Ven con papá
Sinopsis de la película
La vida de Norval (Elijah Wood) está siendo difícil. Mientras vive con su madre entra y sale de terapias de rehabilitación relacionadas con el alcohol sin rumbo aparente. Un día recibe una carta de su padre solicitando una visita y no se lo piensa dos veces: acude rápidamente a su casa, convencido de que reunirse con él llenará el vacío emocional que lleva sintiendo desde su adolescencia. Sin embargo, al cabo de poco tiempo Norval comienza a sentir que hay algo que no encaja en la actitud de su padre, un adictivo empedernido al alcohol. El joven muchacho pronto se da cuenta de que su soñada reunión familiar se ha convertido en un camino hacia una pesadilla.
Detalles de la película
- Titulo Original: Come to Daddy aka
- Año: 2019
- Duración: 93
Opciones de descarga disponibles
Si lo deseas puedes descargar una copia de esta película en formato HD y 4K. A continuación te añadimos un listado de posibilidades de descarga directa activas:
Opinión de la crítica
5.4
82 valoraciones en total
Una comedia de humor negro muy irregular, sobria por momentos, demasiado grotesca en otros, cuando meten el gore con el humor en general hay que saberlo manejar, esta por ratos lo hace bien y por otros se va a la mierda.
Atípica, cuesta empatizar con el protagonista aunque Elijah Wood le aporta cierto encanto y simpatía.
La primera parte es mejor que la segunda.
De mantener la sobriedad hubiera podido ser un gran trabajo, igual tiene algunas escenas muy hilarantes.
En ‘Come to Daddy’, ópera prima del canadiense Ant Timpson, Elijah Wood juega en casa. Actor de rostro extraño, ojos saltones y pequeña estatura, moldea su interpretación al ritmo impuesto por un guión con pronunciada tendencia a despendolarse. Habiendo tocado la gloria gracias al papel de Frodo Bolsón en la trilogía de ‘El Señor de los Anillos’, estamos ante un artista con personalidad. Hace lo que le pide el cuerpo, no se deja arrastrar por modas, ni urgencias para acaparar el foco mediático de antaño. En alguna ocasión ha reconocido su amor por España, lo que ha mostrado poniéndose a los órdenes de Alex de la Iglesia y Nacho Vigalondo. Aquí acepta el proyecto de un debutante, en una apuesta, cuanto menos arriesgada. Consigue brillar, aportando oficio y veracidad a un papel bastante exigente.
Timpson fusiona thriller y comedia negra, dando forma a una película que busca apartarse de los convencionalismos apelando al exceso. Wood da vida a un joven apocado que pasa de la treintena. Viaja a una apartada cabaña para reunirse con su padre, al que no ve desde que tenía cinco años. Su progenitor le ha escrito una carta con la finalidad de retomar la relación, clausurada por él mismo tras abandonar el núcleo familiar. La curiosidad inicial del hijo da paso al escepticismo, para desembocar en la perplejidad, conforme la actitud del padre se vuelve cada vez más extravagante.
‘Come to Daddy’ comienza como una cinta de suspense al uso, jugando con las verdaderas motivaciones de los personajes. Presenta a un protagonista inseguro, que ha vivido su particular caída a los infiernos por el alcohol. Desea causar buena impresión, que su padre, al fin y al cabo un desconocido, sienta orgullo por su vástago. Sin renunciar a determinadas trampas narrativas, Timpson se recrea en la tortura psicológica de Wood mediante escenas hilarantes, de humor negro inteligente.
En su tercio final, ‘Come to Daddy’ se desparrama. Es una pérdida de control acelerada, no la intuyes. Esta es su principal peculiaridad, para bien y para mal. Forma parte de su ADN. Sangrienta, brutal, escatológica, surrealista y con secundarios que parecen sacados del manicomio, estamos ante una propuesta que sabe reírse de sí misma. Una burla hacia determinadas relaciones sociales que me hace pasar un buen rato. Acabado el metraje, esbozo una sonrisa.
Escrito por Juan Pablo Martínez Corchano para https://rockandfilms.es/
Pero te puedes fiar de las comedias negras, cuando tienen espíritu festivo, deslenguado y se despendolan sin complejos.
Con algún cambio de tono que aperpleja un poco, la peli es un festín cargado de momentos hilarantes. Los actores lo bordan.
Mientras la mayoría de los nuevos cineastas que se arriman al terror con ínfulas de renovación se empeñan en convertirlo en algo pseudo-sesudo y aburridísimo (es la moda), Ant Timpson se la juega con este alocado y extraño debut tras la cámara y demuestra que todavía el cine de género bizarro y divertido es posible. Gracias tío, sigue así.
Cambia de género a la media hora, y es en ese momento cuando no entiendes nada, aunque lo visto anteriormente no es que te dejara muy satisfecho.
Durante los primeros minutos la complejidad de las personalidades padre hijo añaden interés por lo extremas. No se sostiene en el tiempo, y existen en ella multitud de anécdotas que sin ser aburridas, no entiendes como y por qué se ha llegado a donde se sitúa.
Me cansa profundamente repetirme, aunque procuro adjetivar de diferente manera para decir lo mismo. El cine de esta última década va girando sin rumbo, como una peonza alrededor de ella misma, abandonando lo mejor que tenía que era: CONTAR UNA HISTORIA.
Y hacerlo de una manera que se entendiese, aportando un guión elaborado con todos los ingredientes clásicos. En realidad siempre estamos viendo el mismo tipo de cine, y lo aceptamos… pero por favor, contárnoslo bien, no nos importa haberlo visto todo, seguimos queriendo historias idénticas que nos sabemos, pero narradas con buena trama, actuaciones brillantes y dirección acertada.
Trailer engañoso que solo sirve para ver 20 minutos de película que creemos que va a ir de algo que no va para hacer un giro argumental aburrido y lento con situaciones poco coherentes. El tono es extraño, no acaba de ser terror y me he sorprendido al leer en una crítica que era una comedia negra , porque nunca se me habría pasado por la cabeza, quizá eso explique lo absurdo de los diálogos de los policías el recepcionista del motel que están totalmente fuera de contexto y que gracia tampoco me han hecho, más bien pareciera que se estaban aburriendo de rodar y empezaran a decir chorradas…