Veinte años amaneciendo, que no es poco

Un comentario en «Veinte años amaneciendo, que no es poco»

1. Conocida hoy por todos (o, por lo menos, por la gran mayoría) como una de las más originales y rompedoras películas del cine español, Amanece, que no es Poco fue la confirmación del ingenio y el desparpajo tan particular del que estaba dotado José Luis Cuerda.
   
   Aunque incomprendida y crucificada por crítica y público en el momento de su estreno, décadas después se ha ganado el estatus de obra de culto.
   
   El director fue cimentando su propio estilo paulatinamente con títulos como Total , película para la televisión, o El Bosque Animado , y en ellos ya se hallaba la semilla de lo que más tarde sería Amanece, que no es Poco , la cual se acabaría convirtiendo en la segunda parte de una trilogía comenzada por Total y rematada con Así en el Cielo como en la Tierra . Básicamente, lo que hacía Cuerda en sus obras era coger los valores, figuras y comportamientos más tradicionales de la España profunda y ponerlos patas arriba usando la parodia y la sátira.
   
   Con Amanece, que no es Poco su dominio del absurdo y su capacidad para combinar crítica social y disparate alcanzaría límites insospechados, por mucho que el film careciese de un argumento narrativo. En efecto, la historia de cómo Teodoro y su padre Jimmy llegaban a ese pueblo perdido de la mano de Dios y escondido entre montañas tenía de todo menos coherencia y una estructura formal, pero, demonios, era divertida, y entre todas sus descabelladas escenas e impagables diálogos se escondían multitud de lecturas y mensajes.
   
   Pues como bien se dice en este documental escrito y dirigido por Gabriela Martín, ninguno de los miembros del equipo técnico y artístico se podía imaginar que años después de realizar el film, se iban a encontrar haciendo una entrevista sobre el mismo, ya considerado obra de culto y cuyo valor y legión de seguidores va en aumento. En Veinte años Amaneciendo, que no es Poco se nos cuentan interesantes detalles de la película que puso a Cuerda entre los más grandes cineastas nacionales.
   
   Nos paramos en los pueblos manchegos de Molinicos, Ayna y Liétor donde el director estuvo rodando, y algunos de sus habitantes, que aparecieron como extras, nos cuentan sus experiencias, lo más curioso de todo es que conocemos tanto las opiniones buenas de la película como las malas (que hay bastantes, ¿eh?). Aparte de eso, también se hacen entrevistas a varios de los actores y personal del equipo técnico, al propio Cuerda, que comenta con ese gracejo que le caracteriza algunos aspectos del largometraje, y a seguidores del mismo.
   
   De vez en cuando Martín hace altos en varios temas y entra en los muchos valores sociales e ideológicos que presentaba Amanece, que no es Poco , comparándolos con los que se viven actualmente en los pueblos, y cómo influyeron en el modo de pensar, pero si hay un elemento que domina el documental es esa Ruta de José Luis Cuerda promovida por el Ministerio de Cultura de Albacete y el Presidente de Castilla-La Mancha, donde se organiza un recorrido turístico por los pueblos que sirvieron de escenario para el rodaje dando a conocer su idiosincrasia, paisajes, comidas, etc. (vamos, que se aprovechan de la película para darse promoción).
   
   El fallo de Veinte años Amaneciendo, que no es Poco es que la directora se va parando en asuntos e historias que alargan demasiado el documental y que resultan poco interesantes, pero en general, no deja de ser un documento atractivo para todos esos amanecistas que continúan mostrando un amor incondicional por la película y cuyo número no deja de crecer.