Tierra en la lengua
Sinopsis de la película
Viendo que se acerca su fin, un abuelo pide a sus dos nietos que le quiten la vida. Sin embargo, los jóvenes descubrirán algo que los llevará a hacer lo contrario: mantenerlo vivo, prolongando su agonía como un castigo por sus acciones pasadas.
Detalles de la película
- Titulo Original: Tierra en la lengua
- Año: 2014
- Duración: 89
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Opinión de la crítica
Película
5.8
90 valoraciones en total
Película en la que no sucede nada interesante. No hay ritmo narrativo ni hervor dramático, desde el principio de la película uno se queda esperando ese punto donde se muestren las verdaderas cartas del film pero este nunca aparece, no hay ese punto que cohesione las partes y las dote de significado. como punto a favor la hermosa locación donde se filmo ( el llano colombiano) y la labor del actor principal (Jairo salcedo), que pese a que el personaje esta apenas dibujado el lograr hacer con lo mínimo mucho. En conclusión la película no es mas que una postal alargada del llano, la cual en un principio te parece bonita pero luego solo reina el sopor.
Rodada con el deseo de enaltecer la exuberante naturaleza, de difícil acceso, que muestra la belleza de las montañas y los ríos, la fragilidad de una tierra virgen con pocos ranchos controlados por viejos terratenientes dueños de grandes llanos donde trabajan el ganado. A este paraje vuelve Silvio (Jairo Salcedo) uno de estos viejos, toscos y tercos hombres que sufre una enfermedad que le quita la vida poco a poco.
El abuelito vuelve en un viaje que él sabe será su último, donde perecerá. Los que no saben son sus nietos, Fernando (Gabriel Mejía) y Lucía (Alma Rodríguez) quienes le acompañan, llevan las cenizas de su abuela muerta algún tiempo atrás (que llevó una vida de palos con el viejo) para esparcirlas en la finca y los planos del lugar, todo será de ellos si aceptan acabar con su vida.
Tierra en la lengua tiene mucho de biográfico, según las experiencias del director con su abuelo, y dentro del contexto en que creció, una región similar a la del film. Estos recuerdos ayudan a formar el personaje del abuelo, un carácter fuerte, sin sentimientos, hecho con viejos moldes machistas, necio y terco. Se aprovecha esta construcción para imbuir una ficción que resulta ser una propuesta muy interesante.
El manejo del guion que tiene Rubén es deslumbrante, una introducción que mete fácilmente al espectador en este personaje y en su forma de actuar, se enfoca en los jóvenes como constructos de la narración, no nos interesan sus padres los sacamos del contexto, ellos son más atractivos y generan empatía con el público, además reflejan un claro contraste generacional de una sociedad diferente.
Dentro de su realización destacan dos cosas, por un lado planos hermosos de la naturaleza -como ya se hizo mención- pero que busca siempre dar una simetría, buscando un centro en la imagen (ya sea un árbol, un poste, o un personaje) o dividiendo la imagen en dos, con un objeto o personaje en primer plano y con un fondo natural. Por otro lado, está la idea de la cámara en mano envolviendo la acción de alguno de los personajes, transmitiendo totalmente sus emociones.
Tierra en la lengua logra presentar una dualidad en su género, trasciende el drama para ser un film bastante divertido y a pesar de esto lo que vemos es bastante ácido, un juego del director por burlarnos de cosas que no deberíamos, un humor negro amplio a lo largo del film. De mano a esto decir que tiene escenas muy violentas pero que se anexan perfectamente al relato de este personaje principal.
Quizá el clímax mayor sea aquel donde una voz en off cuenta los varios intentos de secuestro en contra del abuelito mientras se van viendo paralelamente secuencias con animales, que pueden ser de un fuerte impacto para el espectador, pero sin duda buscando ese salvajismo propio de la personalidad del viejo. Unos minutos poéticos, de lo mejor de la película.
Para finalizar no se puede dejar de lado esa corta pero sustanciosa incursión de la guerrilla en pantalla. Primero la forma en como es presentado, como salen del bosque, la sorpresa en la sala de cine, ansiedad y miedo por saber que pasará y posteriormente, cuando se van cómo vuelven a introducirse en el grueso del bosque hasta perderse uno a uno, impresionante.
Es casi como una relación de amor/odio, esa perspectiva de una lucha que hace muchos años dejó de tener sentido, de jóvenes que se pierden buscando el bienestar que ellos creen correcto para su país, pero que lo único que ha dejado son vidas perdidas. La canción que Fernando les dedica va de la mano totalmente con esta reflexión, la dedica a la laboriosa lucha y a sus ideales, que letra.
Una grandiosa muestra de cine colombiano y latinoamericano. Si se preguntan porqué habló de abuelito a pesar de lo áspero y rudimentario del personaje, al ver el filme se darán cuenta, un simple plus.
Tierra en la lengua, película del director colombiano Rubén Mendoza, trata de un viejo (Jairo Salcedo) que ya esta pronto a morirse y le pide a sus nietos que lo maten para ya por fin descansar y acompañar a su esposa.
