarse en el drama que se avecina. Es difícil reseñar esta cinta sin contar o destripar parte del argumento. Lo cierto, es que a mitad de cinta, ya tienes una idea de lo que puede pasar y solo te queda ir atando cabos.
A destacar, la gran actuación de Stine Fischer Christensen (Anna) y Rolf Lassgård (Jørgen). Sigo sin entender o al menos, sin encontrar utilidad al plano detalle (hablo de esos ojos) en el cine. Aunque, por el contrario, consigue una fotografía muy buena en algunos primeros planos. Gran película que no llega a decaer durante su metraje manteniéndote en dolorosa tensión.
Fui a ver esta película por instinto, ya que en un principio ni conocía a la directora, ni me animaba demasiado el argumento…y afortunadamente el instinto no me falló esta vez.
Mezcla muchas situaciones complejas, muchos enfrentamientos en el personaje sin pecar de exhibición innecesaria, mucha tensión emocional. Me encantó y me desgarró, y me ha animado a rastrear a la directora. Recomendación: en v.o. por favor.