X-Men
Sinopsis de la película
En un futuro cercano, la humanidad comienza a ver aparecer una nueva raza, los mutantes. Dotados de extraños y variados poderes, están agrupados en dos bandos: los que abogan por la integración y el entendimiento con la humanidad, encabezados por el doctor Charles Xavier, y los que buscan el enfrentamiento con una raza que consideran inferior y que les odia, dirigidos por Magnus, alias Magneto, un peligroso mutante con extraordinarios poderes.
Detalles de la película
- Titulo Original: X-Men
- Año: 2000
- Duración: 96
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Opinión de la crítica
Película
6.5
41 valoraciones en total
1998 fue un año importante para el cine norteamericano comercial. La aparición de la ultrataquillera (y notable) Blade de Stephen Norrington abría una veda que seguiría siendo explorada en años venideros. Redefinía por completo el cine de superhéroes, alejándolo del sonrojante modelo anterior y marcaba un camino a seguir, imperfecto, abierto a una evolución. Sólo dos años más tarde, los mutantes más conocidos de la Marvel daban el salto a la gran pantalla con X-Men (Bryan Singer, 2000) y se confirmaban dos cosas: el realizador no había tenido un golpe de suerte con su Usual Suspects (1995) y las adaptaciones comiqueras vivían un nuevo renacer.
El mérito de X-Men fue reunir aspectos a priori secundarios (en el género) dentro de una misma carcasa, abandonar (exclusivamente) la idea de amasar ingentes cantidades de dinero y preocuparse por la historia, los personajes. Crear drama, no sólo acción. Singer, gracias a un modélico guión escrito por –entre otros- David Hayter y Josh Whedon, lo conseguía desde la fantástica primera escena que remitía al holocausto, hasta la última. Apoyándose en un reparto en estado de gracia y centrando la atención en Lobezno (un carismático Hugh Jackman), Pícara (Anna Paquin) y el duelo entre Xavier/Magneto (Stewart/McKellen), lo que se consiguió con X-Men sólo puede valorarse en su justa medida con ‘el tiempo’, como aliado. Creó un modelo, una forma de abordar este tipo de cine, que aún hoy (once años después de su estreno) se mantiene fresco. Para qué hablar de sus solventes efectos visuales o de grandes escenas como la de la estación de trenes, sobran las palabras. O de su fuerza discursiva al intentar contarnos la historia de todos estos personajes desde un punto de vista humano, sin prostituir sus habilidades. La acción y la política se daban la mano, dejando un poso extraño (tampoco muy profundo, eso sí) pero realmente fresco.
X-Men es buen cine comercial que mejoraría, y cómo, en la segunda entrega de la saga dirigida por el propio Singer y que se mantiene, a día de hoy, como el díptico cinematográfico que mejor captura la esencia de la creación de Stan Lee en el celuloide.
Así os lo digo, esta película me parece casi perfecta, no digo perfecta porque la perfección es inalcanzable, pero para mí Singer casi lo logra con este peliculón.
Hay cuatro películas de superhéroes que a mí me apasionan mucho:
-Superman (1978) de Richard Donner
-Batman (1989) de Tim Burton
-X-Men (2000) de Bryan Singer
-Spider-Man (2002) de Sam Raimi
De esas cuatro esta me parece la más seria, adulta, profunda y madura. Las otras me encantan, pero en esta hay algo que no podemos ver en las demás.
La película se aleja un poco de los cómics que adapta, pero su esencia permanece intacta. La cinta nos relata como parte de la especie humana ha evolucionado hasta un punto en que existen personas llamadas mutantes, gente con habilidades especiales, que se convierten en el temor del resto de los demás. Los humanos ahora sólo pueden ahora hacer dos cosas, temer a la mayoría de los mutantes y confiar en unos pocos.
Todos los personajes tienen un drama personal interno (mayor o menor dependiendo del personaje) y hay una evolución en muchos de ellos.
La historia es muy redonda a pesar de que va claramente destinada a dar pie a una o más secuelas. X-Men no sólo trata de superhéroes contra supervillanos, es una historia que habla de la soledad de cada personaje. No es solo una sucesión de escenas de acción con un poco de drama, es un drama serio que incluye escenas de acción.
Todos se sienten solos por tener que vivir en un mundo que no les acepta y cada uno expresa su soledad de forma distinta. Magneto lo hace considerando inferiores a los seres humanos. Él fue tomado por un monstruo por la especie humana y ahora solo tiene sentimientos de odio hacia las personas.
Logan expresa su soledad (Y otros dramas internos) con una frustración constante hacia todo lo que le rodea, todos son para él tan monstruos como es él para los demás, es un personaje extremadamente valiente, pero vive rodeado de miedos y dudas sobre un oscuro pasado que no puede recordar.