Tenia demasiada expectativa en esta historia, sin embargo no cumplió con lo que esperaba, al guion le falto trabajo en algunas escenas, el resultado, varios momentos lentos que no llegaban a ningún lado.
Rescato lo humano de la producción, al mostrar el retrato de muchos ancianos que solo esperan la muerte para ya terminar con la vida que solo les dejo desgracias, enfermedades y mucha tierra en la lengua la cual expresan en sus últimos momentos.
Reciente trabajo del director colombiano Rubén Mendoza, que tuvo su estreno mundial en la última edición del FICCI, en donde además se llevó el premio a la Mejor Película en la Competencia Oficial Ficción. Era una de las películas que más esperaba ver en todo el festival, ya que Mendoza me parece uno de los cineastas colombianos más notables y destacables que buscan nueva formas de expresión a través del cine, lejos de la mediocridad y los superficial, que es lo que abunda en el cine colombiano. Además de que era el director de la recordable La Sociedad del Semáforo (2010).
Lo que más me llamó la atención del filme, además del director, fue esa interesante sinopsis, es uno de esos temas que sabes que de antemano, con un buen trabajo detrás de cámaras puede dar como resultado un peliculón. Pero entrando ya en materia, antes de la proyección del filme y del discurso del director, se proyectó un nuevo cortometraje del director, que fue supervisado y alabado por mismo maestro Abbas Kiarostami en su realización. Luego de ver el contemplativo corto, inició el filme con algunas imágenes que mostraban grabaciones familiares de antaño, lo que al parecer fueron grabaciones personales de la infancia del director, lo que le da inmediatamente la etiqueta de historia documental o autobiográfica. Luego de esa introducción, son presentado los tres personajes sobre los que girará toda la historia: Don Silvio y sus dos nietos.
El filme en la primera parte me mantuvo neutral, tiene una muy buena fotografía e introducción de los personajes, además de una excelente dirección e interpretación principal, a cargo de Don Silvio. El ritmo es creciente, donde vemos que cada vez más crece la intriga, la angustia, el sufrimiento, desembocando en un tramo final donde alcanza su mayor fuerza. Absolutamente todo ese tramo final, así como el filme en general se encuentra realmente bien rodado. Es decir, la película tiene muchos momentos de gran cine, pero como obra en general no le vi fuerza y contundencia que estaba esperando. Lo que trataré de explicar a continuación:
No le vi un fondo a la historia o un eficaz aprovechamiento de todos los recursos o posibilidades que esta poseía, a pesar de la historia tan interesante y oscura que tenía en las manos. Desde mi punto de vista, le faltó un mejor tratamiento, ya que además de generar una emoción y reacción directa del espectador, quien en diversas oportunidades sólo se ve sorprendido por escenas violentas, explícitas y planos posteriores a estos momentos, que vi realmente innecesarios. En el tramo final, aunque sube el ritmo, se desinfla un poco, falta contundencia, tan necesaria en este tipo de historias, y en ocasiones no le encuentro sentido a algunos personajes, por lo que la historia en sí pierde fuerza. Por eso, a pesar de todas sus virtudes, me pareció ligeramente decepcionante, porque en realidad le tenía muchas expectativas. Esperaba mayor contundencia de Rubén, y esperaba que todo lo explícito y visceral tuviese el respaldo argumentativo y sólido de la historia. Pero de todas formas me alegró mucho el premio que obtuvo en el FICCI. De igual forma, queda muy recomendada, y sobra decir que de lejos es de lo mejor que he visto en el cine colombiano en los últimos años. Y esperemos ansiosos el próximo trabajo de Rubén.
http://asbvirtualinfo.blogspot.com/2014/03/comentario-pelicula-tierra-en-la-lengua.html
Rubén Mendoza es un cineasta colombiano que se dio a conocer por La sociedad de semáforo , una interesante historia de seres marginales para hablarnos de esa jungla del asfalto que es la capital colombiana. Pero es también un tratado sociológico sobre el tema de marginalidad. Ahora, con base en esto, podemos escribir que es una de las mejores películas colombianas al respecto.
Ahora, compitiendo en FICCI 54 con Tierra en la lengua , gana el India Catalina a la mejor película. En esta oportunidad el cineasta nos introduce un personaje mayor, cascarrabias que orienta el destino de sus nieto a su antojo. En este contexto, este buen filme plantea los antojos de quienes luchando contra su propia voluntad, seducen con mucho artilugio que en la vida siempre se hace lo que uno quiere. Esa propuesta de las decisiones personales porque yo soy así y bien verraco, muestra rasgos de ese patriarcado que en muchas familias colombianas se da, precisamente por una sociedad machista.
Por lo demás, una historia lineal si se quiere, pero que en manos del personaje protagonista (caracterizado por Jairo Salcedo) aduce que mientras agonizo, yo mando. Y es que esta historia patriarcal, bien nos remite a muchos otros personajes del cine y la literatura, sobre todo cuando la muerte no está de vacaciones.
Gonzalo Restrepo Sánchez
Visie: http://www.elcinesinirmaslejos.com