Strawberry Panic! (Serie de TV)
Sinopsis de la película
Serie de TV (2006). 26 episodios. Basada en las historias escritas por Sakurako Kimino, la historia trata sobre las vidas de un grupo de chicas adolescentes en tres escuelas diferentes que comparten un solo campus y los sentimientos amorosos que van surgiendo entre ellas. Todo comienza con la llegada de la guapa nueva alumna Aoi Nagisa, que se da cuenta de que ha acabado en un lugar extraño, estricto, en el que pronto se convertirá en el centro de las miradas. Etoile es la alumna que más alto se sienta, la Etoile en ese momento es la misteriosa Shizuma, que comenzará a sentir atracción por Nagisa.
Detalles de la película
- Titulo Original: Sutoroberî Panikku! (Strawberry Panic!) (TV Series)
- Año: 2006
- Duración: 28
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Opinión de la crítica
6.5
51 valoraciones en total
Porque esta es la temática de la serie, directamente y sin ningún tipo de excusa o justificación: Yuri o lo que es lo mismo, relaciones lésbicas, con todos los personajes femeninos sin excepción. A este respecto el anime es tan exagerado y tan pasado de vueltas que acaba siendo hasta paródico del tipo de serie que surgió como churros tras el éxito de Maria-sama ga Miteru (verdadera obra maestra esta última), a la vez de muy divertido y ligero, por eso tengo que apreciar y recordar la serie con una sonrisa pese a lo tramposa que es.
La historia es perfectamente previsible: Aparece una chica nueva monísima, muy buena persona, algo torpe y timidilla (estereotipo con patas), y el primer día se encuentra con la chica más guapa, misteriosa, sofisticada y elegante de la escuela (otra que dios guarde), ambas quedan fascinadas una con la otra y ambas tienen un carro de pretendientes adicionales de fondo para darle vidilla a las situaciones.
En el desarrollo de la serie: muchas tramas secundarias, muchos personajes de reparto (algunos muy divertidos) y un montón de situaciones que pasan directamente a cachondearse de los remilgos generales del género. A destacar dos partes bien diferentes: la primera mitad de la serie, donde se nos presenta a los personajes en historias tiernas y muy graciosas, y la segunda mitad, donde se lían la manta a la cabeza, las chicas se vuelven lobas en celo y nivel de tocamientos y magreo por capítulo se dispara. En esta segunda parte es donde se encuentran las partes más dramáticas del anime (que aún así no se libran de un sutil toque de parodia) y donde las diferentes lineas argumentales se cierran (con un final cojonudo, sobre todo comparado con la costumbre de dejar las cosas en el aire).
A nivel técnico, unos diseños preciosos y muy estilizados, con una animación bastante de baratillo, y una banda sonora horrorosa, vamos, lo habitual en estas producciones sin demasiado presupuesto.
Resumiendo, una serie con bastantes fallos, y que aún así es consciente de ellos y no trata de ocultarlos, sino que los aprovecha para hacer guiños al espectador. Entretenida, facilita de ver y bastante divertida. No alcanza tampoco un gran nivel en ningún momento, pero sabe mantenerse en su terreno y no aspirar a más de lo que es, se deja apreciar y consigue crear a algunos personajes bastante buenos.
Coincido en que el parecido sospechoso de esta serie con María Sama ga Miteru es innegable, incluso me atrevería a decir que es una especie fanpic con final, algo que de momento no tenemos de la serie madre. Se pueden ir extrayendo elementos de una y otra y establecer las analogías, pero no voy a incidir más en ello.
La serie, como no podía ser menos, tiene unos perfiles bien claros y definidos de los personajes tipo que no deben faltar en un yuri: la persona dominante en la relación, también conocida como Tachi, la débil y tímida o Neko, ambos con sus rasgos correspondientes, la mujer perfecta, auténtica estrella del colegio frente a la simpática, dulce, vital e insegura. Así mismo, el humor y las situaciones graciosas también son muy parecidas al resto.
Una agradable novedad respecto a otras series del mismo género es la evolución en la personalidad de los personajes, y es que en Shizuma se pueden encontrar signos de flaqueza, errores y muestras de coraje y personalidad en Nagisa . En otros personajes secundarios, como es el caso de la mala, también lo hay. Otra diferencia es el final, en este Yuri sí que hay un final claro, lleno de tensión, emoción, digno de las mejores comedias románticas, que mantienen al espectador en vilo deseando un final feliz.
La serie engancha desde el primer momento, los capítulos están muy bien entrelazados y las tramas que suceden en cada uno de ellos ofrecen la dosis exacta para que esperes con ansia el siguiente y aunque hay algunos personajes más sosos que un bocadillo de harina, otros como por ejemplo Yaya- chan, son dignos merecedores de un spin-off.
Sólo le pondría un pero… o los creadores tienen pocos recursos para resolver las presentaciones o los personajes deben tener alguna carencia vitamínica y/o de minerales, sino no me explico tantos desmayos. También resulta graciosa, por repetitiva, la imagen que aparece después de cuando una pareja se besa. Y es que la serie es buena, pero con un poquito más de imaginación y un pelín más de chicha, el alumno podría superar al maestro
A pesar de eso y a la espera del final (si es que existe de Maria Sama…), es la serie Yuri que más me ha gustado.