Un ángel pasó por Brooklyn
Sinopsis de la película
Siguiendo el estilo de Frank Capra, Vajda demostró todo su talento en esta comedia de tintes sobrenaturales cuyo protagonista es un antipático e inmisericorde administrador de fincas que se verá condenado a vivir como un perro hasta que consiga ganarse el cariño de alguien.
Detalles de la película
- Titulo Original: Un ángel pasó por Brooklyn
- Año: 1957
- Duración: 90
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Opinión de la crítica
Película
6.7
91 valoraciones en total
Esta encantadora película es, en mi opinión, apta para todo tipo de públicos dado que es una película polifacética: encontramos en ella comedia, drama, romance… .Si pensamos en películas que realmente consigan tanta variedad con tan pocos recursos, veremos que no son tantas las que nos vienen a la cabeza.
Por lo general, prefiero las películas que impresionan por los guionistas y el guión que las que lo hacen únicamente por los técnicos y encargados en sobrecargar la obra de efectos especiales. Por esta razón me gusta mucho más el conjunto de películas anteriores al siglo XXI, porque al tener pocos recursos tecnológicos, se recurría más al mensaje y ello conllevaba a hacer mejor cine. Además, no creo que esto sea una rareza por mi parte pues cada vez que se estrena una película con más argumento que efectos especiales, ésta suele ser un éxito rotundo. Ejemplos de esto son películas tales como Los chicos del coro , Juno o Yo soy Sam .
Por tanto, y para concluir, les aconsejo que no se dejen engañar por su fecha de creación y que vean esta película, pues les aseguro que les agradará.
Excelente. Cine de producción española en colaboración con italianos e incluso con el británico y gran actor Peter Ustinov.
Cuenta la historia de un abogado administrador de alquileres, inmisericorde, antipático y con muy malas pulgas, que milagrosamente se verá convertido en un meafarolas, desposeido de su poder y quedándose en la calle a merced de la misericordia de quien le quiera dar algún despojo para comer. Será la lección que el universo le brindará para que aprenda el daño que estaba haciendo a su prójimo y pueda también conocer la bienaventuranza, la bondad e incluso también las malas intenciones de algunos que habitan en su propio barrio.
La película, en blanco y negro, es una auténtica obra de arte, ejemplar, propiciadora de valores humanos, con actores del mejor cine español de todos los tiempos como José Isbert o Isabel de Pomés (en el papel de madre del niño Pablito Calvo, y que no sé por qué no figura en la lista de intérpretes principales que Filmaffinity menciona sobre esta película).
Una genial película, donde Peter Ustinov corpulento y joven (entonces su figura no era la de un obeso) hace un papelazo de maravilla, humanismo y rigor.
El tercer encuentro entre Vajda y Pablito Calvo tras las memorables Marcelino pan y vino y la impresionante Mi tío Jacinto . Se trata de una fábula neorrealista que aboga por un tono fantasioso (al igual, por ejemplo, que la genial Milagro en Milán de Vittorio de Sica): un abogado depravado y usurero (Ustinov) es maldecido por una especie de bruja de barrio a convertirse en un perro feo y lastimoso hasta que alguien no le quiera.
La fábula puede resultar sencilla y todo demasiado trivial y ejemplaroide, pero aún cuando el resultado no es memorable, se nota que Vajda es lo más parecido que ha habido a Capra en el cine español, pues el conjunto pese a haber envejecido algo, sigue resultando entrañable, querible, nada afectado de lo que en otras manos hubiera devenido en sentimentalismo obvio, folletín al uso o como quiera llamarse.
Mención aparte merece la concepción que del barrio de Brooklyn se hizo por parte del jefe de decorados, quién en pleno Chamartín montó un barrio neoyorquino creíble que otorga a la película un halo pseudomágico, en este aspecto sí memorable.
Conmovedora historia realizada por el director, guionista y escritor teatral Laszlo Vajda, (polaco afinado en España autor entre otras de esa pieza de culto, El cebo y de Marcelino pan y vino), que a pesar del tiempo transcurrido desde su creación, ha envejecido extraordinariamente, nos cuenta la amistad que surge entre un niño y un despótico casero italiano que tiene amargados a sus inquilinos, en su mayoría también italianos, al que un día, cuando un pobre llama a su puerta pidiendo una limosna, ladra como si fuera un perro para que deje de molestar, situación a raíz de la cual se transforma en un autentico perro, iniciándose una serie de situaciones con ese niño de compañero, en las cuales se replantea el despótico comportamiento que tenía cuando era humano, desembocando todo ello en una bella historia, que dejando de lado el trasfondo religioso, emociona sin llegar a ser en absoluto empalagosa. Rodada en un hermoso y espectacular blanco y negro en escenarios naturales, retrata un Brooklyn resplandeciente, insólito en otras producciones de la época. Si no la has visto, hazte con ella, me lo agradecerás.
Coproducción italo-española dirigida por un húngaro afincado en España, que cuenta con un reparto español, italiano e inglés y está rodada en el distrito al que hace alusión el título de la película: Brooklyn. Todo un cóctel de nacionalidades para ofrecernos una historia encantadora y divertida, que encuadrada dentro del tópico haz el bien sabe narrar con elegancia y estilo el argumento fantástico que nos presenta su trama.
Dos años antes, Ladislao Vajda dejó su huella en España gracias a su obra más reconocida, Marcelino, pan y vino (1955), que contaba con el mismo actor que cobra vital importancia en esta película: Pablito Calvo.
En esta ocasión, la historia nos sitúa en el americano distrito de Brooklyn, concretamente en la zona donde reside un mayor número de italianos y lugar en el que se encuentra la gran comunidad de vecinos de la que es propietario el huraño y miserable abogado Mr. Bossi (Peter Ustinov) y que es el techo de muchas de esas personas que cruzaron el charco en busca de una vida mejor. Pero la pobreza de estas gentes les impide estar al corriente de pagos con el patrón de la finca, que no muestra ninguna intención de conceder prórrogas a los inquilinos para que puedan costearse el alquiler de sus viviendas. La gran antipatía de Bossi choca con una misteriosa anciana con poderes sobrenaturales que le hechiza, convirtiéndolo en un perro y condenándole así hasta que consiga ser querido por alguien.
Después, la trama va desarrollándose de forma animosa y con un ritmo adecuado que consigue que el espectador no se despiste de la historia y guarde interés sobre la misma en todo momento. Además del buen trabajo de Ustinov, al que no veremos demasiado tiempo en sus propias carnes, destaca también un gran Pablito Calvo y la convincente interpretación de Aroldo Tieri en el papel de Bruno, el ayudante del abogado Mr. Bossi y que protagoniza la cara romántica de la película. Pepe Isbert, desde la breve de su papel se encarga de copar algunos de los momentos más graciosos de la cinta, siempre pululando por el patio de la comunidad y haciendo sus pequeños trabajos de pintura.
Una película notable y muy cómoda de ver que nos hará disfrutar durante todo su metraje con una buena historia repleta de buenas interpretaciones, genial ambientación en el mismo corazón de un luminoso Brooklyn y con un trabajo canino de excepción: el perro Calígola, del que se hace mención destacada en los créditos principales de la película.