27 vestidos
Sinopsis de la película
Jane (Katherine Heigl), la eterna dama de honor -lo ha sido hasta 27 veces- pero nunca la novia, debe hacer frente a su peor pesadilla cuando su hermana (Malin Akerman) se compromete con el hombre de sus sueños. A Jane le encanta acudir a bodas y ayudar a la novia en su día más especial. Está enamorada de su jefe (Edward Burns), pero el día que se decide a confesarle su amor, su atractiva y caprichosa hermana, a la que siempre ha cuidado, entra en escena.
Detalles de la película
- Titulo Original: 27 Dresses
- Año: 2008
- Duración: 107
Opciones de descarga disponibles
Si deseas puedes descargarte una copia la película en formato HD y 4K. A continuación te citamos un listado de opciones de descarga directa disponibles:
Opinión de la crítica
Película
4.9
80 valoraciones en total
Cierto es que éste tipo de películas son muy socorridas para las empresas cinematográficas, pues van dirigidas a un público determinado, y amplio de nuestra sociedad.
Yo, forzado por mi mujer, como el chico de la Naranja Mecánica, visualicé la película sin ningún tipo de comentario peyorativo, hasta su final. Luego, cuando acabaron los títulos de crédito, la observé a los ojos, y no dije nada. Su mirada corroboraba mi opinión (Gracias a Dios)
El alfabeto español tiene 27 letras
Americanada
Bobada
Comedia?
Derroche
Estupidez
Felicidades
Gansada
Horterada
Imbecilidad
Jamona
Katherine
Lacitos
Mimosa
Novia
Ñoña
Otra
Parida
Qué
Robo
Sosa
Tonta
Urticaria
Vestiditos
W.C.
XD
Yeah!
ZzzTop
La gran virtud que atesora este truño infecto es que consigue confirmar que el horror humano no tiene límites. Eso y que todo, incluida la comedia romántica, es susceptible de empeorar hasta extremos insospechados y que van más allá de la comprensión racional.
Tanto que se habló de la huelga de guionistas, pero por Diós!!! Si hasta mientras cago podría escribir algo mejor, o al menos que no fuera tan bochornosamente predecible. Por no hablar de ese guión trufado de los tópicos más rancios que se recuerdan, y que se sustenta fusilando escenas de otros films.
Y que decir de la galeria de personajes, todo un prodigio de construcción psicológica. El desengañado del amor que va cínico, la frustada que se quiere casar, el jefe comprensivo y bueno, la mejor amiga de la protagonista yendo de graciosilla todo el rato y la modelo que más tonta, más rubia y más arpía no podía ser pero que, como no, esconde un corazón de oro.
Papeles que además vienen acompañados de unas interpretaciones absolutamente desquiciantes. Como de Edward Burns es mejor no hablar pues destacaremos a James Mardsen que está tan odioso como siempre pero esta vez consigue no hacerlo poniendo cara de amargado perpetuo y nos regala un catálogo interminable de muecas y sonrisa profident a ver si consigue parecer atractivo o algo. Luego está la que hace de mejor amiga de la prota que se limita a parecer una Joan Cusack de saldo. Pero naturalmente la reina de la función tiene que ser Katherine Heigl repitiendo su mismo papel de bobalicona romanticona y recreandose en tics de histérica copiados de la peor Meg Ryan.
Pero lo peor no es eso, no. Lo peor es el mensaje absolutamente carrinclón y baboso, proponiendo que no puede haber otro sueño ni mayor aspiración para una chica de bien que casarse. Y no de cualquier manera por supuesto. Tiene que ser de la forma más kitsch y más ostentosa posible y así poder sentirse realizada ya de por vida dejando atrás polleces como realizarse profesionalmente u otras nimiedades que a nadie le importan. En fín una manera como cualquier otra de intentar convencer al personal femenino de que tiren su vida por la borda y que se dejan de querer trabajar y se dediquen a cosas serias e importantes como casarse, ser buena esposa y tener siempre la comida, o lo que sea bien preparadita para su maridito del alma. Sín duda una película que le hubiera encantado a la sección femenina de Pilar Primo de Rivera. Viva el siglo XXI amigos!!
Lo mejor: Que como laxante funciona de maravilla.
Lo peor: Todo.
