Vivo en el recuerdo
Sinopsis de la película
El protagonista es el editor de un periódico de una ciudad industrial al que su resentida mujer empuja a la carrera política, mientras que él prefiere concentrarse en la defensa de los derechos de los trabajadores, y con el tiempo las cosas tendrán complicaciones sentimentales.
Detalles de la película
- Titulo Original: So Well Remembered
- Año: 1947
- Duración: 114
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Opinión de la crítica
Película
6.5
30 valoraciones en total
Cuando, John Burton era todavía el alcalde de Browdley y George Boswell aún era un simple concejal, al ver la manera como aquel se opuso a la postulación de Olivia Channing para el cargo de bibliotecaria, responsabilizándola y censurándola por los antecedentes de su padre, Boswell se opuso de inmediato a semejante censura, argumentando que los hijos no tienen por qué cargar con los errores de sus padres y que es indispensable valorar a cada ser humano por lo que individualmente es. Aportó luego las cualidades que poseía Olivia… y así, Boswell comenzó a ganarse el respeto de aquella clase política que parecía no ver más allá de sus narices.
Entonces, llegaría el momento de hacerse amigo de Olivia y así comenzaría una relación que le traería amor… felicidad… conflicto… y esa suerte de situaciones que suelen darse entre las personas que viven con intensidad y que resultan un tanto dispares. George es un hombre que anhela el bienestar del pueblo, ama la justicia y vive con modestia y dignidad. Y Olivia, es una mujer con ambiciones, marcada por el descrédito que le causó su padre y empeñada en permanecer allá en lo alto, en aquel palacio que le legó su abuelo, conocido como Stoneclough.
So well remembered fue una novela que, en su habitual estilo de profundo entendimiento humano, con lugar para amar y perdonar… para errar y redimirse… y haciendo que el hombre consiga proyectarse en su justo lugar aquí en la tierra, publicó el escritor inglés, James Hilton, en 1945. Hay en la novela un sentido alegato contra la ambición, pero quizás lo que más importaba a Hilton era dejar bien sentado que cada ser humano es uno y único, y como tal, solo puede ser juzgado por sus propias y personales acciones, al tiempo que hay que permitirle ser con sus particulares anhelos y su propia individualidad. Quedan aquí desmontados los juicios tendenciosos y el afán de manipulación que mantienen los padres sobre los hijos.
Pero la novela cayó en manos de John Paxton, guionista habituado a oscuras y violentas historias como Murder, my sweet, Cornered o Crossfire, que el mismo director del filme que nos ocupa, Edward Dmytryk, había llevado al cine con aceptable éxito… y aunque se ajustó a algunos hechos fundamentales de la novela y siguió muchos de sus diálogos, Paxton de pronto dio un fuerte giro a la historia… agudizó cosas que le parecieron bastante livianas… y convirtió la historia de Amor de Hilton, en un drama de traición, maldad sin límites y profundo desengaño.
Una vez más, se respira ese aire de condena que abundaba en el cine negro y que, en numerosos casos, no tenía otro aroma que el de la fría venganza. Y así, sentimos que, sin perder interés, el filme se viene a menos, pues sus personajes se tornan de un solo color y con un solo punto de vista, lo que está demostrado que bien poco existe entre la especie humana.
Inexplicablemente extraviado a los pocos días después de su estreno, VIVO EN EL RECUERDO reapareció en el año 2004, en algún lugar de Tennessee, EEUU. Y ahora vuelve a la luz… pero queda decir que no ha sido ninguna especial sorpresa. Para el recuerdo: La efectiva narración del mismo autor de la novela, las correctas actuaciones de John Mills, Trevor Howard y Martha Scott, y los primeros cameos de las posteriormente famosas hijas de Mills, Hayley y Juliet, quienes aparecen como Julie bebé y Julie de un año, respectivamente. Luego, Patricia Roc, la representaría como adolescente. El resto, es fácil de olvidar.
Título para Latinoamérica: UN DÍA INOLVIDABLE
Una buena película que pertenece a una época determinada, los años cuarenta, con unos valores determinados, una narrativa (proviene de una obra de James Hilton: Horizontes Perdidos .Goodby Mr. Chips ..) y un estilo igualmente contextuado en esa época. Un buen artesano que ha realizado films famosos y solventes se encarga de la realización que está muy por encima de lo habitual. Realiza el film en Inglaterra bajo un sistema de producción británico con todas las virtudes del cine de aquella época. Unos actores magníficos: John Mills y Trevor Howard que como siempre están perfectos. Ese mismo año rueda en USA uno de sus mejores films Encrucijada de Odios . Posteriormente declararía ante el Tribunal de Actividades Antiamericanas y delataría a compañeros de profesión.
No es Welles aunque las similitudes con los Ambersons, en cuanto al origen literario, le recuerdan y por otra parte hacía cinco años que Welles había rodado una de sus obras maestras , y seguro que Dmytryk la conocía.