Dama por un día
Sinopsis de la película
Una anciana (May Robson) mantiene correspondencia con su hija, que vive en España, y le hace creer que es una gran dama de la alta sociedad que vive en un lujoso hotel. En realidad, es una alcohólica que vive de la venta ambulante de manzanas. Cuando su hija le anuncia que irá a verla para presentarle a su novio y a su suegro, miembros de una aristocrática familia, la desesperación se apodera de ella.
Detalles de la película
- Titulo Original: Lady for a Day
- Año: 1933
- Duración: 95
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Opinión de la crítica
Película
7.2
50 valoraciones en total
Magnífica película de Capra que tiene el hándicap de tener una secuela aún mejor como es Gángster para un milagro. Dicho lo cual y teniendo en mi caso la protagonizada por Glend Ford y Bette Davis entre mis favoritas, tengo que decir que la única pega que tiene esta película, es que se nos queda en la retina la posterior. Con todo si valoramos Dama por un día sin los prejuicios anteriores, hay que reconocer que la película está genial. Buenas interpretaciones, buenos personajes y una trama Made In Capra que nos hace seguir creyendo en el ser humano. Recomendable el visionado de ambas y que cada uno saque sus conclusiones con cual se queda. Como decía en el título de la crítica Todo es posible con el Señor Capra hasta que haga un remake de una película y que el mismo supere el excelente nivel de la primera.
Las matemáticas y el cine no se llevan bien. Especialmente en aquello de que el orden de los factores no altera el producto. Porque miren ustedes, no se obtiene el mismo resultado viendo primero Dama por un día y después Un gángster para un milagro, ambas de Frank Capra, que hacerlo a la inversa. Y a mi manera de ver las cosas, la perjudicada es Dama por un día, porque aún partiendo de la identidad de historias, el color, los actores y los veintiocho años entre una y otra decantan el resultado a favor de Glenn Ford y Bette Davis.
Y ello me deja un regusto amargo porque la versión 1933 es una señora película nominada para la estatuilla a la mejor película, la cual fue para Cabalgata de Frank Lloyd, quien, a su vez, recogió el premio al mejor director. La anécdota de aquella noche fue que el presentador dijo: Ven a buscarlo, Frank sin darse cuenta que había dos Frank nominados. Capra se levantó equivocadamente pero tuvo que retirarse al darse cuenta que el premio no era para él.
Y por si todo ello no fuese bastante, dos nominaciones más: Mejor actriz y Mejor guión adaptado, perdidos frente a Katharine Hepburn (Morning Glory) y Victor Heerman y Sarah Y. Mason, por Las cuatro hermanitas, sobre una novela de Louisa May Alcott.
Poderes incontestables los de éste espléndido trabajo donde el especialista en cuentos cinematográficos nos regala otro de sus sueños maravillosos.
El talento de Capra en estado puro. Su excelente trama, su sensibilidad, su humor inteligente y su fina captacion psicológica la hacen indispensable para todo cinéfilo. Para mi gusto, mejor que la versión posterior (Un gangster para un milagro) aunque esta última no desmerece la filmografía del maestro. Recomendable la version original por los acentos de los gangsters (son para partirse de risa).
Estuvo nominada 4 Oscars y al final no consiguió ninguno. Realmente es una película muy oscarizable, tiene muchos elementos para ellos.
Es curioso que después de casi un siglo, esta película se mantenga fresca. Es muy ñoña, lo confieso, pero si te dejas atrapar por ella, aún llega a emocionarte, aunque seas consciente que lo que estás viendo es fruto de una historia hollywoodense y que si rascas un poco no hay nada y que la historia es realmente un cuento de hadas.
Esta película me sonaba mucho su historia, y es que había visto el remake que se hizo bastante después por Bette Davis.
Una película emocionante donde aflora mucha empatía y mucho amor a todos los protagonistas, porque cada uno tiene su encanto incluido el gruñón.
Por donde quiera mirársele, se llega siempre a la misma conclusión: DAMA POR UN DÍA es, totalmente, un cuento de hadas. Damon Runyon, autor del cuento original Madame la Gimp, Robert Riskin, el guionista que hizo la adaptación cinematográfica, y Frank Capra, el privilegiado director a quien correspondió la realización de la película, fueron tres de los más grandes – ¡y fantásticos! – soñadores que haya podido dar la América del norte. Ellos creían en el valor de cada ser humano, confiaban en su grandeza oculta aún en los caminos más confusos, y sabían, que los ángeles que Dios elige, no siempre vienen arropados con elegantes y pulcras apariencias.
Sí, DAMA POR UN DÍA es un cuento de hadas, pero la verdadera realidad, aquella que aún no logramos percibir y que sigue muy lejos de alcanzarse, es todavía mejor que el mejor cuento de hadas. Para quienes creemos en esto, los idealizados personajes de aquellos tres amigos, no son ilusiones, son, diríamos, reconocidas excepciones y comunes personalidades a futuro. ¡Claro! Debe haber muchísima gente que no admite que ha tenido un ángel en su vida, pero es que a veces necesitamos un buen tiempo para caer en la cuenta de que también los hemos tenido.
Apple Annie, una modesta anciana vendedora de manzanas, fue un ángel para el gánster Dave the Dude. Le trajo buena suerte durante muchos años, y ahora, Dave the Dude será un ángel para Apple Annie, pues hará lo imposible para convertirla, por un día, en una dama a fin de que pueda realizarse el sueño de su hija. Annie misma, y cada personaje que gira a su alrededor, estará haciendo lo imposible, lo que jamás imaginó que haría, pero que ahora resulta tan fácil como quererlo. Y así, el universo se sale con la suya, y la grandeza que hay en el más modesto de los hombres, resalta imponente para reafirmar, por enésima vez, que la divinidad está en todos y cada uno de nosotros.
Un maravilloso reparto asume con profunda entereza cada rol que se entrelaza en este bellísimo cuento cinematográfico. May Robson exuda humildad y dignidad. Guy Kibbee está tan bien dotado para el billar, como para ser el más afectuoso marido ficticio. Glenda Farrell trasciende el simple ser la mujer-cantante del gánster, para prodigarse en esfuerzos que hagan posible el anhelo de Apple Annie. Cada uno está en lo suyo, creando un entramado perfecto que dará certeza al inmenso orgullo de ser actores y muy especiales seres humanos.
Una notable secuela se haría al año siguiente con el título Lady by choice de David Burton, protagonizada por May Robson junto a Carole Lombard, siendo ésta una cantante que la convertirá en su dama. Y, en 1961, con el título Un gángster para un milagro, Frank Capra se despedirá del cine, colmando de magia, color y plenitud, este gran cuento que es, para mi, de lo mejor que haya podido ver en la vida.