Asalto al tren Pelham 123
Sinopsis de la película
Walter Garber (Denzel Washington), supervisor del Metro de Nueva York, tiene que afrontar el caos provocado por el secuestro de un vagón por una banda armada, cuyo cabecilla es Ryder (John Travolta). La banda amenaza con ejecutar a los pasajeros si, en el plazo de una hora, no se les paga un alto rescate. Garber utiliza sus conocimientos del sistema subterráneo para intentar burlar a Ryder y salvar a los rehenes. Pero hay un enigma que Garber no puede resolver: en el caso de que los criminales obtuvieran el dinero, ¿cómo conseguirían escapar? Remake de Pelham uno, dos, tres (1974), thriller protagonizado por Walter Matthau.
Detalles de la película
- Titulo Original: The Taking of Pelham 123 aka
- Año: 2009
- Duración: 106
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Opinión de la crítica
5.6
86 valoraciones en total
a) Conoces a Tony Scott: sí, claro, porque es el hermano torpe de Ridley. Tony Scott entiende de acción, y la maneja bastante bien. Pelham 123 tiene momentos realmente emocionantes, sobre todo en la primera parte de la cinta. En la segunda, Tony, que se deja llevar por su espíritu americanista y efectista, se sale del tiesto con bastantes concesiones surrealistas a un argumento que su hermano probablemente no habría aprobado.
b) No conoces a Tony Scott: es una película de acción con la que pasar el rato, reirse un poco y tomar palomitas.
Sin entrar en comparaciones con su antecesora, Pelham 123, es una peli más, con muchos efectos especiales y héroes de andar por casa.
Un grupo de hombres armados secuestran un vagón de metro lleno de gente, exigen un rescate de 10 millones de dólares, si no, la vida de los rehenes correrá peligro. El encargado de llevar la negociación con ellos, será un funcionario degradado por su posible implicación en un soborno.
Acción trepidante por los bajos fondos de Nueva York, tiros, helicópteros, carreras de coches, motos a toda velocidad, pero escasa credibilidad. Más de lo mismo.
Personajes demasiado típicos: el bueno es muy bueno (a pesar de todo) el malo es muy malo, y el resto juegan papeles secundarios que ni siquiera han sido bien definidos.
Para pasar un rato y desconectar.
Lo cierto es que no puede culparse a Scott de que Asalto el tren Pelham 123 sea, en realidad, una tontería con la que perder poco más de hora y media de tu tiempo, ni tampoco a los actores, ni al montador del film, ni a los responsables de los efectos especiales. Lo que nos encontramos aquí es, ni más ni menos, que el producto básico que ha ido ofreciendo el director a lo largo de los años, un thriller de acción que roza lo inverosímil y con unos personajes principales bastante ridículos, con la excepción de uno de ellos en concreto.
Siguiendo la historia de un terrorista que secuestra un tren (Travolta) y de un improvisado héroe (Washington) que debe frenarle, durante unos 100 minutos nos subimos a un tren sin paradas hacia el entretenimiento más libre de pretensión, que se sustenta en los tópicos y en el más difícil todavía para crear intriga mientras dura, llegando a una recta final que, como viene siendo habitual desde hace unos años, echa por tierra todo lo que se había conseguido previamente con el fantástico personaje de Travolta. Tampoco ayuda el que se vea arropado además por clichés con patas en forma de personajes secundarios, un reparto echado a perder, con Denzel sin ubicarse en ningún momento o unos absurdos ¿cameos? de Turturro, Gandolfini y especialmente Guzmán.
Al final del trayecto queda la impresión de que con este guión y otro director podría haber salido algo verdaderamente bueno, no simple evasión de usar y tirar que ni deja escenas memorables ni tan siquiera es capaz de ser realmente interesante. Pero bueno, nadie se espera que Scott pueda volver a hacer algo digno de verdad a estas alturas del partido… ¿o sí?
Un secuestro con rescate de 10 millones de dólares no puede (es imposible) provocar en pocas horas un desplome de la bolsa de Nueva York de 7 por ciento. Por favor, …
Es, cuando menos, infantil.
Ver en Wikipedia – Bolsa de Nueva York, lo siguiente:
La Bolsa de Nueva York cuenta con un volumen anual de transacciones de 21 billones de dólares, incluyendo los 7,1 billones de compañías no estadounidenses.
Dividir 21 billones entre los dias laborables del año y obtendremos un volumen medio diario de unos 80000 millones de dólares. ¿Qué representa 10 frente a 80000?…
Por cierto, la Bolsa de Madrid negocia diariamente unos 4500 millones de euros, y tampoco caería.
Que el cine nos sirva para aprender.
Este remake es un claro ejemplo de muchas de las producciones que Hoollywood realiza año tras año. Una historia que tiene como baza dos protagonistas carismáticos (que en esta película cobran un suculento cheque), un director de acción competente (y bastante repetitivo), y una calidad técnica intachable. ¿Pero es suficiente?
La película le falta alma por todas partes, y le sobra profesionalismo. Tenemos al John Travolta de BROKEN NARROW y SWORDFISH, no os engañaré, es el mismo personaje, pero Travolta tiene la suficiente calidad para que nos guste verlo hacer de malvado las veces que quiera y sigamos tragando. Lo de Denzel es más complicado, ya que su presencia impide que nos creamos que es un tipo normal en una situación extraordinaria, cumple sin más, pero notamos cierta falta de pasión en el material en el que trabaja (algo que le pasa al resto del equipo).Por lo menos la cinta es honesta, y en ningún momento pretende ser otra cosa que no es. Es acción, entretenimiento, grandes actores, mucha pasta, pero todo eso sin forzar mucho la máquina no sea que el tren descarrile, y es justo ahí donde reside su mayor defecto, no arriesgar.
Es como la típica película que te quedas a ver un domingo por la tarde en la tele, no cambiará tu vida, pero tampoco te arrepentirás de verla. Cumple sin más, pero la película pedía a gritos más riesgos, más tensión, que en cierta manera se lleva de forma correcta hasta la mitad de la cinta, para precipitarse todo en su último tercio.
Para incondicionales de tito John y de tito Denzel, y poco más…