Más personajes expresan sus trágicos sentimientos a lo largo de la cinta, pero para mí la historia más triste es la de Pícara (También conocida como Rogue), una chica de unos 17 años que no puede tocar a nadie porque cada vez que lo hace, alguien sale herido.
Las situaciones de los personajes, la banda sonora, el tono serio del film y la dirección de Bryan Singer hacen de X-Men una Obra Maestra que considero bastante incomprendida. Aquí en filmaffinity solo tiene una nota de 6,5 sobre 10. Pero bueno, en Rotten Tomatoes tiene un porcentaje de 82% sobre 100%.
Entiendo que a mucha gente no le haya gustado porque se aleja un poco de los cómics y porque algunos efectos visuales han quedado un poco anticuados, pero me parece que merece más reconocimiento del que se le ha dado hasta ahora.
Sus secuelas y precuelas han sido más aceptadas por el público.
Podría contar muchísimas más cosas sobre esta maravillosa película que yo considero la gran Obra Maestra de Bryan Singer.
Valoración final: 10 de 10.
Aceptable puesta en escena del famoso comic de la Marvel. Esta editorial de comics siempre se caracterizó por humanizar a los héroes que poblaban sus viñetas, muy lejos de estupideces DC como Superman o Batman, auténticos truños superheróicos poseedores de éxito, riqueza y glamour, algo que Marvel suprimió de sus primeras creaciones: Spiderman, Hulk, Daredevil… Los X-Men explotan el miedo de la sociedad a lo desconocido. Y les va bien. El miedo tiene adeptos en todos los lugares del mundo, sobre todo entre los pueblos más religiosos.
La película, sin ser una gran paja, ofrece aspectos interesantes en lo relativo al comic, y técnicamente supera con altura lo que se espera de personajes que pueden reventarte el culo con un rayo. La utilización del sonido, exceptuando un par de sustos, es rico en detalles y se convierte en una de las bazas principales del film. La historia mutante, aunque comprimida, está relativamente bien contada al profano y la acción no satura el film dejando espacio a los diálogos y a los valores descriptivos. Interesante.
En un futuro no muy lejano, la evolución de la especie, en términos darwinistas, ha seguido su camino inquebrantable: los humanos han dado paso a los mutantes. Éstos, sin embargo, no son bien vistos por la sociedad, la cual reclama mayor protección y seguridad frente a los mismos, exigiendo su identificación, registro y control obligatorio. Son malos tiempos para los mutantes, otra minoría marginada, temerosa de sufrir las inclemencias de la racionalidad humana. Pero, ¿cómo reaccionarán frente al potencial ataque humano?
El Dr. Xavier es un mutante benévolo, lleno de esperanza y calidez. Desde la escuela por él inaugurada con el fin de dar cobijo a esos chicos desamparados con extraños poderes, trabaja para aleccionarlos y enseñarles una importante doctrina: el respeto hacia los demás. Pero no acaba ahí su misión, pues sabe que su antiguo amigo, ahora enemigo íntimo, el famoso Magneto, está del lado de las armas, con las miras puestas en golpear primero a la especie humana, intentando autoproclamarse Dios de la Humanidad, al tiempo que inquisidor, pues sus miras no van más allá de la reconversión a mutante de todo el planeta.
Lobezno, Tormenta, Cíclope y el Dr.Xavier. Ellos son los buenos. Dientes de Sable, Mística, Sapo y Magneto. Ellos, los malos. Ahora, una batalla se avecina, un conflicto interno sobre cómo digerir desde el colectivo mutante la agresividad humana. Y todo, con Pícara como clave de bóveda para los planes de unos y otros.
Grandiosa cinta que bebe de esa inagotable fuente llamada Marvel. La adaptación corre a cargo de un notable cineasta, Bryan Singer, quien amparándose en unos espectaculares efectos especiales, una potente historia, una buena fotografía y un reparto con mucha cara conocida, sabe narrar con garra y tensión toda la vorágine fantasiosa que mueve a esta épica y adrenalínica batalla. Tiene el privilegio de ser una de las mejores adaptaciones existentes por la vía cómic-cine. Forma parte del Club Personal.
Si eres aficionado a los comics como yo, te gustará. Sobre todo, porque cualquiera que oyera al principio que se iba a hacer X-Men, se esperaría una mala adaptación de un comic, pero la cosa ha salido muy, pero que muy bien.
Un gran Hugh Jackman haciendo de Lobezno, que es lo mejor de la película. Una buena historia, aventura, efectos especiales…y con muy buenos actores!
El director maneja muy bien a todo el elenco, dándole claro protagonismo a Lobezno, pero donde todos los demás cumplen a la perfección.
Lo dicho, disfrutenla con unas palomitas