Ballad From Tibet
Sinopsis de la película
Ballad From Tibet es la historia de un grupo de niños tibetanos que se embarcan en una odisea por distintas razones. Thumpten, con la visión parcial de un ojo y el otro ojo completamente disfuncional, quiere ver el mundo antes de que su vida se vuelva completamente oscura. Droma, una preciosa chica tejedora, quiere demostrarle a su abuela que es algo más que una simple tejedora presentándose en un programa de televisión. Sonam, un masajista ciego, está harto de su aburrido trabajo. Kalsang, el menor de ellos, sigue a los demás porque suena terriblemente divertido. Con la ayuda de una familia nómada, una flota de motoristas y un productor de televisión, el grupo se dirige a la metrópolis de Shenzhen. Su meta es cantar en televisión para alcanzar una gran audiencia.
Detalles de la película
- Titulo Original: Tian Lai Meng Xiangaka
- Año: 2017
- Duración: 84
Opciones de descarga disponibles
Si quieres puedes descargar una copia de esta película en formato HD y 4K. Seguidamente te mostramos un listado de posibilidades de descarga activas:
Es la primera película que veo del cineasta asiático Zhang Wei, una feel good movie, que viene recomendada por el Centro Internacional para la Creativitat Audiovisual de la UNESCO y que, después de una introducción para presentar los personajes, se centra en el viaje lleno de aventuras y peligros de 4 tibetanos que quieren llegar hasta Shenzhen para cumplir su sueño. La película es sencilla, es accesible para el público medio, y aprovecha la falta de visión de los protagonistas para que lograr que los espectadores empaticen con ellos, y en ese aspecto me recuerda bastante a Yomeddine ( 2018 ) , estrenada hace una semana, y a las películas sobre personajes con una discapacidad ( en este caso visual ) que emprenden un viaje para cumplir su sueño.
La película comienza bastante bien, y esas escenas en la localidad en donde vive Thupten es lo más interesante, logrando presentar bastante bien al personaje protagonista, a su entorno, sus inquietudes, y además hay un buen trabajo de dirección artística que se va perdiendo con el paso de los minutos, una vez que se inicia el viaje, con la introducción de elementos de humor y un espíritu aventurero con los que no conecté.
Con una música típica del cine asiático no de acción que encaja bien en la historia, pero que resulta bastante monótona, y con dos aspectos destacados, el diseño de vestuario y la belleza de los paisajes que recorren Thupten, Sonam, Droma y Kalsang en motocarro, y con unos títulos de crédito finales en donde vemos imágenes de los personajes reales, teniendo en cuenta que está basada en una historia de 2010. Puede tener su público y es ideal para pasar un rato agradable y desconectar del los problemas en una sala de cine.
LO MEJOR: Película sencilla y fácil de recomendar. El diseño de vestuario.
LO PEOR: La historia no me emociona como otras películas de temática similar.
Pueden leer esta crítica con imágenes y contenidos adicionales en: http://www.filmdreams.net
Como sucede en medio mundo, los reality show de música pegan fuerte en China. En concreto, el programa China’s Got Talent fue capaz de reunir a centenares de millones de espectadores frente a la TV. Para evadirse de la rutina, pocas cosas hay mejores que escuchar música, esta circunstancia, combinada con el interés que siempre despierta el hecho de contemplar la aparición de nuevos talentos, amén del aroma competitivo que intentan desprender esta clase de shows, pueden ser los factores que justifiquen semejante éxito. La realidad es que por la pantalla desfilan personajes de todo tipo, desde voces hermosas hasta simples personas envueltas y presentadas como un producto de marketing.
Precisamente China’s Got Talent es el programa que despierta la ilusión de un grupo de niños ciegos que residen en el Tíbet. Su pasión por la música y otras razones personales impulsan su deseo de acudir al show y presentarse ante el país más poblado del mundo. El desafío es triple, eso sí: la ceguera, la oposición de su profesor y el hecho de que Shenzhen, región donde se celebra el concurso, se encuentra en la otra punta de la nación. Nada de eso impide, sin embargo, que cuatro niños se armen de ilusión y confianza y, con solo un ojo sano de los ocho que emprenden el camino, traten de guiar sus pasos hacia un esperanzador destino.
La historia real de esta curiosa peregrinación se narra en Ballad From Tibet, película china dirigida por Zhang Wei. Como muchos otros niños ciegos del país, el cuarteto formado por Thumpten, Droma, Sonam y Kalsang deleita sus oídos escuchando a las voces más dulces que pasan por el programa. Esta secuencia es la que abre el film y, a la postre, se podrá considerar como una de las más logradas, tanto por la hermosa canción que suena de fondo como, especialmente, por ser capaz de resumirnos la esencia de la película y de sus protagonistas en apenas unos instantes.
Desde estos primeros compases, queda claro que la obra de Wei pretende desprender un aroma familiar, fruto de su combinación de esperanza, humor, épica y lección de vida. Ballad From Tibet no engaña a nadie, quiere narrar la historia de estos chavales desde el punto de vista de que nada, ni siquiera la falta de visión, puede suponer una barrera para nuestros sueños. Objetivo un tanto empalagoso en su concepción pero que, en la práctica, no llega a superar las dosis de azúcar toleradas. Más al contrario, los momentos emotivos son lo mejor que tiene la película y alcanzan su punto culminante en las escenas finales de la misma. Es en la infantiloide parte humorística y en una dosis de épica no del todo bien suministrada donde el film flojea más. Quizá por pretender elaborar un trabajo con ideas demasiado globales, quizá por un exceso de pasión a la hora de reflejar la odisea de los niños, Ballad From Tibet decepciona en su parte más importante, la que alimenta su espíritu de road movie, dejando lo mejor para el inicio y el final de la misma.
El fin no justifica los medios en muchos casos. En lo que se refiere a Ballad From Tibet, sí existen fundamentos para desechar la anterior idea y pensar que el objetivo de relatar la importancia de esta historia real puede más que la manera en la que se traslade al cine, pero no por ello existe la necesidad de engrandecer al film más de lo que en realidad es. Se trata de una historia bonita, con escenas muy emotivas y que emite varios mensajes positivos, pero que peca de una gran falta de profundidad en su desarrollo, aspecto probablemente motivado por esa voluntad familiar a la que hacíamos referencia con anterioridad.
Álvaro Casanova – @Alvcasanova
Crítica para @CineMaldito