Habrá quien consideré excesivo otorgar una puntuación de siete (lo que significa Buena en Filmaffinity) a una película de las pretensiones de 27 vestidos, pero para mí es sin duda una buena película, en mi opinión hay comedias románticas (como la que nos compete) que son mejores como film que algunas obras de Brian de Palma o incluso Alfred Hitchcock. Quiero decir pues que para disfrutar de 27 vestidos es necesario liberarse de los prejuicios hacia este género considerado por muchos como menor (yo creo que no lo es).
Es cierto que la película responde de manera exacta a la estructura habitual de la comedia romántica de Hollywood (como La boda de mi mejor amigo por ejemplo), esto es:
-Chica esta secretamente enamorada de chico y chico no lo sabe
-Aparece un segundo chico y una segunda chica (todos relacionados)
-Se suceden las interacciones (con situaciones cómicas y dramáticas predominando las primeras)
-La protagonista tiene una amiga muy chistosa y ligona
-La protagonista suele tropezarse con divertido resultado
-Hay un niño precoz y graciosete
-Hay un montón de bodas de por medio
-En algún momento se emborrachan y cantan
-Al final todo se estropea y luego… ya sabeis que pasa
Pero es que en el resto de géneros también existen tópicos aplicables, y no por eso las películas que los siguen son malas ni mucho menos (por ejemplo El orfanato sigue las premisas del cine de terror/suspense al dedillo y es una buena película), diré pues que 27 vestidos se sigue con una sonrisa en la boca durante todo el metraje, apareciendo la carcajada en algunos momentos. Los diálogos son bastante más ingeniosos de lo esperable y el ritmo de la historia es perfecto (no sobra nada y tiene una duración correcta).
En cuanto a las interpretaciones parece que asistimos a una nueva hornada de talentos para la comedia romántica (contando a Anne Hathaway): a Katherine Heigl no la había visto antes (ya que no veo Anatomía de Grey) y lo hace bastante bien por lo que creo que hará más películas en esta línea. Edward Burns resulta un poco inexpresivo y de Malin Akerman uno sólo puede decir que es un pibón (no me negareis cuando veais 27 vestidos que estos dos personajes parecen pensados para Hugh Grant y Cameron Diaz). El mejor de todos es James Marsden, un tío guapete, simpático y que hace que cojas cariño al personaje (tiene frases muy acertadas).
La banda sonora es adecuada, y el final redondo (como debe ser en una película de este tipo). Os recomiendo verla, pasareis un rato muy agradable (a pesar de lo caro que es el cine), a mí me ha gustado mucho. Y además yo he encontrado mensaje: la protagonista siempre era dama de honor y nunca novia, siempre daba sin esperar recibir. Pero todos necesitamos nuestro momento para nuestra propia felicidad (aprender a decir no y disfrutar la vida). Como cantaba David Bowie We can be heroes- just for one day …
Como los vestidos, es de uso único para una mayoría del público, no les daría más, lo hacen casi hasta por compromiso, pero puede que con todo no guarden un mal recuerdo de la boda. Otros ni eso, intentarían huir ante la posibilidad de ser dama de honor como alma que lleva el diablo. Para una minoría, sin ánimo de desprecio ni intención de ridiculizarles en la plaza pública, será una grata experiencia que repetirían muchas veces, ¡hasta 27!
Yo me englobo en la mayoría, para no desentonar en el banquete de boda. La he disfrutado, ha habido momentos buenos, y he conocido gente maja, pero no lo repetiría. Y es que sabes en todo momento qué va a pasar después, y aunque tenga su gracia no sobrevivirías a los mismos chistes del gracioso de la fiesta. Eso sí, en el momento, la alegría generalizada ha conseguido empaparme.
Lo mejor seguramente la novia, así como su vestido, hecho plenamente con caligrafía, pese a no ser una idea del todo novedosa, es apropiado, y tampoco es que se haya abusado de él tan a menudo como para despreciarlo, siendo muy correcto.
Me ha sorprendido, no debo decir que gratamente, la orquesta. Y es que ahora repasando la invitación veo que ha sido Randy Edelman, y apenas lo he notado, tan sólo han destacado las canciones… una pena, fue un maestro en aquella otra boda, tan curiosa, entre un dragón y su cazador.
Malcolm Doyle