Buffet Froid
Sinopsis de la película
Comedia negra sobre la soledad y la deshumanización del mundo actual que narra las peripecias de tres hombres: Alphonse Tram, un joven desempleado, su vecino, el policía Morvandieu, y el asesino de la mujer de Alphonse.
Detalles de la película
- Titulo Original: Buffet Froid
- Año: 1979
- Duración: 95
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Opinión de la crítica
Película
6.5
59 valoraciones en total
Estamos ante un verdadero monumento al humor negro, al más puro estilo Andre Breton (metáforas y existencialismo para dar y tomar), esta breve y sucinta descripción hace enderezar las orejas a cualquier hijo de vecino familiarizado con los escritos del genial autor francés, que hayan disfrutado con esa Antología del humor negro en la que subvertía y daba la vuelta a base de humor surrealista y absurdo, a nada más y nada menos que relatos de Poe, Jonathan Swift, Kafka, Sade y un extenso surtido de referencias literarias, autor y estilo que si te llega te convierte en un rendido admirador, y si no es así seguramente renegaras de él y lo consideraras estúpido y pretencioso.
Si ahora les digo que lo aquí subvertido y tratado de la forma anteriormente reseñada, es un argumento de canónico policíaco al uso (de esos tratados por Claude Chabrol, sazonado con toques polar en su tramo final, añadiría por centrar mas la definición), en el que tenemos a un asesino que se presenta en casa del parado y también probable asesino, marido (Gerard Depardeau) de la víctima como tal, es acogido amistosamente e invitado a hurgar en la intimidad de la difunta (ropa intima, detalles escabrosos y demás) y acaba compartiendo de forma también amigable cena y tertulia con un vecino inspector de policía (Bertrand Blier, padre del director de la película), probablemente los dedos se le harán huéspedes, se la enchufaran más pronto que tarde y harán proselitismo de ella entre conocidos y amigos, tal como esa enciclopedia de este tipo de joyitas llamado Vozidar hace de vez en cuando con el que esto escribe ( Si no la has visto, ya tardas, es la joya de la corona de la filmografía del irregular Bertrand Blier ).
Escrita y dirigida por Bertrand Blier (un tipo del que tan solo había visto aquella Los Rompepelotas 1974 , más que por interés en su cine, por aquello del regocijo que suponía en la España tardofranquista para un tierno infante, acceder a un desnudo femenino en pantalla grande y a todo color), estamos además ante algo muy entretenido y descacharradamente divertido, preñado de principio a fin de diálogos y situaciones en la línea de la muestra apuntada en el anterior párrafo, protagonizada por un brillante surtido de actores franceses, que debido a la seriedad que imprimen a sus personajes en tan insólitas y absurdas situaciones, te hacen disfrutar como un marrano en un charco con ese continuo festival surrealista que no decae en ningún momento de su ajustado metraje (88 minutos) y que como guinda cuenta con una joven y guapísima Carole Bouquet cerrando la historia.
Creo que las críticas varían según el contexto en que la película es vista, sobre todo en películas como Buffet Frío, de la que leí reiteradas veces que se trataba de una película de asesinatos y humor negro.
Y no voy a plantear lo contrario, pero mientras la veía me hacía sentir que no necesariamente estaba ante una película de humor, de absurdo, de incoherencia… Sino que estaba ante una película de crítica social, que nos muestra cómo es la realidad, exagerada al punto máximo en que nos resulta absurda. Pero con absurda no leamos: no creíble , porque nos estaremos engañando.
En una realidad (y hablo de la mía al menos) donde los asesinos asesinan, donde las autoridades legitiman esos asesinatos, donde las mujeres son objetos de belleza y de descarga sexual… ¿Acaso estamos tan lejos de lo que plantea Bertrand Blier en su película? A mi parecer no. El planteo artístico sin embargo, teatraliza los espacios, tal vez para que no nos sumerjamos tan profundamente en la autocrítica, para mostrarnos los sucesos como integrantes de un show incoherente, cómico y que así, una vez más, no seamos los culpables de nada, porque todo está bien como está, un velo de colores brillantes nos cega rápidamente, es solo una película.